Cuídate de mí

Título: Cuídate de mí
Autora: María Frisa

No conocía a la autora, ni en su faceta de escritora anterior para el público juvenil ni en la actual de autora de thriller/negra/psicológica.

Estamos ante una novela policíaca ambientada en Zaragoza, en el departamento de atención a la mujer; en el lado B de su trabajo, cuando el agresor se convierte en víctima.

Muy logrado el círculo infinito de sospechosos, todo el que aparece en la novela tenía motivos para matar a Manuel Velasco, M, hasta el lector. El problema es que hay demasiados sospechosos y se acaba haciendo pesada la investigación, hay tramas que requieren más peso del que tienen y otras que solo restan.

Pros: la psicología de los personajes.

Contras: da demasiados rodeos y te pierdas del aburrimiento, para que luego el final te golpee sin esperarlo.

Valoración: 3/5

Sinopsis: « Dos de la madrugada. La chica tropieza al andar, ha bebido demasiado. Él la sigue a cierta distancia. Las calles están vacías, es difícil que la pierda de vista. Solo necesita encontrar el momento adecuado,un rincón oscuro. al principio, quizá se asuste, tal vez grite. Pero luego todo irá bien. Él sabrá cuidar de ella esta noche... »

La subinspectora Berta Guallar y la inspectora Lara Samper trabajan en el Servicio de Atención a la Mujer de Zaragoza, una división de la Policía Nacional que se encarga de investigar los casos de delitos sexuales y de violencia de género. Berta, tenaz y empática, casada y con hijos, tiene dificultades para conciliar su vida laboral con la familiar, pero ama su trabajo y pone todo su empeño y tesón en ayudar a mujeres que sufren violencia de género. Lara, una psicóloga perspicaz e independiente, ha tenido que enfrentarse a multitud de obstáculos y actitudes machistas para ascender en su profesión debido a su impresionante belleza, pero ha llegado hasta inspectora gracias a su inteligencia y compromiso... (continúa en comentarios)

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Si la víctima de la que debes de investigar el asesinato te causa repulsión ¿cómo te enfrentarías a la situación? Es algo difícil de responder y en este caso tenemos dos investigadoras que, a pesar de ser un equipo, lo hacen de dos formas diferentes.

Los capítulos son breves y están narrados desde la perpectiva de una de las dos protagonistas, salvo unos pocos que nos ponen en antecedentes con respecto al crimen. Esto te ayuda a conocer los dos puntos de vista que, como decía antes, son bastante diferentes además de ayudarte a saber más sobre las investigadoras y sus motivos más personales para actuar como lo hacen.
El problema es que esos motivos personales hacen que en ocasiones se oculten cosas que entorpecen el desarrollo de la investigación. Más que porque lo que se oculten sea respecto a ella, es porque no están centradas al 100% y no se cuentan esas cosas más personales.
Aquí viene mi mini pero. En el libro no solo está la gran incógnita que es al asesinato en torno al que gira, sino que también las hay respecto a los fantasmas que acompañan a una investigadora y un caso antiguo que está muy presente en la vida la otra.
Todo queda resuelto al final, pero con demasiadas preguntas sin respuesta. No soy una lectora que necesite conocer de mano del autor la respuesta a toooodas la preguntas que me planteo durante la lectura, pero en este caso me habría gustado más explicación sobretodo respecto a una cosa...

De María Frisa no había leído nada antes y no era por ganas ya que sus novelas tienen pintaza además de muy buenas reseñas. Estoy encantada por haber encontrado el momento de leer algo suyo y a pesar de mis pero quiero leer más de ella ya que me gustó como escribe

Dos policías que trabajan en el Servicio de Atención a la Mujer en Zaragoza, que se encarga de investigar delitos sexuales y violencia de género, tienen que investigar la muerte de un hombre que fue juzgado por una violación y salió absuelto. El libro está muy bien documentado, está muy bien escrito y la trama empieza muy fuerte. A mitad del libro decae un poco y el final es impactante. Algo que me ha cansado un poco y no me ha gustado mucho es que la autora abusa del recurso de terminar un capítulo mencionando algo para crear suspende pero que no tiene continuidad.

