Cuentos a los cuarenta

Desde luego, si hay algo que pueda decir de este libro es que me ha parecido versátil. Creo que es uno de esos libros cuyo significado cambia según el momento en el cual es leído y, por supuesto, según quien lo lea. 'Cuentos a los cuarenta' nos presenta una serie de relatos que van desde lo más verosímil a lo más rocambolesco, todos con una enseñanza. No hay mejor reseña que compartir las enseñanzas que para mi, en mi momento, me ha transmitido:

(1) A veces estamos tan enfocados en nosotros mismos que no nos damos cuenta de la realidad que nos rodea e incluso nos ciega y vemos lo que no es y la moldeamos a nuestros intereses.
(2) Generalmente, aunque no lo aceptemos en voz alta, siempre hay momentos en los que nos sentimos moralmente superiores cuando somos jóvenes (respecto de los mayores) porque pensamos que no vamos a cometer los mismos errores que nuestros antecesores en la vida, para finalmente darnos cuenta que ellos son nuestros profesores y que nuestra arrogancia nos hace al final caer en esos mismo que reprochábamos a los demás.
(3) A cierta edad creemos que la vida va a mantenerse inmutable y cuando los cambios sobrevienen no estamos nunca preparados para ellos. La inmadurez no nos deja prepararnos para la vida.
(4) El anhelo de lo que queremos, de lo que no hemos conseguido, las ganas de dejar huella en alguien (o algo) es algo que nos caracteriza a todos y nos es difícil aceptar que muchas de nuestras metas no van a cumplirse nunca por lo que hay que aceptar la realidad y conformarnos con soñar, sin dejar que se nos coman los sueños.
(5) Nuestro subconsciente (y a veces no tan subconsciente) sabe lo que nos conviene. Nos conformamos generalmente con vidas que sabemos que son mediocres, sabiendo qué es lo que nos haría feliz pero que aún y así no lo cambiamos porque lo que tenemos nos ha funcionado hasta ahora. Sin embargo, eso nos lleva al hastío y la vida se nos va escapando de las manos. Es más, queremos que se nos escape para salir de la rutina, porque es la única opción que nos queda: dejarnos llevar.
(6) Necesitamos algo de brillo constante en nuestra vida. Ya sea por alguien que nos rodea o por nosotros mismos. Pero sin luz, la vida no tiene color ni gusto. Y solo está en nuestra mano que los tenga.

Destaca de la narración la gran imaginación y la creatividad de la autora y, sobre todo, el ritmo frenético de las historias, que te atrapa y te arrastra con cada protagonista hasta que te llevan a la calma absoluta con el final de cada relato. Me ha sorprendido gratamente conocer a esta autora con un estilo tan desenfrenado, con recursos para decirlo todo cuando no dice nada, dejando lugar a la imaginación para que cada lector pueda "crear" su propia historia a medida.

Sin duda, pensaba que iba a encontrarme a unos personajes teniendo un diálogo con sus "yos" de 20 años, algo presentado más como una revelación que como unos relatos que, a través de historias muy dispares y disparatadas, te hacen reflexionar sobre tu propia vida. La gran genialidad de estos relatos es que son válidos para todo lector. Sin duda, leeré más de la autora.

CATALÀ:

Avui us vull parlar d'aquest llibre de contes on les protagonistes són persones que, podríem dir, estan a l'equador de la seva vida, i que he pogut llegir gràcies a la Masa Crítica de Babelio y a l'editorial Tres Hermanas.

Els quaranta és aquella edat on ja no saps si ets jove o gran. Segurament, la majoria, ens continuem sentint joves però tenim unes responsabilitats que no teníem als vint i les nostres il·lusions tampoc són les de llavors, també, per una altra banda, tenim més experiència en alguns aspectes.

Si estàs en aquesta edat és un bon llibre per fer balanç, per recordar allò que somniaves quan eres jove, per fer recompte del que has aconseguit, i del que aconseguiràs o d'allò que ja saps que no podràs aconseguir. En el meu cas, és un llibre de punt i seguit. He arribat fins aquí, he aconseguit tot això, i puc aconseguir més.

