Playboy

Playboy es la última entrega de la serie Pecado, una serie que he devorado con fruición, la he disfrutado muchísimo. Aunque forma parte del mundo de Pecado y sus personajes están muy relacionados, pues forman parte del mismo grupo de amigos y familiares, el libro se puede leer de manera totalmente independiente.

En este libro vamos a conocer la historia de Wynn, la amiga de Rachel y Gina y Cullen Carmichael, hermano de Callan Carmichael (Womanizer).

Nos sumergimos en el mundo de las mesas de juego y los casinos de Las Vegas de la mano de la leyenda del póker, Cullen Charmichael. Todo comienza con una apuesta.

A Wynn Watson ya la conocimos en el transcurso de las anteriores historias, es una mujer de treinta años que no ha tenido mucha suerte en cuanto a sus relaciones con los hombres se trata, le encanta el arte y su trabajo como galerista del que está muy orgullosa. Después de una larga relación llena de altibajos Wynn es consciente de que no hay un futuro para ella junto a su ex, Emmett, pero la ruptura aún es muy reciente y duele demasiado.

Wynn no quiere que le vuelvan a romper el corazón por lo que ha decidido que nada de hombres, pero no le dirá que no a un poco de diversión, además no quiere dejarse llevar por la tristeza por lo que comenzará a salir en citas de nuevo. Durante una de esas citas, su acompañante la llevará a una timba ilegal de póker, allí conocerá a Playboy, el actual campeón del mundo de póker, un atractivo hombre de ojos plateados que llamará su atención desde el primer momento. La atracción mutua es instantánea y Playboy hará todo lo posible para que Wynn se quede junto a él. Durante el transcurso de la noche Wynn descubrirá que el jugador de ojos plateados es Cullen Charmichael, el hermano de Callan que ha llegado a la ciudad para la boda de su hermano con Livvy.

Tras ese primer encuentro volverán a verse en la boda de Callan y Livvy donde tendrán oportunidad de conocerse un poco mejor y empezará el toma y daca entre ambos. Cullen quiere convencer a Wynn que ser un jugador profesional es lo mejor del mundo, y Wynn quiere que Cullen vea que ser galerista y estar rodeada todo el día de arte es muchísimo mejor que estar sentado en una mesa de juego. Todo esto acabará con una apuesta. Wynn viajará con Cullen a Las Vegas para que esta pueda conocer en que consiste exactamente su profesión y acompañarlo mientras participa en el torneo del Campeonato del mundo de póker.

Se establece un juego en el que, a pesar de gran atracción mutua, ambos se niegan a ceder pues el premio de la apuesta es algo que ambos desean y los dos lucharán duro para ser el ganador de esa apuesta.

En Las Vegas disfrutaremos de momentos íntimos y confesiones compartidas, incluida una caliente partida de strip-poker. Pero Wynn sabe que lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas, por lo que se niega a dar su brazo a torcer y abrir su corazón a otra relación sin futuro.

Cullen será un respiro para Wynn en un momento complicado donde aún debe superar el dolor de la ruptura y la perdida de sus esperanzas de futuro. El mayor sueño de Wynn es encontrar a alguien a quien amar y que la ame y con el que formar una familia. Pero eso no parece ser posible después de la ruptura de su relación con Emmett, se ha jurado no volver a enamorarse para que nadie pueda volver a romperle el corazón, aunque eso no quita que pueda divertirse.

Wynn tendrá que luchar contra su peor enemigo, ella misma y el miedo que tiene a volver a sufrir por amor pero, ¿el que no arriesga no gana ¿no?

Después de ser mencionado en anteriores libros, Cullen Charmichael por fin hace su primera aparición. Cullen es el hermano mayor de Callan (Womanizer), un jugador profesional que se dedica a ir de torneo en torneo en busca de la suerte. Wynn se convertirá en el amuleto que Cullen necesitaba para recuperar su suerte en el juego.