Las dos protagonistas de Cuídate de mi, la inspectora Lara Samper y la subinspectora Berta Guallar, trabajan en el Servicio de Atención a la Mujer (SAM) de Zaragoza, una división de la Policía Nacional que se encarga de investigar los casos de delitos sexuales y de violencia de género. En esta ocasión tienen que investigar un asesinato, la victima es Manuel Velasco (M), un joven relacionado con un caso que investigaron, fue acusado de la violación de una menor, Noelia Abad, pero salió absuelto por falta de pruebas y ahora tienen que descubrir quien lo ha matado, si tiene relación con el caso anterior y ha sido una venganza de la familia, o por el contrario, no tiene nada que ver. Además de esta trama principal se van desarrollando otras dos secundarias: Lara guarda un secreto, algo que ocurrió hace 6 años cuando trabajaba en Barcelona, y Berta está sufriendo una campaña de desprestigio en las redes sociales, un detenido acusado de pederastia denuncia en su blog en internet que en su detención violó el "hábeas corpus". A la vez que avanza la investigación también iremos conociendo estas dos historias. Aunque trabajan juntas tienen una relación complicada, hay una falta de comunicación en muchos momentos. Y es que son totalmente opuestas, aunque coinciden en querer hacer bien su trabajo, se involucran en sus casos, aunque de manera distinta.
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Entretenido, pero no me ha acabado de convencer. Las protagonistas son los únicos personajes que están muy desarrollados; aunque con algunas incoherencias. Por una parte, una policía normal, casada, con hijos; por la otra, una policía con un físico espectacular, con muy mala leche y que oculta secretos de su pasado; y que trata a todos, sobre todo a sus subordinados, fatal. El resto de personajes pasa bastante desapercibido.
Una cosa que me ha cansado es que la autora abusa del recurso literario de acabar un capítulo con alguna frase para intentar mantener el suspense.....pero que cuando sigues leyendo, acabas por olvidarlo; ya que no tiene continuidad, aunque al cabo de varios capítulos caigas y pienses "Ah!! Se refería a esto...., pero si ya no importa".
La trama está bien desarrollada; aunque es previsible. El final, demasiado rebuscado para mi gusto.

Es una novela que empieza bien, con fuerza, pero, para mi gusto se ha desinflado un poco a mitad y el final, no sé, no me ha convencido, recordad que esto es solo mi opinión personal. La historia y la trama están bien pero que las dos protagonistas tengan sus propios fantasmas lo ha hecho demasiado pesimista y, creo repetitivo. Sinceramente, creo que le sobran páginas y el final, no me ha llegado a convencer

Junio de 2013. El pueblo zaragozano de Alfajarín es un bullir de gente. Se celebran las fiestas medievales que culminan con una gran hoguera en el centro del pueblo. Pocas horas después, la algarabía tornará en tragedia cuando el servicio de limpieza, al recoger los restos de la fogata, encuentre el cuerpo calcinado de un hombre: Manuel Velasco.

Aun sin ser de su competencia por motivos de localización, el caso es asignado al SAM (Servicio de Atención a la Mujer) de Zaragoza, integrado entre otros por el inspector jefe Luis Millan, la inspectora Lara Samper y la subinspectora Berta Guallar. El motivo es muy simple: la víctima es un viejo conocido; un joven que meses atrás logró eludir una condena por violación debido a la falta de pruebas y cuyo caso investigaron ellos mismos. La situación ha dado un giro de ciento ochenta grados, el antes agresor es ahora víctima y, pese a la incomodidad que provoca la situación, todos habrán de aparcar sus prejuicios en aras de una buena resolución del caso.

Será un narrador omnisciente el que nos guíe a través del intríngulis de una interesantísima investigación que corre a cargo de dos mujeres sobradamente preparadas. de ellas iremos conociendo a través de capítulos alternos, dedicados a una y otra y que en los que no solo sabremos de los avances de una minuciosa investigación y la visión de cada cual de los hechos sino que nos adentraremos en su esfera más personal.

