Un 4.5/5 y bien merecido además. La historia parte del descubrimiento del cadáver de una joven en las calles de Granada, y la frenética búsqueda del culpable. Hasta aquí todo normal dentro del thriller. Pero cuando terminas de leer los tres primeros capítulos ya sabes que estás ante algo diferente que además no sabes qué es porque te ha roto todos los esquemas. La historia es ágil, y la resolución del caso compleja. No se limita a “éste es el culpable”, el trasfondo detrás de quién y porqué es elaborado y muy creíble, nada de casualidades o conveniencias sacadas de la manga. Hasta un elemento que ha incluido del que no soy nada partidaria, me ha gustado y le ha dado un toque de originalidad y sentimiento a la obra. El equipo policial también me ha gustado, son realistas y no súper héroes y/o atormentados. Aunque me queda pendiente conocer el pasado de la inspectora jefe, que creo que en una segunda novela con un nuevo caso podría presentarse. Querer conocerlo para mí es buena señal. En definitiva, es una novela que se lee en dos sentadas, con una buena trama y unos buenos personajes, que considero por encima de la media y siendo además la primera obra de la autora, creo que hay que seguir muy de cerca sus futuros trabajos. Mis dieces, Lydia Garés. |