Encerrados

Leí "Encerrados" por pura chiripa, la verdad. Estaba en la cama y había terminado otra lectura y como no sabía qué libro elegir a continuación, empecé a leer la muestra que me había bajado de Amazon de este libro y cuando me di cuenta, la muestra se había terminado y yo me había quedado con las ganas de más, así que… tuve que seguir.

En dos días lo despaché, y es que me enganchó de una forma que no esperaba, la verdad.
Aquí no vais a encontrar personajes agradables y simpáticos, más bien todo lo contrario. Los cuatro personajes encerrados en el ascensor son fríos, calculadores, ambiciosos, egoístas, y a medida que los vas conociendo, mientras intentan salir de esa situación, estás deseando que se queden allí dentro para siempre. Los cuatro trabajan juntos y aunque se conocen muy bien, todos son también rivales y todos esconden cosas que los demás no saben y a medida que vayan aflorando, el espacio en el que están encerrados, les dará la sensación de ir encogiendo.

Sin embargo yo como lectora estaba disfrutando de lo lindo y es que este tipo de personajes despiertan lo peor de mí 😂😂.

Narrativamente es un libro muy ágil y para mí no ha perdido interés en ningún momento, más bien todo lo contrario. Trata temas muy importantes, como el acoso laboral (o no), las relaciones de pareja, la amistad, la explotación laboral sin límite… La verdad es que teniendo en cuenta que todo pasa dentro del ascensor creí que podría resultar un libro monótono y quizás por eso no espera que me enganchara tanto, pero lo cierto es que como la situación les obliga a recordar cosas del pasado, nos movemos en tiempos diferentes y eso hizo que para mí la lectura fuera muy amena.

A mí me ha gustado mucho. No se va a llevar un premio literario, pero me dio lo que buscaba. Entretenimiento.

Este libro nos presenta a cuatro grandes ejecutivos,que deciden acudir a una cita en un rascacielos que todavia no ha sido inagurado,la sorpresa vendrá cuando entran ene l ascensor y las puertas se cierran,las luces se apagan y descubren que están ante un escape room,para salir con vida deberán de trabajar en equipo y dejaran las rendeillas,pero que secretos esconden,los personajes son frios y calculadores,como los ejecutivos,una lectura de suspense hasta el final,para mi ha sido adictiva y queria leer más y más alya tensión de principio a fin,resumen un juego mortal donde vencer significa sobrevivir.

Si hay por aquí alguien que padezca de claustrofobia, que no piense que no es su libro, porque a mi no me la ha dado por pensar que están en un ascensor, ha sido por la parte en la que se cuenta cómo son los ritmos de trabajo de Wall Street. Un mundo sin horarios, sin corazón, despiadado y donde da igual lo que hayas dado en un momento determinado. Se radiografían perfectamente las miserias humanas. Eso sí da miedo, y no la parte del ascensor en sí 😅

Hay partes del libro que están demasiado descritas, como por ejemplo algún personaje secundario o incluso de tercera línea, del que se dan demasiados datos que no conducen a nada. Y luego hay partes (del final sobre todo) más interesantes que se cuentan demasiado rápido para mi gusto.

Me ha entretenido todo el rato, son capítulos no muy largos que se van alternando entre lo que pasa en el ascensor y un personaje de fuera del mismo. Yo he visto una película americana en mi cabeza mientras lo estaba leyendo. El libro entretener, entretiene, aunque luego tenga sus sombras.

Un equipo de cuatro ejecutivos que son tiburones en sus trabajos, con un gran éxito profesional y con su vida dedicada exclusivamente a su ámbito laboral, acaban atrapadospor un extraño juego en un ascensor.
La historia te hace sentir claustrofobia, asfixia.Vives junto a ellos mucha tensión. No se puede decir mucho sin revelar la trama, salvo que a pesar de que la historia transcurre en un ascensor, es mucho más.
Se desarrolla con capítulos alternos en dos tiempos, por un lado el presente, encerrados en el ascensor, y por otro, tiempo atrás te habla sobre este grupo de ejecutivos y otras personas relacionadas con su trabajo. Estas deseando saber más sobre lo que paso antes de acabar ahí y porqué, y sobretodo por quién.
Te mantiene intrigada y tensa, la verdad que te atrapa. Lo único que el final me parece un poco inverosímil y se me hace poco creíble.

