Buenos días lectores, os traigo otro cuento para peques que a pesar de estar dirigido a niños, esconde en mi opinión una valiosa crítica a la sociedad que a veces parece olvidar, que los niños, niños son y tienen una perspectiva diferente de la vida. Nos cuenta el día a día de Nicolás, un niño travieso de unos siete años donde los haya, que actúa de quebradero de cabeza de sus padres y su profesores compartiendo con el lector sus rutinas, pensamientos y juegos. Es una historia divertida, que va a sacar más de una sonrisa y que tiene unos entrañables personajes que te acompañan a lo largo de las aventuras del muchacho. Me ha recordado a los libros de mi infancia sujetos a mis deseos que como pequeña lectora, trataba de descubrir. Es un libro muy cortito, de letra más bien grande y una gran apuesta, desde mi punto de vista de cara a niños, que recién comienzan a leer. |