Cuando comencé a leer la novela, reconozco que me tenía bastante descolocada, pues hay varios personajes y cada uno con su historia. Llegado cierto punto, Javier entrelaza las tramas y ya no eres capaz de dejar de leer. No es un género que lea muy a menudo, pero la fuerza de la portada me gustó bastante. Javier durante la novela me transmitió diferentes sensaciones. Desde angustia y repulsa, a la ansiedad por querer saber que sorpresa me tenía guardada. Ha creado personajes sólidos y una trama interesante. Es de lectura rápida y la escritura del autor es fluida. Si te gusta la novela negra, no dudes en tenerla en cuenta, seguro que te atrapará como a mí. |