Una novela generacional sobre tres mujeres suecas de la misma familia, que nos lleva a ver, de forma pausada, la evolución del papel de la mujer y su situación en la sociedad a lo largo de algo más de un siglo, del convulso siglo XX, y la evolución de la sociedad sueca. Anna, nuestra protagonista más joven, observa a su madre en el ocaso de su vida, en una habitación de hospital, y se da cuenta de que no sabe mucho de ella. Encuentra unos diarios y unas fotografías que la llevan a investigar el pasado de su familia, y a través de esos diarios conocemos la vida de su madre y de su abuela. Hanna, su abuela, desde 1871 hasta 1964. Su madre, Johanna, desde 1902 hasta 1987. Y la vida de Anna, gracias a lo que sobre ella cuentan su madre y su abuela, y a sus propios recuerdos y sentimientos. Es una historia bonita, a pesar de lo dura que ha sido la vida en algunos momentos para nuestras protagonistas, una historia que nos habla sobre todo de sentimientos, de los miedos y alegrías de tres mujeres que han vivido en épocas distintas. Nos habla de costumbres, y vemos cómo ha evolucionado la vida desde la dura existencia de Hanna hasta la independencia de la que puede disfrutar su nieta Anna. La historia que más me ha atrapado y ha llamado mi atención ha sido la de Hanna, tal vez por lo distinta e incomprensible que puede resultar hoy en día, difícil de entender cómo una mujer podía soportar y someterse a lo que por el hecho de ser mujer le tocaba vivir. Una novela que he disfrutado. + Leer más |