Grandes dosis de intriga nos aguardan entre estas páginas: de una parte, lo principal es encontrar al asesino de Manuel Velasco, un chaval que como consecuencia de sus actos se ha granjeado no pocos enemigos. de otra, complementando la investigación policial, tenemos unas subtramas que atañen a la vida personal de las inspectoras y que son tan o más interesantes que la resolución del caso en sí. Lara Samper es una excelente profesional, una mujer con un buen dominio de la psicología, pero con ciertas reticencias a la hora de estrechar relaciones que oculta un oscuro capítulo de su pasado: algo que ocurrió seis años atrás y que actuó como detonante para que ingresara en el SAM. Berta, la subinspectora Guallar, es una mujer con una vida familiar llena de hastío y cuya entrega y dedicación profesional no viene más que a añadir leña al fuego. Berta además lo está pasando muy mal porque un hombre al que detuvo acusado de pederastia ha emprendido una campaña de desprestigio contra ella a través de un blog y toda esta situación le está pasando factura.

Una buena labor es la que ha hecho la autora, imprimiendo a esta historia tal interés que, aun sin tener un ritmo frenético, provoca avidez lectora. Ha sabido jugar bien las cartas: plantea una trama con temas de máxima actualidad, son varias las dudas que planean a lo largo de toda la historia y las teorías se nos van desmontando conforme avanzamos. Sin embargo, han sido un par de golpes de efecto, el suspense sobre la autoría de los hechos mantenido hasta las últimas páginas y un capítulo final tan sencillo y tan brillante a la vez que me ha dejado absolutamente perpleja, los que me han ganado por completo.

Cuídate de mi es una novela muy recomendable en la que la autora aborda con acierto temas muy delicados como la pederastia o la violencia de género y la forma en que esto incide no solo a las víctimas y su entorno más cercano sino también en ámbito policial. Una trama muy bien armada, temas de máxima actualidad, personajes veraces llenos de claroscuros, intriga creciente y sostenida hasta las últimas páginas y un desenlace brillante hacen de ella una lectura con la que el disfrute está asegurado.
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Libro catalogado como policíaca, novela negra, suspense. Pero no es eso. Bueno sí, sí es una novela de suspense, sí hay una investigación policial, por lo que sí es una novela policíaca. Pero no es sólo eso. Es mucho más.

Por lo pronto, los protagonistas de este magnífico libro son dos mujeres, la inspectora Lara Samper y la subinspectora Berta Guallar, ambas destinadas en la unidad dedicada a víctimas de violencia de género y delitos sexuales. La primera, fría y contenida; la segunda, pasional y con los sentimientos a flor de piel. Dos polos contrapuestos, dos formas de ver la vida muy diferentes entre sí, pero que en el fondo no lo son tanto. Y como no, las dos enfrentadas a un mundo en el que el machismo aún está presente; no sólo en la calle, sino también en la comisaría y, por qué no decirlo, a veces en sus propios hogares.

Por un lado, se juntan varios temas que se entrecruzan durante todo el libro, recuerdos del caso de violación, del caso del pederasta, la investigación de la muerte del joven calcinado y la persecución y acoso/derribo a la que se ve sometida una de las investigadoras. Complicado todo ello por el misterioso pasado de la inspectora Lara Samper, que viene a romper con su vida y la de los que lo rodean.

Pero sobre todo es un estudio psicológico de los personajes, tanto los policías como los sospechosos, víctimas y familiares. Pero sobre todo de los policías, encarnados en este libro en los personajes de Lara y Berta. Sobre todo Berta, que con su pasión por su trabajo, su preocupación por las víctimas y su dedicación nos ha calado hondo. Aunque Lara, aparentemente tan fría y calculadora, tan contenida, tiene mucho fuego en su interior: un animal herido que aún está lamiéndose las heridas, pero que tiene mucho que decir.

María Frisa nos aporta una mirada más allá del caso que se investiga. Una mirada al interior de las comisarías y de los hogares de los policías que llevan el caso. Porque cuando vemos en la televisión, o leemos en el periódico, un caso de asesinato, de violación, de.... decimos ¡qué horror! pero al cambiar el canal en el televisor o pasar página en el periódico, nuestra vida sigue, ajena al horror de ese acto indigno. En el caso de los policías no es así; su día a día es ver lo peor del ser humano, en el caso de los detenidos, o el dolor en el caso de las víctimas y sus allegados. Y si en mi caso, que soy administrativa, me es difícil desconectar el cerebro y dejar de pensar en facturas, clientes y proveedores cuando llego a casa, cuánto más difícil lo tendrán estas personas (hombres y mujeres) que dedican sus vidas a proteger las nuestras, que pasan noches en vela para que nosotros podamos dormir tranquilos.

