Si bien siguen los años pasando con demasiada rapidez, los acontecimientos son más alucinantes y los personajes más maduros y complejos. Es más sencilla sin alejarse de la gran imaginación que caracteriza a la autora. Como siempre, hay que tener en cuenta cualquier detalle, pues al final todo encaja. Resumiendo, que los que no hayáis empezado esta trilogía, os animo a que la leáis. El final no tiene desperdicio. Laura Gallego sigue su misma línea |