Última lectura del año terminada. Este libro cayó en mis manos, porque una compi de lecturas me lo recomendó. Me gustan los thriller, y este no se ha quedado atrás. Tenemos a cuatro ejecutivos que trabajan juntos, pero que a la vez son rivales, encerrados en un ascensor, en el que se ven involucrados en un juego, que tendrán que unirse para ir resolviendo pistas, pero a la vez saldrán a la luz secretos de cada uno. Son manipuladores, egoístas, avariciosos, dispuestos a todo por escalar en la empresa financiera para la que trabajan. Sara es una chica humilde, que entra a trabajar en la misma empresa. Allí se trabaja sin descanso, se sufre de acoso laboral. Sara empieza a hacerse colega de una compañera de trabajo, la cual fallece, y todo apunta a suicidio, pero Sara va descubriendo cosas, que le hacen pensar que ha sido asesinada. Los capítulos van alternando con los personajes que hay en el ascensor, uno y otro contado por Sara, desde el pasado hasta el presente. Para nada me esperaba ese final, me ha sorprendido.
El libro engancha bastante. Lo recomiendo

Un ascensor.
Cuatro altos ejecutivos encerrados en un ascensor luchando por conseguir el mejor puesto.
¿Existe una salida?

Cuando Sara es contratada por una de las mejores empresas que existen, apenas se lo puede creer. Su vida da un giro de 180°.
Sin embargo, se da cuenta de que no es oro todo lo que reluce; debe entregarse en cuerpo y alma a su nuevo trabajo, trabajar hasta horas intempestivas, dormir poco y estar siempre perfecta.
Pero a cambio tiene todo lo que siempre ha soñado: dinero, lujos, un novio abogado muy importante y el trabajo de sus sueños.

Por otro lado, cuatro altos ejecutivos de esa misma empresa, acabarán encerrados en el ascensor de un edificio todavía en construcción. al principio creen que se trata de un inocente Escape Room en el que deben dar lo mejor de sí mismos para conseguir un mejor puesto, sin embargo, enseguida descubrirán que es más que un simple juego, y que no luchan por un puesto, sino por sus propias vidas.

Una trama que podría haber sido increíble si no fuera por lo mal llevada que está en mi opinión. Me he sentido engañada, pues según lo que leí en la sinopsis esperaba otra cosa. En los capítulos de Sara hay mucha paja, incluso también en las partes que nos muestran el ascensor conforme avanzamos. Hay incoherencias y, lo que se nos promete al final, no llega a cumplirse, dejando al lector con un sabor amargo.

Por otro lado, destacar el personaje de Sara. Se nos presenta como alguien ingenuo que acata todo lo que le piden, sin pensar por sí misma y sin principios, y de repente, de la noche a la mañana, se convierte en alguien perspicaz, imaginativo e inteligente.

Esperaba un thriller en todo su esplendor y la verdad es que ha sido decepcionante para mí.

Como puntos a favor, diré que la pluma es bastante ágil, se lee muy rápido, y en varios momentos estaba muy intrigada y hasta enganchada.

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¡Me ha encantado! Me ha sorprendido para bien. Inicié la lectura pensando que leería un thriller entretenido, y he terminado leyendo un gran thriller que, además, y para mi su punto más fuerte, te adentra en una historia y un drama sobre las dos caras del ser humano, tratando temas tan importantes como el acoso, explotación laboral, la ambición sin límites, la amistad, el amor, la conveniencia… y muchos otros temas más que hacen de este libro algo muy completo.
El libro se divide en dos momentos, alternando capítulos. En uno de ellos nos encontramos dentro de un ascensor con cuatros de los personajes del libro, que forman parte del mismo grupo de trabajo, luchando por resolver lo que parece una especie de Escape Room que les ayudará a ganar puntos dentro de la empresa. Y, por otro lado, volvemos años atrás para vivir la historia pasada de otra de las protagonistas, Sara Hall que también trabajó en su momento con el grupo.
La descripción y la evolución de personajes es muy buena, para mí el punto fuerte de la novela, la crítica hacia determinados problemas actuales me parece excepcional, y el desarrollo de la historia todo un acierto. Y todo esto dentro de un thriller trepidante que te hace que quieras seguir leyendo.
En conclusión, más que recomendable para amantes del género e incluso para los que no. Un thriller con tintes de realidad y de crítica a una sociedad capaz de todo por conseguir sus objetivos.

Encerrados es un thriller psicológico sobre cuatro compañeros de trabajo que se quedan encerrados un viernes por la tarde en un ascensor del edificio de oficinas en el que trabajan. Todos han recibido un mensaje que les cita para lo que sospechan será una entrevista para ocupar un puesto privilegiado que ha quedado vacante recientemente en la empresa. Sin embargo, Sam, Vincent, Jules y Sylvie se quedan encerrados en el ascensor nada más cerrarse sus puertas. Se encuentran ante un Escape Room, o al menos eso es lo que piensan en un primer momento. Creen que los altos cargos tratan de realizar un ejercicio de formación de equipos para determinar quién es el más adecuado para el ascenso. Creen que solo necesitan completar el desafío y que podrán irse, pero las cosas no salen según lo planeado. Lo que parecía un juego inofensivo se vuelve mucho más intenso, angustioso y personal a medida que los participantes luchan por salir con vida.