Los personajes masculinos de Katy son hombres cuyo atractivo se basa principalmente en la seguridad en sí mismos que proyectan a los demás, saben lo que quieren y como conseguirlo y esa aura de poder resulta muy atractiva en una persona. Cullen sabe que desea a Wynn desde el primer momento en que la ve, pero también sabe que ese no es su momento por lo que le tocará tener paciencia y esperar a que este llegue para subir las apuestas. Cuando Wynn se sumerge en el mundo de Cullen, poco a poco va aprendiendo lo profundos que son los sentimientos de Cullen. Cullen es un hombre generoso, paciente y comprensivo, pero tampoco es que lo vayamos a conocer en profundidad aunque conoceremos algunos hechos de su vida que han hecho de Cullen quien es y nos ayudaran a entender al personaje.

En esta historia nos volveremos a reencontrar aunque muy de pasadita con los personajes de los anteriores libros, Rachel y Malcolm, Gina y Tahoe y por supuesto, Livvy y Callan al ser este el hermano del protagonista.

Es un libro muy cortito, tan solo doscientas ochenta y ocho páginas divididas en veintisiete capítulos más epílogo de una extensión media-corta. La narración es en primera persona por Wynn pero Cullen también tendrá un par de capítulos para contarnos su visión en la historia, me hubieran gustado más páginas bajo el punto de vista de Cullen pero esta autora no suele dar la palabra a sus personajes masculinos cargando todo el peso de la narración a sus protagonistas femeninas.

La autora sigue fiel a su estilo y nos trae otra historia totalmente adictiva y muy sexy llena de romance y sexo, con diálogos ingeniosos y situaciones muy sensuales y provocativas. Utiliza una gran cantidad de diálogos que combina con capítulos cortos para que la lectura no sea pesada y te enganches sin darte cuenta. Nos encontramos un libro mucho más sexual que los dos anteriores con escenas más explicitas, aunque le cuesta más de la mitad del libro llegar a ellas, la química y la tensión sexual no resuelta es la tónica general del libro. No hay un drama excesivo, solamente la historia de un hombre que sabe lo que quiere y una mujer que deberá luchar contra sus miedos para alcanzar sus sueños.

En cuanto a la historia lo he disfrutado al igual que todo lo publicado por Katy Evans, pero me ha fallado algo, aunque creo que es culpa mía, el juego no me resulta nada atractivo y le ha restado mucho puntos al protagonista, aunque si obviamos esto el resto de él me ha encantado, ya que es un hombre que no impone sus deseos y respeta las decisiones de Wynn, la hace sentir digna de ser amada y la ayuda a reparar su alma porque se sentía como una mujer rota, pero el hecho de que sea un jugador le resta atractivo para mí. Todo empieza como un juego pero realmente no se sabe muy bien quien juega con quien, establecen una dinámica de juego mental, de tira y afloja entre ellos que va subiendo la tensión y hace crecer la anticipación de manera gradual. Ha sido entretenido y lleno de momentos divertidos entre ambos que rápidamente cambiaron de los sutiles coqueteos a algo más serio. Me gustó que Wynn y Cullen en realidad querían las mismas cosas de la vida, para los dos todo se reducía a encontrar a la persona perfecta y tener una familia mientras disfrutaban de un romance salvaje y apasionado.

Aun así me ha durado menos de un día, ha sido un libro de esos con los que te dan las tantas de la madrugada y te resistes de ir a dormir hasta terminarlo.

Me he enamorado de todos y cada uno de los protagonistas de esta serie, cada uno diferente pero todos especiales a su manera.

Quedo impaciente por saber si Chic editorial seguirá apostando por esta autora y ver con que nos sorprende la próxima vez.

En Playboy encontrarás una historia de segundas oportunidades, sobre dos personas que solo desean amar y ser amadas pero que tendrán que enfrentar sus miedos para conseguirlo.

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Hace unas semanas que os traía por aquí la reseña de “Womanizer”, por lo que hoy quiero presentaros “Playboy”, el que hasta el momento es el sexto y último libro publicado de la serie “Pecado” de Katy Evans.

No sabéis la sorpresa que me llevé cuando la editorial anunció la publicación de este libro. Estoy acostumbrada a que entre la publicación de libros de sagas y series tenga que esperar algunos meses, pero esta vez no ha ocurrido esto para nada. Creo que el quinto y el sexto libro se han publicado con una diferencia de semanas así que no podía estar más emocionada por leerlo.

