Ahora que ya bailas

Un poemario que habla sobre la mujer y los problemas que viven día con día, algo que puedo resaltar ya que muchos de los poetas modernos, hombres, hablan más de las infidelidades, el sexo y la mujer como un objeto. Así que varios de estos poemas con una crítica sobre acoso, abuso mental y físico, entre otras cosas, que sufren día a día la mujer es algo que me gusto.
Es corto y muy fácil de leer y reflexionar.

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Hace ya un año que salió su primer poemario, "Con tal de verte volar", un rotundo éxito en ventas que como siempre nos dejó a la espera de su siguiente trabajo, para saber si había sido cuestión de suerte o realmente estábamos ante la consagración de un autor que venía dispuesto a dar mucha guerra con la palabra como única arma. ¿Os hago spoiler? Lo de Miguel no es suerte.

Pero se ha atrevido a presentarnos un trabajo que dista bastante del anterior, que era de temática más romántica. En mi opinión, ha sido todo un acierto. La poesía no es como la novela, no te cautiva por su género (Al menos no a mi) sino por la manera en que está escrita. "Ahora que ya bailas" es casi un suero de un amor mucho más real y humano, porque habla del daño que produce una relación tóxica y cómo consentimos que nos destroce (Lo que en el poemario lleva el título de "Silencio"), pero que también se aplica a la figura de la mujer que ha sido silenciada y menospreciada en cualquier otro aspecto. La reacción ("Ruido") y finalmente su posterior vuelta a la persona que eras y siempre debiste ser (Llamado, como no podía ser de otra forma, "Música").

Por ello es de imaginar que contenga textos mucho más duros que su anterior trabajo, un golpe de realidad que pretende abrir los ojos a todas las que hayan vivido algo semejante. Como he dicho no todo gira entorno a las relaciones, al maltrato, a la violencia. Porque quieras o no todo esto deriva de una baja autoestima, de la figura de la mujer como un objeto, de un patriarcado chapado a la antigua. Así que no te sorprendas si entre sus páginas también encuentras altas dosis de feminismo, empoderamiento y mensajes tan necesarios como la vida misma.

También os digo que más de una vez se me hinchó la vena y no por el contenido de los textos, sino por las verdades que encierran. Por todo aquello que intentamos no ver y sin embargo acecha en nuestro día a día. Otra cosa que agradecerle al libro, porque alienta un sentimiento de sororidad muy necesario. Esa oda al amor propio. al respeto. Que tanto hombres como mujeres sepamos valorarnos y para ello, respetar al otro. No somos contrarios, ni estamos a diferentes alturas. Esas diferencias que un día se inventaron están ahí para ser borradas.

Miguel Gane demuestra una empatía sublime, que aúna fuerzas con la sensibilidad que siempre le ha caracterizado en sus textos. Cada vez hay más autores y autoras y cuesta diferenciarse, pero me la juego a decir que en ese sentido él nunca tendrá problemas. Tiene muy claro lo que quiere contar.

Tanto el prólogo, como la portada y las ilustraciones interiores, corren a cargo de la talentosa Alba González (Albaricoque_agc) como también hiciera en su anterior libro. Ni siquiera ahí puedo sacarle una pega porque creo que su estilo encaja a la perfección con los textos de Miguel, veo a las mujeres que ilustra y sólo me transmiten fuerza.

Como anécdota diré que mi madre no es muy aficionada a este género, pero en cuanto llegué a casa me sorprendió diciendo que lo había estado hojeando y que quería que lo dejara allí para leérselo ella. Las hay con mucho cuento.

Así que si la prosa poética no es lo tuyo... quizá tengas que cambiar de excusa, porque por una vez me atrevo a decir que éste es un libro que todas deberíamos, cuanto menos, hojear del modo en que lo hizo mi madre. Darnos cuenta de todo lo bueno que hay en nosotras.
Y celebrarlo.
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Si bien el anterior libro del mismo escritor, "Con tal de verte volar", me encantó y me hizo reflexionar, este es un libro que no encandiló tanto como el anterior . Es un libro necesario, porque a veces es necesario que nos recuerden quienes somos y lo que valemos como mujeres, pero excesivo, para mi gusto. La temática es prácticamente la misma durante todo el escrito, que no es que esté mal, pero considero que más variedad, como en el anterior, hubiera sido mucho más dinámico y enriquecedor. Repito: considero que es muy necesario, pero los poemas tratan situaciones límite que no todas hemos vivido y que por lo tanto es difícil empatizar con ellas.

