 |
Viana es una jovencita que vive con su padre, el duque de Rocagrís, y que está prometida a Robian de Castelmar, a quién ama desde que era pequeña. Pero un día, su feliz y tranquila vida cambia por completo: su padre y su prometido tienen que partir hacia la guerra para combatir contra los bárbaros que quieren invadir Nortia. A partir de entonces Viana tendrá que apañárselas ella sola y aprender a valerse por sí misma. La historia está narrada en tercera persona y todo el rato se centra en Viana y en todo lo que le sucede. Está dividida en dos partes, que a su vez se dividen en capítulos. El comienzo es algo introductorio, pero no tardamos en meternos en la trama y en encontrar acción. No sabemos muy bien hacia donde se encaminara la historia, porque hay varias opciones y además todo lo que va pasando te va dejando sorprendido y desconcertado haciendo que no sepas que esperarte. La ambientación me ha encantado. Nos situamos en un mundo inventado por la autora en una época no especificada, y que me ha enamorado. Con toques medievales y fantásticos, el mundo creado por la autora es muy original y es muy fácil que el lector viaje hasta allí. La historia es muy adictiva y una vez comienzas a leer es imposible parar. Avanzas página a página sin darte cuenta, gracias a la pluma de la autora, que como siempre es ágil, dinámica, ligera y muy mágica. El ritmo es natural a más no poder, haciendo que la historia quede creíble sin lugar a dudas. No hay ni un acontecimiento precipitado, todo pasa cuando tiene que pasar. Además, vamos viendo pasar los meses lo que hace que la trama quede fluida y realista. Hay varios giros totalmente sorprendentes y acertados. La autora sabe cuándo y dónde ponerlos para hacer que sean muy inesperados. El amor es algo secundario, y creo que tiene la importancia justa y necesaria, ya que no es lo más importante. Por otro lado, me ha gustado mucho porque me ha parecido un amor puro, tierno, inocente y muy sincero, lo que ha hecho que me resultase totalmente creíble. El final es perfecto. Mágico, bonito, maravilloso, como toda la novela en sí. Los personajes están muy bien definidos y desarrollados. Cada uno juega su propio papel en la historia y todos son necesarios. |
>
