Paz, amor y death metal

Es muy fuerte sobrevivir a un atentado donde muchas personas han fallecido a tu alrededor. La verdad es que creo que es muy difícil ponerse en el lugar de esa persona, de esas personas, que estuvieron allí aquella noche, porque el horror que debieron sentir no es nada comparable con lo que nosotros presenciamos tiempo después a través de nuestras pantallas de televisión.

Gracias a este libro he podido acercarme un poco más a ellas, a esas víctimas que estuvieron en el concierto en la Sala Bataclan, a las que perecieron, a las que aguantaban la respiración para no ser encontradas en aquella habitación, a aquellas que con palabras de aliento, ayudaban a sus semejantes para que no tuvieran miedo. Pasé con ellos el momento de alivio de saber que aquellas personas con las que habían ido estaban sanas y salvas también. Luego...

La verdad es que no puedo llegar a explicar todo lo que este libro te hace sentir, de las cosas que te hace pensar. Es una historia que ocurrió de verdad, que sus protagonistas están vivos por suerte y que ha sido un camino largo hasta llegar aquí.

Me gustaría que lo leyérais porque sé que será una de vuestras mejores lecturas. Te hace entender muchas cosas y vivirlo como en primera persona, ya que es Ramón el que la narra, uno de los supervivientes.