En aquest llibre, les protagonistes dels diferents contes fan el seu balanç particular, ens parlen de renúncies, de desil·lusions, però també èxits.

M'ha agradat que aquest tema estigui tractat en diferents contes perquè, jo que estic en aquesta edat, penso que és un tema profund i segons com s'hagués enfocat podria haver estat pesat, i en aquest format és molt agradable de llegir.

'Quarentons' i 'quarentones', us animeu? Heu fet balanç de la vostra vida algun cop?

ESPAÑOL:

Hoy os quiero hablar de este libro de cuentos donde las protagonistas son personas que, podríamos decir que están en el ecuador de su vida, y que he podido leer gracias a la Masa Crítica de Babelio y a la editorial Tres Hermanas.

Los cuarenta es aquella edad en la que ya no sabes si eres joven o mayor. Seguramente, la mayoría, continuamos sintiéndonos jóvenes pero tenemos unas responsabilidades que no teníamos a los veinte y nuestras ilusiones tampoco son las de entonces, también, por otro lado, tenemos mayor experiencia en algunos aspectos.

Si estás en esta edad es un buen libro para hacer balance, para recordar aquello que soñabas cuando eras joven, para hacer recuento de lo que has conseguido, y de lo que conseguirás o de aquello que ya sabes que no vas a conseguir. En mi caso, es un libro de punto y seguido. He llegado hasta aquí, he conseguido todo esto, y puedo conseguir más.

En este libro las protagonistas de los diferentes cuentos hacen su balance particular, nos hablan de renuncias, de desilusiones, pero también de éxitos.

Me ha gustado que este tema se haya tratado en diferentes cuentos porque, yo que estoy en esta edad, pienso que es un tema profundo y según como se hubiera enfocado podría haber sido pesado, y con este formato es muy agradable de leer.

Cuarentones y cuarentonas, os animáis? ¿Habéis hecho balance de vuestra vida alguna vez?

"A la gente que lee en metro". Dedicatoria de @laurafreixasescritora

✒️ Entre los catorce y quince años, me llevaron a Madrid en tren. Quedé asombrado con los monumentos, los serenos, los guardias municipales de casco blanco y estrepitoso silbato, los abrigos de visón o similar,... y, sobre todo, los viajeros del metro leyendo de pie o sentados.
✒️ Era el invierno del 61/62. Por lo tanto no había móvil, tablet ni IPhone. Años de colocar un papelito o doblar una esquina de la página antes de bajarse para salir o cambiar de línea de metro.
✒️ En mi casa, mi padre era el único que leía era su diario "Pueblo" con Emilio Romero. ¡Y en Madrid, lo hacían todos! Como si, con ello, se ahorraran el billete del Metro. Es que Madrid era, y es, mucho Madrid.
✒️ Me gustan los relatos de @laurafreixasescritora, la autora de "Los otros son más felices". Y es que alguno parece protagonizado por este lector con su despiste innato. Como el de "Las puertas". Puedo liar "la mundial" en una asamblea de distrito al que no pertenezco y salir pensando que qué raro que no conociera a nadie
✒️ "Uno empieza a escribir para escapar de la vida, para refugiarse en la literatura, y termina escribiendo para huir de la literatura y recobrar la vida". No me ha pasado porque no sobrepaso nunca el folio vigésimo ya que son para ser leídos en público y el respetado iden empieza a moverse y a macharse. Pero coincido con Laura. Tanto método, rutina, orden,... para abrir lo que tenemos plegadito en nuestro interior
✒️ Esas "Ventanas", ventanas con paisaje incluido, son un canto a la fantasía, a lo onírico,...
✒️ "Cuentos a los cuarenta" son un acierto. Escritos en una década que aún no nos hemos comido el mundo ni hemos sido devorados por él.
✒️ Y el recuperarlos- publicados en el 2001- por @treshermanas es indicativo de su permanente validez.