Es una novela adictiva desde el minuto uno. Sabes que hay algo turbio desde el principio y que el objetivo del encierro en el ascensor no está orientador a algún beneficio o privilegio empresarial, sino a algo que involucra a los participantes, y que la mano misteriosa y maestra que mueve los hilos está tratando de demostrar y que admitan la culpabilidad.

Los personajes viven y se desviven por su trabajo en una empresa financiera de alto standing y que mueve infinidad de negocios y valores en bolsa. Se considera la más prestigiosa de Wallstreet y, como todo lo que se mueve en ese entorno de negocios, no es oro todo lo que reluce. Vamos conociendo a los personajes poco a poco en tercera persona del singular, salvo en el caso de Sara Hall, cuyos capítulos están narrados en primera persona del singular; y todos ellos son personas horribles, egoístas y con dobles raseros. Es lo más suculento de la trama porque se sabe de antemano que todos ocultan algo, que se mueven por el dinero y son capaces de pasar por encima de cualquier para conseguir el éxito. La pregunta del millón es: ¿Hasta dónde están dispuestos a llegar? ¿Qué se lo que han hecho y les ha puesto en el punto de mira de quién controla los mandos del ascensor? Son personajes que encajan con los estereotipos de este mundillo financiero y no nos resulta para nada extraño imaginarnos que esta ficción podría ser claramente un caso real.

Además, no podemos olvidar el escenario en el que tiene lugar la mayor parte del desarrollo de la trama: un ascensor. Megan Goldin transmite bastante bien al lector las sensaciones de angustia y claustrofobia que persiguen a sus protagonistas. Cada uno sobrelleva la situación de permanecer encerrados en un espacio tan reducido como puede, tratando, al mismo tiempo, de resolver los enigmas de ese supuesto e inofensivo Escape Room en el que se encuentran, y que durará como máximo una hora. Todo comienza como un juego, como algo que han de superar a contrarreloj y en equipo para demostrar su valía dentro de la empresa y, por ende, el ascenso tan deseado y que acompaña un generoso aumento de sueldo. Pero, cuando pasa una hora, hora y media, dos horas, y siguen sin salir de allí, comienzan a sospechar que las pistas están relacionadas con un secreto que tienen en común, y que nadie acudirá pronto a su rescate. En el ascensor todo se intensifica y eso hace que la trama se vuelva más interesante y atractiva. Los nervios empiezan a florecer, la angustia se acrecienta, la sospecha y desconfianza hace mella entre ellos... Son personajes llenos de contradicciones y capas que se irán desvelando durante el tiempo que comparten entre esas cuatro paredes de metal.

Encerrados es también una novela que destaca por el detalle; hay aspectos de la narración y hechos a los que podemos no darle ninguna importancia pero que, con el paso de las páginas, descubriremos que son datos cruciales e importantes para entender y seguir la historia. Y, como ya mencionaba anteriormente, el trasfondo de la historia guarda mucho más de realidad que de ficción dentro del marco de los negocios y las grandes corporaciones que se mueven en el mundo de las finanzas. de hecho, justo cuando comencé la lectura de esta novela, comencé una miniserie llamada Devils, basada en otra novela, y que presenta también un entorno similar de corrupción dentro de financieras y empresa que juegan y manejan el dinero de sus clientes. Creo que gracias a que la lectura coincidió con esta serie, he sentido también más auténtica la red de secretos, mentiras, poder, engaños, manipulaciones, egoísmo, dinero, y un largo etcétera, que refleja la pluma de Megan Goldin, con un desenlace que se intuye casi desde el principio, pero que no deja de ser bueno.

En resumen, 'Encerrados' es un thriller adictivo, inteligente e interesante que refleja una cruda realidad dentro del mundo financiero y de las grandes corporaciones. El escenario es lo más original de la trama: el encierro en un ascensor; pero son los propios personajes y sus capas, que se van desvelando poco a poco, lo que hace de esta novela una lectura redonda. Una trama que te hace pensar lo ruin y cruel que puede llegar a ser el ser humano para conseguir el éxito en la vida.

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Ha sido un poco decepcionante, la verdad. El comienzo de la historia está súper bien planteado: cuatro ejecutivos están encerrados en un ascensor y el objetivo es salir con vida. Sin embargo, no hay ningún "plot twist", ningún giro inesperado, sino que está todo muy bien explicado, en una línea que deja poco espacio para las sorpresas.

Eso no quita que me haya gustado el final, es algo que al principio del libro no te imaginas, ni lo ves venir (al menos yo), y los personajes están muy bien definidos, me parecen todos realmente interesantes, cada uno a su manera.

