El pasajero 23

Siempre he visto muy buenas críticas de este autor alemán en revistas especializadas y quería adentrarme en su obra con "Terapia", la novela que se convirtió en todo un bestseller y con la que fue nominado a varios premios, pero no la pude encontrar en mi librería habitual. Sin embargo sí que tenían El pasajero 23, su ultima publicación, y no me pude resistir. Lo cierto es que iba con las expectativas muy altas, por lo que he comentado anteriormente, y éstas no se han cumplido. Me esperaba otra cosa, una novela más intensa, con unos misterios menos predecibles. Pero no desisto y espero resarcirme cuando pueda hacerme con Terapia.

¿Por qué en los cruceros desaparecen cada vez más personas sin dejar rastro?

Sebastian Fitzek centra casi toda la trama de El pasajero 23 a bordo del crucero Sultan of the Seas, donde hace cinco años Martin Schwartz, el protagonista principal de esta historia, perdió a su esposa e hijo. Desde entonces Martin no teme a nada ni a nadie y no duda en participar infiltrado en algunas acciones policiales muy peligrosas, en las que su vida está en juego. Martin es una persona autodestructiva y emocionalmente inestable, una bomba de relojería que se obstina en echar sal en unas heridas que aun no han cicatrizado. Después de una de esas misiones recibe la llamada de un pasajero del Sultan of The Seas que lo conmina a que se traslade hasta el barco sin demora, porque dispone de información que sin duda le interesará, relacionada con la muerte de su familia. Martin aborrece ese navío y todo lo que hay en él, pero es mayor su esperanza de que la tragedia por la pérdida de su esposa e hijo, cinco años antes, tenga una explicación convincente para él.

El pasajero 23 está compuesto de varias subtramas sin aparente relación entre sí, pero que luego resultan estar estrechamente relacionadas y que acabarán confluyendo en un final algo previsible y extraño. En una de las subtramas tenemos a Julia Stiller, quien ha embarcado en el enorme transatlántico junto a su hija Lisa, una adolescente algo conflictiva y de gustos góticos. Y por otro lado están Naomi y Anouk Lamar, madre e hija que desaparecieron de su camarote hace dos meses. Ahora la pequeña ha reaparecido en un estado lamentable, aunque con vida.

En la mayoría de los cruceros desaparecen personas, no hay estadísticas oficiales porque no debe hacerse público para no desprestigiar a las navieras, que son las que mismamente encubren estas muertes. La explicación oficial es el suicidio. Cada año saltan por la borda un promedio de 23 personas, de ahí lo del pasajero 23. En el Sultan of The Seas el promedio sube porque en muy poco tiempo han desaparecido varias mujeres y sus hijos. ¿Todos estos casos son de suicidio o hay alguien que está acabando con sus vidas?.

La trama de esta novela no podría ser más interesante: un crucero en alta mar, desapariciones a causa de suicidios o asesinatos, un detective autodestructivo, el peluche de un niño muerto que aparece en manos de otro que se dio por desaparecido ocho semanas atrás….pero a mí no ha terminado de engancharme, le faltaba algo y le sobraban algunos hechos demasiado predecibles.

El pasajero 23 es un thriller psicológico muy original al situar su acción en un barco. Está narrado en tercera persona por un narrador omnisciente y estructurado en un prólogo, más 76 capítulos de corta extensión, que ayudan mucho a agilizar y dar fluidez a su lectura, y un epílogo que se desarrolla seis semanas después de los acontecimientos. Está escrito con una prosa sencilla y amena y contiene una gran cantidad de diálogos. El prólogo me conquistó porque me puso los pelos de punta al narrar unos hechos macabros. Es una novela lineal cronológicamente, con una trama intensa, algunos giros argumentales demasiado forzados y un ritmo casi cinematográfico. El desenlace se me hizo demasiado predecible, aunque está muy bien justificado. Tensión narrativa tiene, pero me ha parecido insuficiente.

Los personajes, que no serán muchos, están perfilados con pulcritud, aunque unos cuantos de ellos me han parecido una colección de estereotipos. El protagonismo de Martin va ser determinante en esta novela al presentarse como un hombre muy carismático y complejo, que necesita redimirse con los fantasmas de su pasado que le impiden llevar una vida normal. El autor ha sido capaz de crear una atmósfera opresiva y asfixiante, donde la humedad salina del ambiente parece impregnar todas sus páginas.

En resumen, El pasajero 23 es un psychothriller emocionante y entretenido que cuenta con una trama interesante al situarse a bordo de un crucero. Es una novela de lectura fluida que me duró apenas un par de días. Recorreremos, de la mano de su autor, las entrañas de un barco de gran tonelaje que parece una pequeña ciudad. Una novela que no puedes perderte si te gustan las historias de misterio con intensos giros argumentales.
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