Me suceden dos cosas con este libro:

1. Que el inicio es muy potente; respecto a las palabras que se utilizan, al lenguaje que con el cual el autor identifica cada verso, a la sonoridad de ciertas líneas y sobre todo a la veracidad de sus textos. El autor a pesar de utilizar la cursileria en sus textos maneja muy bien las dosis de ese elemento para que no llegue a sonar patético, si no al contrario contundente pero guardando una ternura y una condolencia.

2. Que de la página 70 aproximadamente el libro se llena de inconsistencias; situaciones en las cuales desmarca y desfigura totalmente la base central del libro que es defender a un grupo que se sabe defender sólo. Hace una analogía y cito: "mares violetas y rosas", cuando el autor mismo dice que a la mujer no se la debe condicionar desde ningún punto y por ninguna tendencia, que la mujer no se define por un color ni por cierta personalidad. No
Entonces empieza toda una serie de equivociones, de claroscuros durante la lectura que tuersen un poco el corte central del libro.
Además la utilización de recursos vulgares es pasable en ciertos textos donde la intención comunicativa era mucho más tosca, pero utilizar "gilipollas" cada dos párrafos se vuelve algo monótono.

Por último hay que destacar que este señor tiene la destreza para comunicar ideas con mucha brillantez y con una lucidez increíble, lograr esto a través de la poesía es simplemente de admirar. Cuando en vez de confundir con palabras sacadas del diccionario, se comunica con un lenguaje tan sencillo, merece el autor un elgio por esto.

Ahora que ya bailas me ha gustado más que Con tal de verte volar. Me ha gustado que el autor haya querido dar voz a las mujeres víctimas de violencia de género. Sin embargo, la primera mitad del libro es muy repetitiva y me da la sensación de que no sale del 'monotema'. Un poco más de dinamismo me hubiese atraído más. Aún así tengo que reconocer que el autor sabe cómo llegar al público, y es muy directo a la hora de transmitir su mensaje.

Un libro de poesía que ensalza y valora a la mujer. Eso es lo que es este poemario.

No se puede decir mucho de un poemario, pero creo que Miguel Gane transmite mucho amor y aprecio, sinceridad.

"Ahora que ya bailas" es un poemario bastante feminista, que habla del maltrato físico y emocional que las mujeres a veces sufrimos, siempre desde un ambiente de pareja y con una visión extrasensorial. Los poemas en este libro traspasan la pantalla y te arañan y acarician al mismo tiempo, dejando huella en ese amor que cuenta con dolor, incluso con resentimiento.
Es un libro para marcar, leer con paciencia, saborear y disfrutar y dejarlo hueco en el corazón, porque es de esos que se queda con uno para siempre.

No se cómo expresar tantos sentimientos. Un libro que llegó justo cuándo lo necesitaba. Un libro que me desgarró, que me rearmo. Poemas que me dieron voz, que me hicieron gritar por dentro sin temor a que se vean mis heridas.

Ahora que ya bailas... un hermoso viaje al corazón, al alma. Una recopilación de poemas y relatos tan maravillosos como inolvidables.

Palabras que te hacen replantearte todo, que mientras lo leía se me venían rostros constantemente. Que triste es que tengan cara. Y que ganas de regalarles un ejemplar a cada una de ellas para que sepan que no estamos solas. Que somos fuertes, únicas y maravillosas. Que no tiene que existir el miedo, ni la vergüenza. Que el amor existe, y el amor no duele. No así.

Quiero explicarles cuánto sentí estas palabras y no encuentro las propias. Los invito a leerlo. Los invito a leerme, a leernos a todas.

Mega 5/5.