Lo recomiendo para pasar el rato, es una lectura amena.

Cuando leí la sinopsis de este thriller, me llamó la atención de inmediato. No veía el momento de empezarlo y tenía algo de miedo de que me decepcionara, porque las expectativas estaban por las nubes. La premisa era realmente tentadora; unos compañeros de oficina encerrados en un ascensor en lo que a priori parece un juego pero que muy pronto dejará de parecerlo.

"En contraste, el escape room del ascensor era claustrofóbico, oscuro y aterradoramente real. Llevó el concepto a un nivel superior al situar la experiencia en un ascensor auténtico en lugar de hacerlo en uno construido en madera contrachapada en un almacén."
Megan Goldin, Encerrados

Los cuatro protagonistas de esta historia están en la cumbre de sus carreras en el mundo de las finanzas. Manejan grandes cuentas y tienen unos sueldos exorbitantes. La empresa para la que trabajan es una de las más importantes de Nueva York. En Stanhope e Hijos la apariencia es fundamental y los ejecutivos sufren una gran presión para parecer siempre frescos y despiertos a pesar de trabajar durante jornadas interminables y bajo un estrés apabullante.

Sara Hall se sometió al arduo proceso de selección para trabajar en esta empresa y nunca imaginó que fuera tan duro, pero tampoco fue capaz de predecir lo que le ocurriría tras unos meses de trabajo en la compañía. Intrigas y comportamientos sospechosos por parte de sus compañeros de equipo la llevarán, primero a sentirse fuera de lugar en el grupo y más tarde a desconfiar de sus actividades.
La autora ha estructurado la historia de una forma muy inteligente y logra que seamos incapaces de dejar de leer. Intercala los capítulos en los que narra lo que está sucediendo dentro del ascensor, con otros en los que conoceremos la historia de Sara Hall, contada por ella misma. Estas partes son realmente interesantes y avanzamos paso a paso junto a Sara en su camino; desde que solo es una postulante a trabajar en la empresa, hasta cuando ya forma parte de la plantilla y descubre todo lo que hay detrás de un puesto como ese.

La historia de Sara nos ayuda a conocer a los personajes que se encuentran en el ascensor. Es la forma en la que vamos descubriendo sus personalidades, cómo se comportan, lo que les mueve, las tiranteces entre ellos... Sabemos que Sylvie es una mujer dura que, tras una apariencia exuberante esconde más de un secreto, tal vez relacionado con lo duro que es para las mujeres formar parte de las altas esferas en su profesión. Vincent lidera el equipo, Sam y Jules son dos lobos enzarzados en una lucha encarnizada por obtener más, por quedar en mejor puesto y cobrar los bonus más suculentos... y por esconder un puñado de secretos con los que hacen malabares para mantener cierta estabilidad en sus vidas privadas.

"Con el paso de las horas, el sentido del oído de Vincent se había agudizado. Era capaz de deducir el estado de ánimo de los otros por el modo en que respiraban, por el repiqueteo de sus dedos. Sus mentes vibraban mientras conspiraban contra él."
Megan Goldin, Encerrados

A medida que la situación es más y más asfixiante dentro del ascensor, queda en evidencia que aquello no se trata de una actividad para reforzar el trabajo en equipo. Una mente perversa los ha reunido allí para sacar a la luz la verdad de un suceso turbio que todos conocen, pero del que no hablan. Empezamos a preguntarnos cada vez con más intensidad si todos saldrán vivos de aquel encierro.

No os cuento más detalles porque lo verdaderamente interesante de esta historia es descubrir uno a uno los secretos de cada personaje. La autora los va dosificando en una atmósfera realmente opresiva a la vez que nos va dando un respiro con los capítulos narrados por Sara Hall. Es como si estuviéramos encerrados junto a los personajes en ese ascensor y de vez en cuando se abrieran las puertas para que tomáramos una bocanada de aire y volviéramos dentro a enfrentarnos a cuatro animales enjaulados con demasiadas rencillas entre ellos como para que el encierro salga bien.

Recomiendo muchísimo este thriller a los amantes del género, también a los asiduos a las escape room y además a los que se sienten atraídos por las intrigas financieras. Es una de las lecturas que más he disfrutado este año. Adictiva, brillante y con unos personajes absolutamente impredecibles llevados al límite por la ambición... y el miedo.

Megan Goldin es una autora australiana que ha trabajado para la cadena ABC y la agencia Reuters en Asia y Oriente Próximo como corresponsal. Su trabajo la llevó a zonas en conflicto y escribió sobre la guerra, el terrorismo y la paz.

Enlace: http://lacopela.blogspot.com..