El otro lado

Mucho antes de la publicación de El Otro Lado, ya tenía yo fichado a Samuel Estepa aunque, curiosamente, como autor autopublicado. al final no llegué a tiempo de conocer su trabajo como autor independiente pero tenía claro que iba a leerlo en algún momento aunque sólo fuera por lo mucho que me gusta The Bookbuster, su canal de booktube que os dejo enlazado por aquí, por si queréis conocerlo también en esa faceta. Llevaba más o menos una idea de lo que me encontraría y de la temática que tiene la novela y por supuesto, tenía presente que se trata de la primera novela de un autor novel, aunque esto lo he notado sobre todo a nivel de trama y no de narración, así que en general me ha gustado mucho poder conocer al fin esta historia que llevaba un par de años en lecturas pendientes. Además ha sido una sorpresa descubrir la edición tan chula que tiene con los comienzos de capítulo porque me la imaginaba bastante más parca en detalles.

La novela nos presenta a Sarah, la chica nueva que llega al pueblo tras su enésima mudanza pero esta vez sólo con su padre, tras haber perdido a su madre recientemente en un accidente de tráfico en extrañas circunstancias. Allí conoce a Eric, un chico extraño y poco hablador que le revela un mundo de misticismo. La trama es bien sencilla hasta aquí, aunque algo tiene que engancha bastante por la presentación que va haciendo la propia Sarah de su día a día como la chica forastera que llega a otro sitio más tras los continuos cambios de residencia de sus padres, algo que la hace sospechar de que le ocultan cosas porque no es normal abandonar su casa en mitad de la noche sin previo aviso, casi en pijama. Este misterio continúa a lo largo de toda la novela y creo que es lo que me ha hecho leer rápidamente y con facilidad pese a que la temática en sí misma no es de mis favoritas.

A simple vista, Sarah es la protagonista de la novela, aunque solo sea porque la trama gira en torno a ella y lo que le sucede desde que llega a Valdepeñas. de hecho, en la primera parte del libro y estructurado de esta forma, la narración está en primera persona desde su punto de vista absoluto. Gracias a eso, la chica me ha caído genial porque el autor la ha dotado de una personalidad irónica y muy juvenil con la que ha sido fácil conectar, con la salvedad que comentaré más adelante. Por el contrario, tras el suceso que divide a la novela en dos, la segunda parte cambia por completo de narrador, que pasa al omnisciente en tercera persona y creo que también debido a esto, cambia de ritmo y de tono. Yo lo he notado muchísimo en cuanto a mis ganas de leer, porque la segunda mitad me ha costado bastante más por la poca relevancia que pasa a tener Sarah a favor del otro personaje relevante: Eric, el chico por el que bebe los vientos desde que llega al pueblo. Para mí ha sido una pena, y quizás si la segunda mitad hubiera seguido la misma técnica del punto de vista en primera persona aunque fuera a través de los ojos de Eric, quizás hubiera disfrutado más.

Así que aprovecho también para comentar que muchas veces no entiendo esas decisiones de cambiar de primer narrador a narrador omnisciente dependiendo del personaje, porque o se domina muy bien la técnica o es muy difícil mantener el mismo ritmo y el mismo tono sin que el lector lo aprecie, y en mi caso, el cambio ha sido a peor. Pero dejo claro que no he podido soltar el libro, quizás debido a que la trama engancha más allá del ritmo que tenga y a que los personajes me han parecido muy interesantes, no sólo Sarah, sino también los secundarios como el grupo de chicos amigos de Eric o el misterioso Bartolomé. Aunque hablo siempre a nivel de acontecimientos, porque la construcción de personalidad es posible que solo quede patente en la protagonista y solo mientras ella es la narradora, porque el resto de personajes están tratados de forma más ligera. Además, ambientada en un pueblito donde todo el mundo se conoce, es fácil crear un escenario hogareño de cercanía que también me ha hecho conectar mejor con el entorno, así que ha sido sencillo verme dentro de la trama porque veía “factible” (dentro de lo paranormal, obviamente) que algo así suceda en un lugar como el que se describe en el libro.

Sin embargo, seguramente lo que más flojee en esta historia es el tema de los tiempos con los que se ha jugado en toda la trama: demasiado poco tiempo para todo lo que sucede. En este sentido, con lo que más crítica debo ser (por cuestión de gustos) es con el instalove evidente que hay nada más empezar la novela. Aunque este “fallo” ya me iba extrañando mucho al ir leyendo, ya que creo que precisamente en esta novela en concreto la solución habría sido muy sencilla para evitar esto, ya que en los capítulos se va indicando la fecha exacta del día en el que transcurre y hubiera bastado un reajuste de fechas para crear la sensación de que las cosas llevan su tiempo, al menos a ese nivel de sentimiento que parecen querer transmitir los personajes al hablar de lo enamorados que están en apenas un mes, literalmente, un mes. A pesar de ello, me he tomado el romance como un detalle más de la trama, el motor necesario para que haya conexión entre lo que sucede con Sarah en la primera mitad y cómo se desarrolla todo en la segunda para solucionarlo, así que realmente no ha supuesto mayor problema para mí más allá de haber puesto los ojos en blanco varias veces.

