Gómez-Jurado nunca (me) falla. En esta ocasión el entretenimiento llega de la mano de una historia donde masonería, nazismo, una historia de amor y un malvado malísimo provocan que las páginas vuelen... y tu imaginación con ellas. El final, independientemente de su verosimilitud, me impactó y me gustó a partes iguales. |