El ruiseñor

En mi primer encuentro con la gran Kristin Hannah no he podido sentirme más que feliz por haber tenido la oportunidad de leer una novela como esta.

Se nota cuándo una autora ha trabajado y se ha documentado, cuándo ha escrito el libro con mimo, cuidando los detalles y cuándo hay un talento que se ha sabido aprovechar.

El Ruiseñor ha sido todo un viaje de emociones y una aventura que, sin duda alguna, releeré en un futuro.


¿Qué vamos a encontrar en esta novela? Una guerra que todo lo destruye. La lucha por la supervivencia. Familias rotas. Enemigos crueles. Una esperanza y una ilusión. Pérdida y amor.

Isabelle y Vianne, dos hermanas francesas, verán sus vidas truncadas con el comienzo de la Segunda Guerra Mundial y la ocupación alemana.

Atrapadas en la zona ocupada, ambas hermanas tratarán de sobrevivir, cada una a su manera, luchando por un país que parece perdido.

En esta novela se describen emociones como la ira, la esperanza, el valor, el amor y la lealtad de una manera tan intensa como solo las situaciones extremas pueden provocar.

¿Qué hacer cuando crees que no tienes nada más que perder, pero descubres que no es así?

Vianne e Isabelle son muy distintas, pero ambas luchan por proteger lo que más aman: Vianne lo hará por su hija e Isabelle por su país.

El modo en que las dos hermanas chocan, se separan y cada una toma su camino. Cada obstáculo al que se enfrentan y su forma de sentir y vivir sus vidas llevará al lector a un viaje a lo más oscuro de la guerra y las crueles consecuencias.

Nos encontramos una historia llena de sentimientos, amor y traición, guerra y lucha por la supervivencia, con un lenguaje muy cuidado, giros que sorprenden y una trama que resulta interesante y no se hace en absoluto pesada.

En algo menos de 600 páginas, acompañamos a las hermanas Rossignol a lo largo de toda la Segunda Guerra Mundial y los cambios que provocó en ellas.


Mensaje de la novela: La importancia de mantener nuestros valores intactos, tratando de ser la mejor versión de nosotros mismos.

La lucha por la supervivencia y por ayudar a aquellos que lo necesitan, dejando de lado las diferencias que pueda haber entre nosotros.

Y, ante todo, la importancia de recordar el pasado para no repetir los mismos errores en el futuro.

Personajes: Todos y cada uno de los personajes de esta novela están cuidadosamente construidos, son complejos y van evolucionando y madurando a la vez que el tiempo avanza en la novela.

Vianne e Isabelle son las protagonistas, pero los personajes secundarios van a resultar de vital importancia y aportan matices a la trama que resultan de lo más interesantes.

A través de los personajes, Kristin Hannah nos muestra diferentes sentimientos y emociones, y cómo las actitudes de los personajes varían dependiendo de con quién interactúen, dotando así de mayor credibilidad y realismo a la obra.

Los cambios de Isabelle son los más significativos, pues pese a su impulsividad, se ve obligada a madurar a marchas forzadas si quiere mantenerse con vida.

Vianne, por su parte, encontrará una valentía de la que creía carecer para poder proteger a su familia y a aquellos a quienes ama.

En cuanto a los personajes secundarios, los alemanes Beck y von Richter me parecen un claro ejemplo de cómo la guerra muestra la realidad de cada persona: mientras Beck está luchando por su país, sin dejar de lado sus buenos modales y el respeto por los demás, von Richter disfruta causando dolor al enemigo y sintiéndose superior a los demás; es cruel y no le importa en absoluto lo que suceda al resto, solo quiere disfrutar y vengarse.

Lo que más me ha gustado: La narración de la historia, la delicadeza con la que se trata el tema de la guerra y lo cuidado que está cada detalle.

Los personajes, tan diferentes, reales e interesantes. Incluso los que menos me han gustado estaban tan bien creados que me han fascinado y me han hecho sentir.

Cómo he acompañado a Isabelle y Vianne a lo largo de la novela, sintiendo su dolor, sus esperanzas y su lucha. Cómo he podido empatizar con ellas y ver su evolución.

Me ha gustado tanto la novela, que podría extenderme párrafos y párrafos, pero debo contenerme para evitar los spoilers.

Lo que menos me ha gustado: Si tengo que sacar algo negativo, sería el inicio de la novela, pues es un poco lento hasta que arranca. Sin embargo, una vez vas conociendo a los personajes, la novela coge tal agilidad que resulta adictiva y no quieres soltarla.

Conclusión: El Ruiseñor se ha convertido en una de mis novelas favoritas del género histórico, haciéndome sentir, disfrutar y sufrir por sus personajes.

Llegar al final me dejó un poco rota, pero la vida a veces no es como deseamos y eso, a su modo, la hace más intensa e interesante. Levantarnos tras cada golpe y seguir adelante para disfrutar de sus partes más bellas.

Una historia con un gran mensaje, que sin duda alguna os recomiendo leer.