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Si habéis leído la sinopsis, estaréis de acuerdo conmigo en que la trama es interesante a la vez que desgarradora. No añado más porque la poca información que hay en la sinopsis es suficiente para poner en contexto esta historia. El ritmo del libro es algo lento, ya que se nos introduce la trama poco a poco. La ansiedad que crea la historia es considerable porque en todo momento queremos saber qué es lo que pasó en realidad. ¿Quién se llevó a su hija? ¿De verdad la chica del teléfono es ella? Estas son las dos principales cuestiones que rodean la historia haciendo que todo el desarrollo te mantenga en vilo. Eso sí, el desenlace me ha decepcionado. Es cierto que no sospeché de nada ni de nadie, por lo que en ese sentido me ha sorprendido. Pero el resultado final lo noté irreal y un poco cogido con pinzas. El libro esta narrado en dos líneas temporales de forma alterna. Por un lado, tenemos la línea del presente, donde viviremos los sucesos actuales de Caroline quince años después. Por otro lado, nos encontramos con la línea del pasado, donde se nos muestra todo lo que pasó antes, durante y varios años después de la desaparición de la pequeña. Me ha parecido genial esta forma de narrar la historia porque cada final de capítulo te deja en tensión y pensando en todo el misterio. Los personajes femeninos principales me han gustado mucho porque todos son muy reales. Caroline no supera la pérdida de su hija pequeña y su mente siempre gira en torno a ella descuidando así su salud mental y su estado físico. Es un personaje con el que es muy fácil conectar, aunque no siempre hace las cosas bien. Michelle, la hija mayor de Caroline, es una chica rebelde que solo quiere llamar la atención de su madre. Siente que es el segundo plato y por eso mismo se comporta de una forma infantil y rompe todas las reglas. A Hunter, el exmarido de Caroline, y a la abuela Mary, los odio con todo mi corazón. Nada más que añadir. Lo que no me ha llegado a convencer de este libro han sido los diálogos, siento que se quedan cortos, además de sonar infantiles. Se supone que están conversando personas adultas y/o adolescentes que ya tienen un vocabulario algo amplio, así que no entiendo esas frases tan escuetas y poco naturales. A pesar de todo lo que he comentado, la pluma de la autora sigue en su línea: descriptiva y siempre ahondando en los pensamientos de los personajes. La narración se vuelve muy fluida gracias a su estilo narrativo, por lo que todas las páginas pasan en un suspiro. Ella no está es un thriller psicológico que engancha desde la primera página gracias a la pluma de la autora, pero que cuenta con poca fuerza en sus diálogos y con un final no muy lógico por mi parte. Eso sí, la trama en general me ha gustado, por ello recomiendo esta lectura ya que creo que es interesante conocer el camino de esta madre que perdió a su hija. Enlace: https://jardinesdepapel.es/r.. |
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