Sobre todo, porque en este sexto libro el protagonista masculino será “Cullen Carmichael”, el hermano de “Callan Carmichael”, el protagonista de “Womanizer”. El personaje de Callan me encantó, por lo que me moría de curiosidad de ver como iba a ser su hermano en esta historia.

¿Serán parecidos o totalmente diferentes el uno del otro?. Ya nos hablaron un poco de Cullen en “Womanizer”. Pero, simplemente una breve descripción, que te dejaba con ganas de más por solo haber aparecido en el libro como secundario. Ahora entiendo mejor porque no pudimos verle. Que mejor que conocer a un personaje que te intriga con un libro dedicado a él exclusivamente. No me esperaba que Katy Evans fuese a publicar este libro.

Para colmo, el personaje femenino, de esta historia, será Wynn. Wynn fue uno de los personajes que más ayudaron a Olivia, la protagonista femenina de “Womanizer”.

Por lo que he estado comentado, podréis ver que existen pequeñas relaciones entre el quinto libro y el sexto libro. Aun así, las historias se podrán leer de forma independiente, igual que el resto de libros de la serie “pecado”.

No es necesario conocer nada anterior ya que la historia se centra de lleno en nuestra nueva pareja. Dejando a todos los demás personajes en una posición meramente secundaria. Si ya conoces a alguno, como me pasa a mí con el libro “Womanizer”, sentirás algo de cariño por ellos. Son esos personajes con los que lo pasaste tan bien en su momento pero, poco más. Esta historia te presentará a otros nuevos, de los que puede que te enamores incluso más que los anteriores.

Nada más empezar a leer conoceremos a Wynn. Después de llevar cuatro años saliendo con Emmett, por fin puede decir que esto se ha acabado. Ha sufrido, se han peleado y han vuelto, pero para volver a pelearse otra vez. Esta relación no llevaba a ninguna parte. Y aun así sigue doliendo. La primera decisión que ha tomado es alejarse de los tíos, al menos de una forma seria. Pero lo que su decisión no incluía es acabar en una partida clandestina de póker con su nuevo ligue. Es ilegal y si viene la policía podrían detenerla. Si lo piensa, sería lo que le faltaba para completar su historial.

Nada más entrar al local, que gritaba ilegal por todos los rincones, no puede evitar fijarse en que sentado a la mesa hay un chico que no podría ser más atractivo. Y para colmo, tiene los ojos de color plateado. Según su acompañante se hace llamar “playboy”, un nombre muy adecuado la verdad. No podría haberlo descrito mejor. de lo que no se había dado cuenta es que al igual que ella, él tampoco le quita los ojos de encima desde que han entrado. Lo que en un principio parecía un encuentro fortuito, se convertirá en algo más que una coincidencia. En la boda de una de sus mejores amigas, “playboy” se presenta como Cullen Carmichael. Quien le iba a decir que se volverían a encontrar y que ella se atrevería a apostar contra este jugador empedernido. Ahora se encuentran camino de Las Vegas. ¿Será capaz de evitar la tentación de pasar cuatro días junto a este hombre?.

Hasta aquí os puedo contar. Para saber más, tendréis que leer la historia completa.

He disfrutado mucho con esta historia. Aunque tengo que deciros que al principio me costó algo engancharme. Sentía que la relación entre nuestros protagonistas iba demasiado rápido. Y no podía creerme que en apenas cuatro capítulos, ya estuvieran pasando al siguiente nivel, cuando hace nada que se acababan de conocer.

Según vayamos avanzando descubriremos el porqué detrás de los fuertes sentimientos de Cullen hacia Wynn. Todo tiene una explicación, aunque, también hay que tener en cuenta que, si la apuesta entre nuestros protagonistas dura cuatro días, la relación tiene que surgir algo más rápido.

La historia estará narrada en primera persona, desde el punto de vista de Cullen y Wynn. Me alegro de que esta vez hayan aparecido mas intervenciones de las dos partes protagonistas de la historia. En “Womanizer” me pareció que el reparto fue más desigual y me quedé con ganas de ver más del protagonista masculino. Gracias a estas intervenciones, podremos conocer mejor la motivación de nuestros personajes, sus sentimientos y lo que piensan el uno del otro, realmente.

