Lo que más me gusta son los monstruos

Lo que pasa con los mayores es que a los niños les parecen libres. Pero, de hecho, muchos viven en una cárcel. Te preguntas quién los hace estar así. Por lo que he visto, en nueve de cada diez casos, son sus fantasmas

Los sótanos huelen a surrealismo, pero las cocinas y los jardines casi siempre huelen a impresionismo.

No sé qué ocurrió entre mi madre y mi padre, ni qué pasa con Deeze y sus novias, pero he llegado a la conclusión de que el amor es en realidad el monstruo más raro que existe. Y si pensáis que no destroza a la gente… ¡no tenéis ni idea!

(...) no es que me dé miedo que me maten, no; lo que me agobia es que me conviertan en uno de ellos... masa= malos, aburridos sosos, anodinos. Y no son sus trabajos de cocinero, enfermera o granjero los que les convierten en masa, ¡No! sino el hecho de que la mayoría solo cree en aquello que puede ver, oler, saborear, tocar, oir o comprar. Piensan: "como los monstruos no pueden ser reales, es que no lo son.

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Los muertos vivientes no tienen problemas de autoestima ni cuestiones de esas. Sin oscuridad, la luz no es tan genial como la pintan. Si alguna vez has estado bajo los fluorescentes de los almacenes Goldblatt mientras tu madre y un montón de señoras más se pelean por cafeteras abolladas y packs de bragas de oferta marcados con faltas (varato, revaja), entonces habrás comprobado que la "luz" solo muestra lo sudorosa y caótica que es en realidad la vida humana