Las Mujeres De La Familia Medina

Bajo la sombra de los olivos que pueblan sus tierras, cuatro generaciones de mujeres luchan por preservar su linaje. Solo los secretos unen más que la sangre. una historia de sentimientos, raíces con el ritmo pausado de la pluma de María Fornet.

Manuela Medina regresa a Dos Hermanas, a la finca en la que se crio, tras la llamada de su prima Estrella, quien le da la peor de las noticias: Dolores, su madre, está a punto de morir. Manuela acude a su encuentro a pesar de llevar más de veinte años fuera, a pesar de los rencores y las rencillas; a pesar del estado en el que lo va a hacer. Pronto tiene la sospecha de que su prima y su madre le ocultan algo. Manuela indaga en la verdad escondida tras las paredes de cal y los campos de olivos: la eterna negativa de su madre de confesarle su verdadera historia, esa unión entre tía y sobrina que desde siempre la desplazó de su legítima posición…Secretos que todo el pueblo parece conocer; todos, menos la propia protagonista de esta historia. Las mujeres de la familia Medina versa sobre la complejidad de las relaciones familiares, la singularidad de los sentimientos femeninos y maternos. Es también una historia de raíces y sangre, de casta, de Andalucía; una novela que mezcla leyenda y tradición desde la mirada romántica de María Fornet, que conecta con la nostalgia por nuestros orígenes.

Mi valoración personal:
María Fornet irrumpe en el mundo literario con Las mujeres de la familia Medina, una historia de mujeres con reminiscencias del realismo de Isabel allende, el magnetismo narrativo de Adelaida García Morales y una invisible presencia masculina entretejiéndose en la vida de las protagonistas que remite a García Lorca en la casa de Bernarda Alba.
María nos trae a tres protagonistas, Manuela que representa la fuerza y el poder de ser libre, su madre Dolores representando el arraigo a la tierra y a las raíces y Estrellita, que es la que equilibra la balanza entre las dos con su poder mediador y conciliador.
La historia se centra tras las llamada de Estrellita a Manuela para que vuelva a su pueblo, Dos hermanas, una tragedia se cierne en la hacienda y la necesita con ella. Manuela lleva más de veinte años fuera del pueblo, su mala relación con su madre y el poco sentido del arraigo le han hecho estar desaparecida media vida. Pero Manuela vuelve y con ello se abrirá la válvula de las malas relaciones, de los secretos, de las cosas inconfesables, del dolor, del perdón y de la aceptación. 
Novela que se divide en cinco actos como si de una obra de teatro se tratara, Negación donde Manuela volverá y se habrá de enfrentar a lo que dejó atrás; Irá, donde tendrá que hacer frente a saber que su madre morirá y donde los secretos familiares estallaran; Dolor, aquí las mujeres Medina tendrán que luchar unidas para superar esas rencillas del pasado si quieren seguir adelante y por ultimo aceptación, donde Manuela, Dolores y Estrellita demuestran que por sus venas corre la sangre Medina.
Si algo tengo que destacar en esta novela es la narración. Pausada, descriptiva y envolvente que te hará oler esos campos de olivos, una narración llena de luz, esa luz blanca y poderosa que envuelve a Andalucía y donde no hace falta situar la novela en ninguna época ya que es atemporal, porque atemporal son los sentimientos.
Pero esta novela aun habiéndome enamorado por su prosa, no me ha terminado de gustar ya que en mi humilde opinión le faltan muchas cosas. La historia central me ha sabido a poco. La falta de información de cada una de las protagonistas ya que no sabemos nada de ninguna de ellas salvo que tienen una mala relación. La ausencia de personajes masculinos, que, pese a que no es importante en esta historia, me hubiera gustado al menos saber algo del padre de Manuela o del padre de Estrellita, ya que casi ni se nombran. Un libro que termina como acaba uniendo la vida y muerte.

El conclusión, un libro donde las protagonistas indiscutibles son las mujeres de la familia Medina donde la narración te envuelve, pero la historia te deja con ganas de saber muchísimo más.

Manuela pertenece a una larga serie de mujeres fuertes y poderosas, las Medina. Mujeres que viven, que dirigen, una finca de olivos en Dos Hermanas. Pero Manuela no es como las demás, Manuela siempre pensó que no pertenecía a esa finca, ella quería volar por otros cielos. Y se marchó. Y ha estado muchos años viviendo a muchos kilómetros, malviviendo mejor dicho. Hasta que su prima Estrella le llama y le insta a volver: su madre Dolores tiene una enfermedad terminal y Manuela debe estar con ellas los meses que le quedan de vida. Aunque no quiere, Manuela vuelve pero no lo hace sola: en su interior hay una nueva vida creciendo.

