"... ahora viene lo bueno: los secundarios. La señorita Aldclyffe y Aeneas Manston son tan buenos personajes que eclipsan totalmente a Cytherea. En cuanto a la señorita Aldclyffe me encantó cómo manejaba las cosas a su voluntad para que todo sucediera de la forma en que ella lo deseaba. A pesar de su maldad, tiene un punto de encanto y de ternura (y más conociendo su pasado) que la hace un personaje bastante ambiguo. Hay una escena lésbica entre ella y Cytherea que, cuando la estaba leyendo, no estaba segura de estar interpretándola bien, porque me parecía extrañísimo que Hardy hubiera escrito algo así en esa época. Luego me enteré de que precisamente por esto el libro tuvo que ser publicado con un seudónimo. Y después de la señorita Aldclyffe viene Aeneas Manston, el malo de la función que a mí me resultó lo mejor de todo el libro: guapo, inteligente, atractivo y sí, malo malísimo. Pero por muchas maldades que hiciera (no os las voy a contar, pero no tienen desperdicio) yo hubiera deseado que Cytherea se quedara con él, porque además de estar enamorado de ella era mil veces más interesante que su adorado Edward. ..." Reseña completa en nuestro blog Enlace: http://rustisymustis.blogspo.. |