Suave es la noche

La novela me ha atrapado mucho, más de lo que me esperaba, y eso que no tiene una acción trepidante, pero los personajes no dejan de interactuar entre ellos y no dejan de hacer cosas por lo que la lectura tiene un ritmo bastante ágil.

El libro consta de tres partes, cada parte la forman unos 20 capítulos aproximadamente y, para facilitar la lectura, no son muy extensos, por lo que se leen fácilmente varios capítulos al día.

La primera parte, desde mi humilde opinión, es la más extraña y la más pesada de leer ya que las escenas son algo inconexas y los personajes no me aportaron demasiado a la trama, pero os recomiendo que no tiréis la toalla y que avancéis poco a poco porque al llegar a la segunda parte, toda la historia cambia y me encantó y atrapó el giro que da la historia y cómo está narrada toda la segunda parte.

En cuanto a los personajes, los principales son Dick y Nicole Diver, un matrimonio al que le rodea un misterio que envuelve la narración y cuya relación es bastante peculiar llegando a ser tóxica, desde mi parecer, en algunos momentos. Ambos personajes evolucionan a lo largo de la trama para bien o para mal. Dick empezó cayéndome bien y acabé casi aborreciéndole por su comportamiento y por su actitud, y en cambio Nicole, empezó resultándome un personaje un tanto simplón y acabó ganándome por completo. La verdad es que sabiendo que en esa relación hay tintes biográficos entiendes lo bien que están descritas algunas escenas.
Con ambos personajes el lector empatiza y, por lo menos en mi caso, el autor ha logrado que entienda los motivos que le llevan a cada uno de ellos a hacer las cosas que hacen.

Una de las cosas que no me ha gustado demasiado es el snobismo que desprenden algunas escenas de la obra, pero considero que es perfecto para describir la sociedad de los años XX. Los personajes son mayoritariamente americanos y, por las descripciones que el autor realiza, se les podría considerar Dioses prácticamente, pero al resto por ser ingleses, italianos, franceses, alemanes... etc. Se les describe mayoritariamente sacando defectos y parece que si no eres americano eres lo peor del mundo.

Esta obra retrata de una manera brillante el alcoholismo y las enfermedades mentales, y cómo afectan al día a día de la persona que las sufre. Se nota que el autor sabía de lo que escribía, ya que es la parte más autobiográfica de la historia.
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