Mandrágora

Cuando comencé a leer "Mandrágora", sabía que tenía delante un libro juvenil. Pero de alguna forma no me ha chocado tanto, como había pensado.
En un Reino perdido en la península Ibérica, tras la desaparición del sabio del lugar, comienzan a suceder cosas inexplicables.
Míriam y su padre viajarán hasta este Reino para investigar lo sucedido y se topan con lo que secretamente sospechaban: nigromancia.
Es cierto que el comportamiento de Míriam es un poquito irresponsable y molesta en determinadas circunstancias, pero claro es una joven de 14 años.
Me encanta como la autora ridiculiza constantemente a la familia Real, pintandolos de necios.
Y por supuesto me encanta la sororidad que hay entre las mujeres del bosque y toda su magia.