Quiéreme cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite.
|
Quiéreme cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite.
|
A veces nos toca ser solo un momento en la vida de alguien.
|
La soledad, aunque cómoda, se me hacía un pelín insoportable.
|
Cuando somos prisioneros del momento que vivimos, los recuerdos se vuelven libres y fluyen con nostalgia pese a haberlos amontonado como trastos viejos en el desván.
|
La vida se va complicando a medida que cumples años. El paso del tiempo no perdona, avanza como si nada, sin importarle cuánto duele a veces. Los papeles se invirtieron y, al final, fui yo la que terminó cuidando de naná. La miraba a los ojos, esos ojos de color azulado que iban perdiendo su brillo, y recordaba cada cuento que me leía por las noches en mi niñez, cada beso en la frente, cada pastel preparado con cariño, cada riña adolescente… Los años parecían haberse congelado. Y yo me esforzaba en recordar, pese a lo mucho que algunos recuerdos hieran, porque ella había perdido esa capacidad. Y solo cuando perdemos algo de manera irremediable comprendemos lo mucho que significaba.
|
La vida es esperar. El problema es que casi nunca sabemos qué esperamos.
|
Dicen que la vida avanza constantemente, pero nadie menciona que a veces se detiene. El mundo deja de girar [...].
|
El ser humano arrastra consigo tantas tragedias, tantas penas , tantas desgracias inesperadas, que en algunos casos me extraña la capacidad que tienen muchos de salir a flote.
|
No abras puertas si no sabes lo que te vas a encontrar
|
La vida es esperar. El problema es que casi nunca sabemos qué esperamos
|
10 negritos