Anna Fox vive sola, recluida en su casa de Nueva York, sin atreverse a salir. Pasa el día chateando con desconocidos, bebiendo vino, mirando películas antiguas, recordando tiempos felices y espiando a los vecinos. Entonces llegan los Russell al barrio: una pareja y su hijo adolescente, la familia perfecta, hasta que una noche Anna ve algo en la ventana que no debería haber visto y todo su mundo se resquebraja y sus secretos salen a la luz. Empecé este libro con muchas expectativas y la verdad es que me ha dejado un poco fría, empieza fuerte y te enganchas pero después de la mitad del libro a mi se me hizo un poco repetitivo y previsible. de este estilo es muchísimo mejor Ella lo sabe de Lorena Franco |