Siempre Blue

Debo comenzar diciéndoles que tengo sentimientos encontrados con esta novela ya que de verdad tenía muchas ganas de leerla pues el libro anterior de la autora, Máscaras, ha sido una de las mejores lecturas que he tenido y obviamente me esperaba que este segundo estuviera a la altura. Para mi desgracia eso no paso y aunque este no es un mal libro, no tiene punto de comparación por el otro.

Dejando un poco eso de lado, aunque no cumplió con todas mis expectativas, si ha sido un libro que he disfrutado y creo que eso se debe en mayor parte a los personajes, como Blue por ejemplo, que es una protagonista llena de contradicciones que me ha encantado desde el principio. No se confundan porque con esto no quiero decir que sea como una de esas protagonistas bipolares que hay por ahí, sino que Blue es todo un rompecabezas que hay que ir armando poquito a poquito. al principio la conocemos como una mujerzuela cualquiera a la que le importa bien poco todo en la vida, pero cuando las hojas van pasando vamos descubriendo que en realidad sólo es una chica asustada que trata de buscar su lugar en el mundo.
Disfruto mucho, pero mucho cuando un personaje tiene una gran evolución y es eso mismo lo que vemos en Blue, tanto es su cambio que al final parece incluso otro personaje.
Evidentemente todo este cambio no pasa de un momento a otro sino que se toma su tiempo, lo que hace que Blue sea un personaje complicadísimo, tanto que hay veces que ni el mismo lector será capaz de comprenderla, pero toda esto al final se ve recomenzado.

Y mientras Blue es apática y hermética, Darcy es prácticamente un sol lleno de optimismo que siempre está dispuesto a ver lo mejor de la situación y de las personas.
Generalmente no soy fan de los personajes positivos, como se habrán podido dar cuenta con respecto a Blue, suelo disfrutar más con los personajes rotos y complicados pero esta vez ha sido una acepción ya que la autora supo mezclar en dosis perfectas las personalidades tan impares de los personajes, así que cuando el negativismo de Blue llegaba a niveles alarmantes, llegaba el bueno de Darcy a alegrar las cosas.
Es decir que estos dos son dos personajes que se complementa de una manera brillante.


Otro aspecto que he disfrutado del libro es el tema de la adopción. Si no me equivoco este es el primer libro que leo que trata de una manera muy abierta y real el asunto de la adopción, aquí veremos historias donde la adopción ha sido maravillosa pero también veremos una cara muy mala que por desgracia es muy real.


La mayoría de personas somos más de lo que se ve a primera vista, Wilson. Por desgracia, en muchos casos lo que no se ve es malo. Son cosas que dan miedo, que duelen. Ahora sabes tantas cosas escalofriantes y dolorosas sobre mí que me sorprende que sigas a mi lado. Diría que me calaste desde el primer momento. Pero te equivocas en una cosa. Las chicas como yo sí que nos fijamos en los chicos como tú, lo que pasa es que no creemos merecerlos.
Quizá el único detalle que encontré en este libro es su clasificación pues en verdad no creo que sea muy juvenil ya que trata temas muy complejos de una manera tan real que a veces resulta estremecedor.
Fuera de ese pequeñito detalle ha sido una lectura agradable, llena de sentimientos, reflexiones, esperanza y mucha redención.