¿Y si pudieras meterte en la mente de un niño con síndrome de Asperger y ver el mundo a través de sus ojos? Pues deja de imaginar y atrévete a leer esta emocionante historia, que esconde más de lo que la sinopsis revela. Nunca resulta sencillo dar voz a un niño con necesidades educativas especiales sin caer en la parodia o hacerle parecer absurdo. Sin embargo, el autor logra mostrarnos una realidad creíble y desde el cariño, que ayudará al lector a empatizar con los niños que padecen este trastorno. Una preciosa historia que no te dejará indiferente. |