Con veinte años, yo creo que todos pensábamos que nos íbamos a comer el mundo. Y es ahora, llegados los cuarenta, cuando en ocasiones tenemos que reajustar las expectativas y nos damos cuenta de que quizá las cosas no salieron como habíamos soñado. Antes una siempre tenía la esperanza de que eso llegaría en un futuro, y ahora nos damos cuenta de que ya no hay tiempo ni ganas de seguir esperando.

Las mujeres de este compendio de relatos tenían grandes sueños de juventud y, ya cumplidos los cuarenta años, se toparon con una realidad mediocre en la que nunca pensaron que se verían envueltas. Y debo decir que aquí me he sentido bastante reflejada.

Ante esta realidad insoportable, muchas de las mujeres de estos relatos se escapan a un mundo onírico que Laura Freixas refleja de manera literal, y eso es algo que puedo entender como recurso literario, pero me ha dejado bastante perpleja durante la lectura, porque los viajes oníricos que plantea Freixas son tremendamente disparatados. Digamos que se volvían tan abstractos que me hacían desconectar un poco de la lectura, y ese es quizá el aspecto que menos me ha gustado (pese a que reconozco que es original).

El libro lo conforman nueve relatos y los que para mí han destacado son «Las puertas», «La oficina» y «La noche», que empieza y termina de manera totalmente onírica y me pareció que no era para mí, pero acabé subrayando prácticamente todas las reflexiones de la protagonista (como el fragmento que copio arriba de la página 57).

Puede parecer esta una reseña un poco desesperanzada, pero no quiero verlo así... Son cosas sobre las que he reflexionado alguna vez y me ha alegrado verlas ahí plasmadas en el papel de forma para mí tan certera. Supongo que consuela saber que no soy la única que las siente de vez en cuando.

Por cierto, esta es una reedición de Tres Hermanas, pero la edición original se publicó en el 2001. Y leo que Laura Freixas estuvo casada desde 1985 hasta el 2003, así que supongo que en cierto modo el día a día de una Freixas desilusionada en aquella época se cuela entre las páginas («Un día una se da cuenta de que vive con un señor al que le unen cosas como la declaración conjunta, el piso que hemos ido pagando y decorando a lo largo de quince años, o la costumbre, muy agradable, no digo que no, de ir todos los viernes a escuchar un concierto de música clásica...»). Se divorció, tiene una nueva pareja y parece muy feliz, así que imagino que terminó encontrando «esa aura». Y, a medida que he ido escribiendo esta reseña, me he dado cuenta de que quizá no es el mío un caso tan perdido como creía, porque, pese a la monotonía de algunos días iguales, aún sueño con cosas rodeadas de un aura. :)

Gracias a la editorial Tres Hermanas y a Masa Crítica de Babelio por el ejemplar. Por cierto, mención aparte para Tres Hermanas, una editorial que he descubierto con este libro, que hace ediciones muy limpitas y que me parece que tiene auténticas joyas en su catálogo (esa edición ilustrada de Cumbres borrascosas, por favor...).

Enlace: http://lavidanobasta.blogspo..

Desde el principio te das cuenta que los relatos están dirigidos a personas de 40 , que tienen se replico en personas de 20 para remarcar la diferencia.

son 9 relatos , que versan sobre distintas opciones en las que los 40 nos da una perspectiva más serena , menos impetuosa , a veces más triste y demasiado poco optimista . A medida que vas leyendo te adentras en un conformismo , un astio quizás excesivo para la mujer con 40 de hoy en día.

para mi es un estado de plenitud, de alegría, de sabiduría, de felicidad y si , repleto de experiencias. he vivido en otros países, he viajado mucho, he trabajado mucho y tengo una dilatada experiencia Laboral y académica, que me ha ayudado a encontrarme a mi misma , pero no ha conformarme .

quizás cuando la autora escribió estos relatos , eran tiempos distintos.

Son buenos relatos , y muy bien escritos pero a mi , personalmente, no me han llegado .

Leerlos , quizás para vosotros sea diferente.