De nuevo Katy Evans demuestra tener un estilo de escritura adictivo, ameno, cercano y cargado de diálogos e intervenciones que harán la lectura más ágil y rápida.

Sin duda, quedas atrapado por la tensión sexual y el constante tira y afloja de los personajes. Es un no parar. Siempre se están picando entre ellos para ver quien cae en la tentación y pierde la apuesta. Me he reído mucho con algunas de las salidas que tienen tanto Cullen como Wynn.

Sin duda, son una pareja única y su relación no podría ser más explosiva e intensa. Aunque también habrá momentos que vendrán cargados de drama y nos romperán el corazón.

Esta vez, la trama se desarrollará en torno a un mundo más oscuro y misterioso. El mundo del juego y las apuestas. Visitaremos casinos, habitaciones de lujo y participaremos, en primera persona, en partidas de póker de los más intensas y sexuales. La verdad que ha sido un ambiente distinto, no estoy acostumbrada a que se hable tanto del juego en los libros. Siempre que leo una historia vamos a Las Vegas y ya está, pero esta vez ha sido diferente. Gracias a las pequeñas descripciones de la autora, he logrado imaginarme ese ambiente lujoso donde el dinero lo mueve todo.

Sobre los personajes, deciros que me han encantado. Ya pude conocer un poco a Wynn en el libro anterior, pero nada que ver con lo que me ha enseñado en “playboy”. En “womanizer” solo pude conocer una milésima parte de todo lo que tenía que mostrar. Me ha gustado su forma de ser y su personalidad. Es una chica que lucha por lo que quiere y que mantiene la cabeza alta, a pesar de lo mal que lo ha pasado en su relación con Emmet. Gracias a Cullen, va a aflorar en ella la seguridad y la confianza en sí misma. Una parte que había desaparecido hace años. Pero junto a esto, también van a aparecer un montón de sentimientos y emociones contradictorios. Tendrá que hacerles frente y ser sincera, sobre si lo que siente es atracción o algo más serio.

Sobre Cullen, deciros que me ha sorprendido. Gracias a Callan pudimos conocer algo sobre él, pero no me le imaginaba así, para nada. Son hermanos, pero sus vidas son como el Sol y la Luna. Callan se mueve en lo más alto del mundo empresarial absorbiendo negocios, reuniéndose y firmando contratos. Y el otro, se mueve en el oscuro mundo del juego, el lujo, las apuestas y las grandes sumas de dinero. Son ambientes muy distintos.

Cullen es un chico misterioso, intrigante, atractivo e incluso algo oscuro. Nunca sabes lo que está pensando, siempre mantiene su cara de póker. Conforme vamos adentrándonos en la lectura, descubriéremos que su apodo no es más que una fachada para no mostrar su verdadero ser. Pero Wynn acabará tirando todos los muros, llegando donde nadie ha llegado jamás.

Me ha encantado poder reencontrarme con Callan y Olivia, nuestros anteriores protagonistas. Me alegro de que todo les vaya tan bien y sean felices. También aparecerán de nuevo Tahoe y Gina (personajes de Casanova) y Rachel y Saint (personajes de pecado). Sus apariciones son secundarias. Pero viéndoles actuar, no puedes evitar sentir la gran amistad que existe entre todos los personajes, formando un grupo de amigos que han pasado por muchos momentos. Juntos y apoyándose unos a otros. Y son estos momentos los que hacen que me entren cada vez más ganas de leer el resto de libros de la serie. Me gustaría conocer sus historias.

En conclusión, “Playboy” ha sido un romance con él que no descubrirás nada nuevo que no te hayas encontrado ya en otros libros, pero te morirás de ganas de ver como nuestros personajes consiguen acabar juntos. Sabes el comienzo y te imaginas el final de la historia, pero te falta el cómo van a llegar ahí. Una lectura adictiva, con la que pasar una buena tarde enganchada. Seguro que te entraran ganas de leer el resto de libros de la serie.
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Wynn está cansada del amor. Su última relación supuso una gran decepción y todavía se siente dolida por ella. Así que está dispuesta a salir y olvidarse de todo con un poco de pasión desenfrenada. Sin embargo, la pasión que encuentra es la de Cullen Carmichael, y no está segura si será capaz de sobrevivir.

