La chica del tren

La novela está narrada en primera persona por tres personas diferentes: Rachel, Anna y Meghan. La historia de Rachel y Anna se narra en el momento presente. Megan por su parte, nos presenta su historia varios meses antes.

Tengo que decir que lo que más me impactó de la novela es el punto de vista de la protagonista. Personalmente, no llegué a empatizar con ella, mas bien me daba mucha pena ver como debido a una serie de circunstancias acaba ahogando todo en alcohol y como debido a este circulo vicioso Rachel se va hundiendo más y más.

La narración es bastante ágil, por lo que el libro no se hace pesado de leer. Eso sí, tal vez el argumento es un poco predecible. No he visto la película, de hecho me dijeron que leyera el libro, que su adaptación dejaba bastante que desear, por lo que no sabia nada mas alla de lo que leí en algunas reseñas, pero que tampoco develaban nada. No es que sea un final evidente, pero cuando llevaba aproximadamente la mitad del libro ya intuí un poco el final.

La trama o el misterio sobre el que se sostiene la historia no es excesivamente elaborada en esta novela. Esto, por una parte, está bien para las personas que no estén acostumbradas a leer este genero, que quieran iniciarse en el o para quien le apetezca disfrutar de un libro con el que no se requiera concentración. En cambio para personas acostumbradas a los thrillers pues se les va a quedar un poco escaso.
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