DIARIO DE UN REFUGIO

Me ha gustado igual o más que el primero.

Ambos tomos se pueden leer completamente por separado. No hace falta haber leído "Refugio" antes que este. Aunque ambos tratan la misma temática que es el día a día del autor ayudando en la protectora de animales.

Este tomo está divido en las cuatro estaciones y se escribió durante y después de la pandemia por COVID. En sus páginas, Fonollosa cuenta cómo han trabajado tanto voluntarios como trabajadores para mantener a flote la protectora durante los meses que estuvo todo patas arriba. Lo que más hay son anécdotas que han ocurrido con los perros del refugio. Desde aventureros que se escapan y se pierden en el campo, hasta madres con sus cachorros y cómo se les cuida para que todos estén bien.

Como en el primer tomo, Fonollosa procura centrarse en las historias divertidas o más emotivas para narrarlas e ilustrarlas. Procura no contar aquellas más duras o complicadas, como él mismo explica en sus páginas.

Unas anécdotas divertidas acompañadas con su dibujo tan característico. A diferencia del primer tomo que era todo a color; en este juega con el azul claro y el fondo blanco. de vez en cuando pone algo de color a ciertos objetos o ciertos animales para resaltarlos en el dibujo cuando se trata de algo importante o con relevancia en la historia.

Es un tomo muy bonito con un dibujo personal que permite conocer lo que se cuece detrás de los muros de las protectoras, todo el trabajo que hay, los voluntarios, los momentos duros, pero, sobre todo, trata de mostrar lo bonito que es ayudar a esos seres peludos con tantas personalidades y tanto por ofrecer.

“Diario de un refugio”, de Jose Fonollosa, nos lleva de nuevo a Spax, la protectora en la que el ilustrador lleva colaborando como voluntario más de dos años.

En este nuevo libro, el autor nos cuenta su vuelta a la protectora tras el estado de alarma y su reencuentro con los perros, los trabajadores de la protectora y otros voluntarios que cada sábado, acuden para ayudar en lo que pueden y pasear a los canes.

De una manera entrañable el autor nos cuenta la adopción de algunos perros por parte de familias alemanas y españolas y también las salidas para capturar perros abandonados en las inmediaciones de la protectora. Solo así pueden darles la oportunidad de encontrar un hogar y evitar que pasen hambre o sufran atropellos.

Además de anécdotas sobre los perros que están en el refugio, el autor también nos habla de su propia experiencia como voluntario. de los problemas que tiene para recordar los nombres de los podencos que cuida; de cómo le ponen “la carita” y acaban metiéndole en algún que otro lío y de su experiencia como casa de acogida, algo que su gato Toñín no ha llevado excesivamente bien.

Un libro muy tierno y divertido para conocer cómo funcionan las protectoras de animales y ver la realidad que se oculta tras sus muros. También os permitirá conocer a “Las Felipes” y su divertidísima historia.

La novela gráfica la podéis encargar en vuestra librería habitual o pedirla a la web de Grafito Editorial. En la web, por 4€ más, podéis comprar una lámina donativo para la protectora Spax y ayudar a los perros que conoceréis durante la lectura.

Llevo más de diez años, sin exagerar, siguiendo el trabajo de este autor, desde que publicaba las tiras de sus gatas Rufa y Belfi en un blog. Así que, cuando en la Feria del libro de Valencia vi que estaba firmando en la caseta de enfrente, no me pude resistir a hacerme con un ejemplar dedicado.

Con el estilo característico del autor (blanco, azul y negro) las tiras recogidas en este libro recogen de manera amena y divertida el día a día del refugio en el que José Fonollosa es voluntario. Limpieza de los cheniles, adopciones, devoluciones de animales, rescates, acogidas... Todo tiene cabida en este libro.

Si alguna vez has colaborado con un refugio o protectora (yo lo hice hacr ya varios años) estoy segura de que todas las historias aquí recogidas te resultarán familiares. Y si nunca lo has hecho, quizá te dé el empujón para animarte.