Cuando empecé esta aventura con la serie Pecado, pronto descubrí que quería conocer las historias de Wynn y Cullen. Saber que sería una historia compartida fue un subidón de alegría. Así que tenía muchísimas ganas de leer este libro y descubrir más de los dos personajes.

A Wynn la conocemos desde el principio. Su relación con Emmett siempre estuvo llena de altibajos y, aunque parecía que habían dejado al lado sus diferencias, al final todo se fue al traste. Wynn es una chica alegre, que vive enamorada de la idea del amor, que siempre quiso formar una familia, muy trabajadora y auténtica, con el arte como pasión. En este libro veremos también su lado más vulnerable, con algunos secretos que la carcomen por dentro y que le han quitado un poco de alegría. Es un personaje que me ha encantado porque es directa, es atrevida y se arriesga mucho en este libro.

Cullen es el hermano del protagonista del libro anterior, que me despertó mucha curiosidad al leer Womanizer. Los dos hermanos se separaron cuando el divorcio de sus padres, yendo cada uno con un progenitor. Cullen se quedó con su madre que, según su hermano, le sangra todo lo que puede. Su relación familiar es bastante compleja, con mucho más equipaje de lo que parece a simple vista. Desde fuera vemos a un hombre que se dedica al póker profesional, que tiene mucho dinero, que vuelve locas a las mujeres, con carisma y que se come el mundo con solo su mirada. Sin embargo, Cullen es mucho más. Y ha sido un placer conocerle en profundidad. Me gusta que me sorprendan y me den más con este tipo de personajes que a priori parecen tan arquetípicos.

Ambos estarán mucho en una burbuja, por lo que no hay mucho personaje secundario que destacar. Aparecerán un poco todos nuestros viejos conocidos, que siempre es un placer volver a ver. Y sabremos un poco más de cómo les va la vida. Soy muy fan de este tipo de series donde se nos deja ver que la vida sigue y que la historia de estas personas no acabó con el final de su propio libro.

La historia empieza con un encuentro fortuito en el que saltan las chispas, aunque Wynn no caerá en quién es él hasta más tarde. La atracción que sienten el uno por el otro es innegable. Ella se siente más viva de lo que se ha sentido nunca. Aunque el fuego que es Cullen sea capaz de quemarla. Y es así como llegan a una apuesta que les llevará a pasar tiempo juntos en Las Vegas. Una apuesta que ninguno de los dos sabe si prefiere ganar o perder.

Como buen romance ligero, divertido y apasionado, esta novela tiene muchos momentos cargados de tensión y de altas temperaturas. La relación entre ellos dos es como mirar fijamente al sol. Entre ellos hay química y complicidad, se lo pasan bien juntos, algo que podría ser un problema. Sus interacciones son adictivas desde el minuto uno. Pero, además, tiene mucha evolución de personajes, tiene una profundidad que va más allá del romance, con aspectos personales que dan mucho juego a la novela. Ambos se mueven también por mundos muy diferentes, que pueden complicar las cosas en el futuro. Así que será una novela con muchas barreras que superar. Una historia que habla mucho del amor, tanto el propio como el que damos a otras personas, que habla mucho de la familia y que vuelve a tener un componente de amistad muy importante.

La narración es una primera persona desde el punto de vista de los dos. Algo muy necesario para poder ver las dos versiones y que nosotros tengamos toda la información. Hace que sea todo más interesante y que lo suframos más. A menudos son capítulos muy cortos o con bastantes pausas, lo que da mucha agilidad a la lectura. Una narración muy fresca y directa, con voces llenas de chispa que divierten y entretienen de principio a fin. Soltarlo es muy difícil.
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La historia de Rachel y Malcolm me gustó mucho, es una historia romántica, apasionada y divertida, y los personajes secundarios me dejaron con ganas de más, en especial Gina y Tahoe. Su historia no fue lo que esperaba, pero también me gustó mucho. Livvy y Callan me enamoraron por completo y sin remedio. Y esta vez me ha vuelto a pasar.


