Mientras hojeaba los periódicos aquella mañana experimenté una melancolía extraña. Más que recordar el mundo del pasado, tuve la sensación de conocerlo por primera vez.
|
Mientras hojeaba los periódicos aquella mañana experimenté una melancolía extraña. Más que recordar el mundo del pasado, tuve la sensación de conocerlo por primera vez.
|
La diferencia es que yo sabía, o creía saber, que los monstruos no existen. Al menos, no separados de las personas que los transportaban.
|
... el pasado no es sólo una memoria inmaterial, una proyección mental intangible; el pasado es denso, respira, se mueve hacia nosotros.
|
Aquel encuentro me hizo ser consciente de que el pasado no es solo una historia inmaterial, una proyección mental intangible; el pasado es denso, respira, se mueve hacia nosotros.
|
Él era el protagonista de la noticia. Su hermana, tan solo la víctima.
|
La investigación acerca del crimen de mi amigo había sido el detonante de todo, pero el auténtico crimen sobre el que yo escribía – el único, en verdad, que podía afrontar – era el que yo había cometido con mi pasado.
|
De eso era de lo que había huido. De ese control, de esa pulsión de chisme, de esa especie de derecho que parecen tener los otros a preguntar y a ordenar la vida ajena, y sobre todo de esa necesidad de justificación constante de las cosas que uno hace.
|
Y supe entonces claramente que nada se borra del todo, ni el bien ni el mal, que el pasado permanece y nos acompaña eternamente, como una sombra que no siempre podemos descifrar
|
Las palabras siempre fallan; la escritura nunca llega al fondo de las cosas. Con suerte, lo bordea, lo toca, puede rozar la herida. Pero ese lugar siempre permanece oscuro, opaco, indescifrable, como los garabatos que ahora decides desechar.
|
Qué fácil era ahora guardar esas imágenes sin acudir a las fotocopiadoras y tener que pedir permiso a los bibliotecarios, que siempre miraban con celo los documentos, como si la historia les perteneciera.
|
Gregorio Samsa es un ...