Perro apestoso

En general llevo regular las series tipo Rasi, Isidora Moon, Unicornia y lo que viene a ser las series infantiles para los más peques de la casa. Son libros que leo por compartir un rato con mi hija más que por la historia en si y que a veces ni las ilustraciones ni las ediciones están cuidadas.
Perro Apestoso está editado por Blackie y se nota, además las ilustraciones son frescas y divertidas, además de acompañar bien a la historia, de manera que ayudan a seguir la el hilo argumental a los niños que les cueste un poco la compresión lectora.
Nuestro protagonista es un desastre, vive en un cubo de basura y su mejor amigo, Gatochato, es un gato que se quedó plano cuando de pequeño le pasó un camión por encima. Es, además, un animal bastante tonto y inocente pero que despierta toda tu ternura porque tiene un gran corazón y ganas de ayudar a todo el mundo, aunque pocas veces consigue averiguar cómo.
La narración empieza con Perro Apestoso yendo en busca de un amo, y mientras busca le pasan un montón de cosas que nada tienen que ver pero que nos entretendrán un buen rato. La idea no es muy original pero los protagonistas si, porque Perro Apestoso es realmente tonto, no de esos tontos que a veces tienen momentos de lucidez, sino que es simple y llanamente tonto, para los momentos que la inteligencia es imprescindible para la trama echan mano de Gatochato, que ayuda a encauzar los pensamientos absurdos y poco útiles de nuestro protagonista.
Teniendo en cuenta que es una historia para niños tiene bastante vocabulario, en el límite entre lo adecuado para aprender nuevas palabras y que se haga pesado por tener que parar demasiado. Y en general se disfruta bastante, tal vez porque es un soplo de aire fresco entre tanto niño con super poderes y novelas de misterio.
PARA QUIEN: Amantes de los perros, niños que sepan captar la ironia.
LO MEJOR: Gatochato, la tortuga sin caparazón, el loro que no habla y el pato mareado.
LO PEOR: El caniche con flequillo.