Un magnífico libro que he leído en una lectura simultanea de #SoyYincanera. Si queréis conocer tanto las opiniones del resto de participantes como algunos fragmentos del libro que se han estado comentando durante la lectura sólo tenéis que buscar en Twitter con el hashtag #CuidateDeMi

La novela en sí, me ha gustado, pero reconozco que me ha costado meterme en ella por la forma de estructura de la novela. La novela se estructura en unos 60 capítulos más o menos, que no van numerados, pero si van fechados con nombres de los protagonistas y los hechos. ¿Dónde viene mi lío? Pues que los capítulos son tan cortos y que igual pasa de la versión de la inspectora a la subinspectora hablando de lo mismo, pero desde la visión del narrador omnisciente y no he entendido el paso hasta que llevaba unos cuantos bastantes capítulos.



En cuanto a la historia podríamos hablar de dos historias, de dos casos que afectan a la Inspectora Lara y a la subinspectora Berta. ¿Por qué digo dos historias? Realmente sólo hay una que es la investigación de la muerte de Manuel, pero que sin querer Berta se verá envuelta en un caso de su pasado por lo que se verá denunciada tras ser absuelto el detenido por un caso de pederastia.



Sí, aquí tenemos a dos mujeres juntas trabajando, y que, pese a que son muy diferentes, son las dos unas mujeres de armas tomar, personajes con una personalidad muy marcada, y de carácter decidido. Que no ponen un pie atrás ni para coger impulso y que serían las compañeras que todo policía querría tener.



Mientras Lara viene destinada desde Barcelona como Inspectora y es un alma libre, desde que allí dejara al amor de su vida tras un fatídico suceso.



Berta es toda una ama de casa, casada con dos hijos, y atada por completo a su familia.



Habrá otros muchos personajes que sin ellos la historia no tendría sentido, pero sería meterme demasiado en la obra.



Básicamente el caso es descubrir al asesino de un joven que fue absuelto por el delito de violación de la joven Sonia. Lo curioso es la forma en la que encuentran el cadáver, las amistades, su familia, todo lo que le rodea es extraño.



No van a tener fácil la investigación, porque nadie es quien parece, y quien parece no es. No va a ser hasta el final, finalísimo como de una forma para mi magistral se desenvuelven los dos casos, eso sí para sorpresa espero que de todos, como ha sido mi caso.



La narración ha sido buena, ligera, ágil, y al ser capítulos cortos se hace amena, pero como pega le he visto que al principio me costaba salir de un capítulo y entrar en otro, pero luego te das cuenta, que tan sólo has de seguir leyendo.



La pega, y única pega que le he encontrado a la novela, es que para los años que dice la autora que ha estado escribiendo la novela le ha fallado la documentación policíaca en un pequeño detalle, le ha fallado recurrir al codificado que se usa en las telecomunicaciones para deletrear. Pero para los que lo desconozcan, pues ese fallo, pasará desapercibido.




Y como muy, muy positivo, la edición. La edición es preciosa. Con tapa dura, portada en relieve, y una maquetación envidiable para disfrutar de su buena lectura.
Enlace: http://www.leolalluviacaer.c..

A la trama principal del libro, se añaden las tramas personales de cada protagonista. A pesar de que la autora, aborda los temas de malos tratos, abusos y agresiones (temas realmente duros) no entra de forma excesiva en ello. Consigue, con ello, que la intriga siga viva en todo momento. La trama esta muy bien definida.
La novela transcurre durante treces días, siguiendo un hilo cronológico, y con la inclusión de flashbacks. Estos flashbacks nos ayudan a comprender el pasado de los personajes. La tensión y la intriga están presentes en todo el libro.
Los capítulos son narrados en tercera persona que se alternan entre los personajes de Berta y Lara. En referencia a los personajes, están tan bien construidos, caracterizados y personalizados, tan fiel es el reflejo, que llegas a comprender lo que piensan y sienten. Están dotados de una gran carga emocional.

Lo que más me gusto del libro, es que empieza de manera muy sutil, sencilla, para continuar de forma más complicada, oscura, y con un desenlace inesperado, y también, estremecedor.
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