Choque de reyes

Choque de reyes es la continuación de Juego de Tronos y si os soy sincera, en general el tono es igual al del libro anterior y cuando lo repaso mentalmente me cuesta recordar qué cosa sucedía en cada libro. Lo recuperamos donde lo habíamos dejado, los cinco reyes de Poniente se movilizan y cada uno sigue sus estrategias; cada uno tiene sus motivos. Gracias a los diferentes puntos de vista podemos ir viendo cómo se avanza en cada trama, en este segundo volumen se introducen, además, nuevos personajes que nos permiten conocer tramas nuevas, como Davos Seaworth.
Al haber tantos personajes el avance en la historia es lento, hay mucho que contar y a veces es un poco difícil esperar a que llegue un capítulo de un personaje o de una trama que te despierta más curiosidad. Tenemos la trama del muro, la de Daenerys, la de Catelyn y la guerra que lleva Rob, también está la de Tyrion, para mí de las más interesantes, a de Davos y Staniss, la de Bran, la de Theon, la de Arya… hay mucho por contar.
La fantasía en esta segunda entrega todavía tiene un papel pequeño, podemos verla a través de Melisandre y sus extraños ¿hechizos? Los dragones de Daenerys, un tema de los que más disfruto, no aparecen mucho, todavía son pequeños pero aun así he disfrutado sus escenas. de parte de la madre de dragones nos llega un capítulo muy especial, del del sueño de la casa de los eternos, un sueño que Daenerys tiene y que resultará ser profético. Dicen que en ese capítulo está todo lo que pasará en la saga pero puesto en clave. Como he visto la serie puedo ver que hay cosas que se han cumplido y son más evidentes, pero de la mayoría no tengo ni idea, solo queda especular.
La presencia de los caminantes se hace notar en las movilizaciones de los salvajes, pero por lo pronto la trama del muro va muy poco a poco, pero ya sabemos que por ahí la parte fantástica de la historia se hará notar. Por supuesto, el gran viaje de Bran también es importante en este aspecto aunque sabemos muy poco todavía, sus sueños de lobo son interesantes y espero que su trama sea más emocionante cada vez.
No obstante, lo que más he disfrutado, como he dicho antes, ha sido la trama de Tyrion en Desembarco del Rey. Es la mano y es un buen jugador, al principio las cosas le salen bastante bien, hay que preparar una batalla y a pesar de tener muchas cosas en contra consigue hacerlo. El Tyrion de los libros no es el de la serie, todo hay que decirlo, creo que el del show es más “bueno” y este está mucho más condicionado por lo que ha vivido, tiene una amargura y una crueldad que creo que vienen de eso y que va a explicar acciones futuras. Siento que todavía está dolido por la falta de amor recibida por parte de su padre y de su hermana y por eso se enamora fácilmente, busca a alguien que lo quiera y las continuas decepciones lo marcarán todavía más.
Por su parte, la trama de Arya nos proporciona más aventura, me gustan mucho sus capítulos por cómo va creciendo y porque todas estas tramas en los caminos me parecen muy entretenidas. Por su parte, los capítulos de Jon nos muestran la vida de un pueblo diferente, los salvajes del norte del muro y todo lo que entrañan así como la posición en la que él se encuentra es de lo más atrayente para el lector, nos deja con ganas de más. Sansa es otra Stark que tiene punto de vista y opino que es un personaje al que se ha vilipendiado mucho, no deja de ser una niña asustada rodeada por enemigos que la humillan una y otra vez (veáse Jeoffrey). Poco a poco se le va curtiendo la piel y aprende a no fiarse de tanta gente, aunque sigue siendo algo ingenua realmente solo mete la mata en el primer libro y es un error que le va a costar muy caro. No es una guerrera como Brienne o Arya, pero no deja de ser una un personaje que trata de sobrevivir como puede y que en ocasiones muestra una templanza que denota que algo está cambiando en ella.
En Juego de Tronos las piezas se fueron colocando y en Choque de reyes comienzan a moverse todas ellas, algunas caen y otras avanzan pero el tablero empieza a desvelar las que serán más importantes. Las intrigas políticas, las estrategias de batalla, las alianzas y las traiciones marcarán el rumbo de Poniente mientras que Daenerys tiene tres dragones que van creciendo lentamente, al igual que ella.
En esta segunda entrega la buena narración del libro anterior continúa, al igual que el ritmo y algunos giros que terminan sorprendiéndonos. Las batallas y sus estrategias aportan realismo y emoción en una historia con pinceladas de fantasía que parece que cobrarán más importancia en el futuro.
Una saga compleja y llena de destalles, con una intrahistoria rica que le da verosimilitud y que consigue que nos sumerjamos en ella. A pesar del gran número de personajes que van y vienen y de los diferentes puntos de vista narrativos, consiguen ser libros entretenidos que nos sorprenden y emocionan.