Conocimos a Wynn en la trilogía Pecado, ya que es una de las mejores amigas de Rachel, y aparece en todas las historias posteriores. No os voy a engañar: su relación con Emmet nunca me gustó y estaba deseando que tuviera su propia y apasionada historia de amor, más aún después de ver, en el libro anterior, lo infeliz que era. Cullen es el hermano mayor de Callan. Nos habla de él brevemente en el libro anterior, pero no sabemos mucho sobre su vida o su trabajo. Por lo que lo vamos descubriendo (y nos vamos enamorando) al mismo tiempo que Wynn lo va conociendo (y se va enamorando).

La manera en la que se conocen es de lo mas divertida y la apuesta que hacen totalmente absurda. Pero eso le da a Wynn la oportunidad de escapar de Chicago y su depresión y disfrutar, por primera vez en mucho tiempo, de la vida. Cullen se fijo en Wynn mucho antes de lo que ella cree y no dejará pasar la oportunidad de demostrarle lo magníficos que son juntos, lo increíble que puede llegar a ser la vida si la comparten el uno con el otro. Pero cuanto mas seria se pone la relación, más miedo tiene Wynn de sufrir, porque no cree ser capaz de ser lo que Cullen necesita. Su última relación la ha dejado sin confianza y le cuesta creer que alguien tan maravilloso como Cullen la quiera a ella. Pero Cullen es maravilloso y no se rinde ante nada, mucho menos si se trata de demostrar a la mujer que ama que están hechos el uno para el otro.

Por lo tanto, tenemos otra (al parecer, la última) historia preciosa en la que los protagonistas se van conociendo poco a poco, se van enamorando el uno del otro cada vez más a medida que sus sentimientos se vuelven más y más profundos. La situación llegará a tal punto que ninguno de los dos podrá ignorar lo que sienten, lo que está pasando. Tendrán que ser totalmente sinceros y arriesgarse por una vez en su vida si quieren ser realmente felices.


Igual que me pasó con el libro anterior, esta historia no es lo que me esperaba, pero una vez más me ha sorprendido y mucho. La historia es divertida, romántica y sencilla. La manera en la que se conocen es de lo más divertida y te mantiene en tensión durante un par de capítulos hasta que se desata la pasión a todos los niveles. Y a partir de ahí tenemos una historia de lo más romántica y apasionada (muy, muy apasionada), muy dulce. Cullen me ha enamorado por completo, igual que me pasó con su hermano y sus mejores amigos, y me ha encantado como la autora ha desarrollado la historia y sobre todo como se resuelve.


El ritmo de la trama, como las anteriores, es ágil, bastante ligero, y la pluma de la autora es divertida, ingeniosa y sencilla, con unos protagonistas que enamoran. Lo devoras casi sin darte cuenta y te deja con ganas de más, mucho más. Una historia romántica, muy divertida, con una pluma ágil y amena y unos protagonistas, tanto principales como secundarios, adorables y apasionados. Estoy segura de que la disfrutaréis mucho si os gusta el género. Espero que os animéis con ella.
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Este libro forma parte de la exitosa serie de libros : Pecado.
Se pueden leer de manera independiente como ha sido mi caso.
En esta entrega conoceremos a Wynn y Cullen. Ella acaba de terminar con una relación de cuatro años que pensaba que seria la definitiva y él nunca ha conseguido tener una relación seria desde hace mucho tiempo.
Cullen es jugador profesional de póker y gracias a una partida empiezan a conocerse. A partir de aquí empezará una tensión sexual que no podrán frenar. Ella tiene claro que solo es un juego, él hace mucho tiempo que esperaba este momento. Ninguno está preparado para todo lo que les espera.
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Como todos los libros que caen en mis manos de esta editorial me ha resultado adictivo, fresco y no he podido soltarlo hasta acabar con él.
En algún momento me ha resultado pesada la erótica aunque debo decir que he disfrutado mucho de la relación que tienen. Wynn consigue darse una segunda oportunidad, conocer a alguien aunque tenía cerradas las puertas al amor y por una serie de problemas personales cree que no podrá hacer feliz a ningún hombre.
Me encanta como evoluciona a lo largo del libro y como vuelve a confiar en ella misma.
Los personajes principales como secundarios me han gustado. Los capítulos son cortos y contados mayormente por Wynn aunque alguno esta narrado por Cullen y es fantástico conocer su perspectiva de la relación.