Las tres mujeres Dolores, Manuela y Estrella (la prima) tendrán que aprender a convivir de nuevo. Estrella vivió con Dolores y con Estrella desde que era una niña y se quedó huérfana. Dolores la ha criado como a una hija y siempre ha dicho que ella y Manuela eran hermanas. Las primas de niña se llevaban muy bien, eran las mejores amigas del mundo. Pero ahora cada una ha tomado su rumbo y a a Manuela le cuesta adaptarse. Además, hay cosas que no se han dicho, secretos familiares por desvelar y Manuela teme que Dolores se vaya a la tumba sin hacerlo.

“Las mujeres de la familia Medina” es una novela de mujeres (que no para mujeres). Los únicos personajes con relevancia son mujeres, los hombres brillan por su ausencia. Aunque en algún momento han tenido que pasar por su vida, ¿no? Pero ese paso es tan fugaz que ni recuerdo de ellos queda; o sí, pero escondido. Dolores crió sola a su hija y Manuela ni siquiera sabe quién fue su padre.

La ambientación me ha parecido muy buena. Esa finca en ese pueblo sevillano, Dos Hermanas. Esa finca en la que se cultivan olivos desde hace años, décadas, probablemente siglos. Esa finca que acoge a las personas más adineradas de la zona, a las terratenientes. Esa forma de vida tan diferente de las ciudades. En muy pocas páginas –el libro tiene poco más de doscientas- María Fornet consigue trasladarnos a esa finca olivarera y hacernos partícipes de su idiosincrasia, su particular forma de vida.

La novela se estructura en cinco partes o “actos” que llevan por título Negación, Ira, Negociación, Dolor y Aceptación. Las cinco fases por las que pasa Manuela en su vuelta al hogar familiar. Con una prosa cadenciosa, elegante y cuidada en la que prima la narración sobre el diálogo, María Fornet nos mete de lleno en la vida y en los secretos de esta peculiar familia de mujeres.

Los personajes están muy bien construidos. Manuela es la protagonista pero Dolores y Estrella están casi a su altura. Manuela es una mujer de cuarenta años que ha llevado una vida sin rumbo definido pues siempre supo dónde no quería estar pero no adónde quería llegar. La vuelta al hogar familiar y el tener que convivir con esa prima con la que se llevaba tan bien y con esa madre con la que se llevaba tan mal, unido a la nueva vida que lleva en su vientre, la va a cambiar por completo. Dolores es también un gran personaje. Una madre dura quizás que me mantuvo en vilo toda la narración porque ¿cómo era posible que Manuela apenas quisiese saber de su madre? ¿Qué podía haber hecho ésta para que su hija se alejase tanto de ella? Y luego está Estrella, que se nos presenta como la más ingenua de las tres. Una mujer feliz y sin complicaciones, al menos aparentemente. ¿Nos deparará alguna sorpresa?

Conclusión final

En fin, no puedo sino recomendaros “Las mujeres de la familia Medina”. Una novela familiar llena de secretos por descubrir escrita de una forma realmente bonita. Una novela sobre la familia y la maternidad, sobre el ser madre, sobre el ser hija. Todo un descubrimiento.





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Las mujeres de la familia Medina son mujeres fuertes, orgullosas, que aprenden de sus errores.
Trabajan de sol a sol y no se les pone nada por delante.
Con su apellido como bandera viven entre secretos y mentiras, pero el tiempo pone todo en su lugar haciendo que lo importante tome las riendas.

Una historia dura contada de una forma muy dulce, incluso poética, porque María tiene musicalidad en las palabras, dejando impreso un gran mensaje.


Manuela Medina podría ser mi abuela, Dolores Medina podría ser mi madre o mi bisabuela, y yo una de las mujeres de la familia Medina.
Quien me conozca entenderá una parte y quien haya leído la novela comprenderá la otra.
Compré la novela tras su publicación pero ha sido ahora su momento de lectura.
Muchas gracias María por acompañarme en momentos tan duros, por hacerme conectar nada más leer el título y por acercarme a mis raíces ❤❤.