Reina: Bilogía Salvaje 2 )

-¿Cómo te vas de alguien en quien te quedarías para siempre cuando te lo arrebatan?

Se suele decir que las segundas partes nunca son buenas, y si encima añadimos que el primer libro te parece magnifico, te parece que tiene un final perfecto, ¿para que narices se continua?

En esta historia la protagonista vuelve a ser Kassandra, y en este caso, la historia empieza cuando ya ha pasado un tiempo del fin del primer libro, y Kassandra buscará venganza.

La trama como tal no está mal, pero para mi es una historia que pasa muy rapido, de repente aparecen personajes donde no los habia, o de repente te encuentras en otro lugar, algo que me descentraba.

Si algo me ha gustado han sido los personajes, estos si han sido reales, pero sobretodo la documentación, hay muchas cosas interesantes, (aunque quiza demasiada) y se nota que la autora se ha empapado de estas historias.

El final, para mi gusto... no se entiende, demasiado rapido después de todo lo que ha pasado, pero lo que si ha sido horrible, ha sido la nota de la autora, una nota de autora casi mas larga que el propio libro, donde te acabas enterando y entendiendo cosas de la propia novela.
La primera parte de la bilogia me encanto, me fascino, y creo que el final fue perfecto, tengo la sensación que la autora tras el exito quiso seguir con una segunda parte y no... no siempre funciona.

Fuera como fuese, se quedó quieta y esperando algo. Porque cuando uno siente ese algo, espera continuamente algo, a veces sabe qué, a veces no lo sabe o simplemente espera sentirlo más.

Lo que verdaderamente nos hace ser quienes somos no es solo aquello que nos conforma, sino también aquello contra lo que luchamos por no ser.

Lo ordinario era la muerte, pues era inevitable, pero ¿la vida? La vida era un regalo. Una oportunidad entre cientos de miles de millones de ser quien eres y de hacer algo con ello. Sin embargo, la pasamos pensando en que se termina hasta que se termina.

El bien siempre llega, como la primavera con su rojo, aunque el mal dure mucho y parezca un invierno largo y frío y blanco.

Para que algo nazca, algo debe morir; para que algo empiece, algo debe terminar.

Supongo que la vida se trata de eso, de buscar respuestas, aunque uno no sepa siquiera si existen.

El tiempo es inabarcable e inconmensurable; la muerte, definitiva. No se vence lo inevitable. Lo único que podemos hacer es existir en un continuo desafío contra ello.

Reina, su otro yo, su parte más oscura, con la que tendrá que convivir y de la que tendrá que aprender.