Como dato curioso, una de las cosas que más me han llamado la atención es el nombre de los personajes que ha elegido el autor (ya no sólo los dos principales, Sarah, Eric) sino también los secundarios tienen nombres como Kevin y Aaron, demasiado americanizados para tratarse de un pueblecito de Jaén. Pero por otra parte, la forma de escribir que he descubierto en Samuel Estepa es lo que más me ha convencido y gracias a lo que he disfrutado de una trama que en otro tipo de narración me habría parecido hasta floja. Pero aquí el autor sabe generar y mantener el interés con una fluidez ayudada por los continuos diálogos y con muy poquitos párrafos descriptivos. Además juega bien la carta del misterio hasta el final y aunque ya os he comentado el cambio de ritmo que hay entre las dos mitades de la novela, ese nivel de misterio sí que se mantiene mientras se van resolviendo otras pequeñas tramas con personajes secundarios que también tienen un papel relevante en el desenlace.
En definitiva, una historia de espíritus vengativos, misterio y romance que, si bien no resulta del todo sorprendente, logra enganchar con sencillez en la trama y con un estilo narrativo muy fluido. Es un buen comienzo para Samuel Estepa como autor a tener en cuenta a partir de ahora porque la buena base no le falta, así que habrá que estar pendiente a sus próximas historias. Si os gustan las novelas de espiritismo y sesiones de contacto con fantasmas con asuntos pendientes, esta historia puede ser una buena opción para pasar un rato entretenido y descubrir a un nuevo autor, pero creo que también se disfruta por el mero hecho de ver resuelto el misterio que engloba toda la trama.
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El otro lado es una novela juvenil de ficción, que mezcla la realidad de una joven en su día a día en el instituto y el misterio del espiritismo.

La obra consta de dos partes bien diferenciadas y un epílogo, en las que conocemos a los distintos protagonistas:

Por un lado, tendremos a Sarah, una joven de 17 años, que es bastante madura para su edad, si bien comete algunos errores propios de la adolescencia. Es algo cabezota y reservada, pero si profundizamos un poco en su personalidad, descubrimos a una joven que busca encontrar su sitio, respuestas a por qué su vida está patas arriba y una familia y amigos que la comprendan. Pese a ser bastante patosa físicamente, tiene una fuerza interior y una determinación dignas de ser admiradas.
Es, en definitiva, un personaje bien construido, que muestra una clara evolución a lo largo de toda la novela.
Además, ella es la que nos narra en primera persona la primera parte de la novela.

Por otro lado, tenemos a Eric. Un extraño adolescente de 17 años, en cuya clase acaba Sarah al mudarse por séptima vez en dos años.
De él, iremos descubriendo más datos en la segunda parte de la novela, narrada en tercera persona.
Eric esconde un secreto que llevará a Sarah a vivir una experiencia que jamás imaginó.
Es una persona que suele ocultar sus sentimientos y mostrarse valiente a pesar de estar totalmente aterrado. Leal a las personas que ama, hará lo posible por protegerlas, a pesar de que su orgullo le pueda llevar a enfrentamientos que no tendrían por qué producirse.
Pese a todo, es sencillo encariñarse y empatizar con él, pues sus errores no dejan de ser los mismos que cualquiera de nosotros hemos podido cometer en alguna ocasión.

En cuanto a la trama de la historia, debo reconocer que me ha gustado la idea. No se puede decir que sea del todo original, pero sí que lo es el modo en el que se desarrolla, y la forma de explicar cada uno de los hechos paranormales que esconde la obra.

En algunos momentos, la historia decae, resultando un poco lenta y previsible, pese a que la mayor parte del tiempo es rápida e interesante, llevando al lector a pegarse a las páginas del libro. Y es aquí donde debo reconocer, que me sentía tan atrapada en la lectura, y tan parte de la historia, que mi corazón se aceleraba en los momentos de peligro que tanto Eric como Sarah estaban atravesando.

Para ser la primera novela del autor (si bien no es la primera que escribe), debo reconocer que está muy bien contada y que se le pueden poner pocos peros. Tened en cuenta que el público al que va dirigida es juvenil y young adult (joven adulto), y que los personajes son acordes a la madurez que un chico de 17 años puede alcanzar.

Las descripciones de los distintos lugares están tan detalladas, que casi podemos sentir que estamos allí con los personajes, sin llegar a resultar pesadas o empalagosas.

Por último, decir que el lenguaje empleado y la sensibilidad que Samuel Estepa emplea a la hora de narrar la novela, la convierten en una lectura sencilla y amena, a la par que interesante. ¿Os animáis a leerla?

La historia comienza de manera súbita con Sarah siendo despertada de una pesadilla con la noticia de que tienen que mudarse por enésima vez. Ella no sabe por qué han cambiado de casa, ciudad e, incluso, país tantas veces y las explicaciones que le dan sus padres no parecen ni acercarse a la verdad. En su viaje o huida a su nueva casa una figura oscura aparece en medio de la carretera y tienen un accidente en el que muere la madre de la chica.

Ya desde el principio se intuye que a Sara le sucede algo raro, aunque no es hasta el final de la novela cuando se descubre cómo encaja la chica en toda la historia. Sarah, por su parte, no insiste mucho aunque sabe que no le está contando la verdad. Me extraño bastante porque con 16 o 17 años podría haber formulado muchas más preguntas o teorías. Se comporta con la inocencia de alguien tres o cuatro años menor.

El misterio de los primeros capítulos se mantiene hasta más o menos la mitad de la novela, pero la segunda parte se vuelve bastante predecible. Como consecuencia, el giro trágico del final deja de ser la gran sorpresa que debería haber sido y se convierte en obvio. Aunque, como he dicho, se ve venir, no recomiendo este libro a aquellas personas que quieran finales felices.

En cuanto a los personajes, todos son muy planos a excepción de Sarah y Eric, los dos protagonistas. Además, Eric me pareció bastante inaguantable, sobre todo en lo que respecta a su falta de empatía y sentido común. Por ejemplo, tiene un poder raro y que la mayoría de la gente desconoce completamente y hay una escena en la que se enfada cuando Sarah hace algo cuyo peligro era imposible que la chica conociera. Aparte de esto, se enamora de Sarah en un par de semanas. Entiendo que, debido al poder que tiene, se sienta atraído por ella, pues la cercanía de la chica hace que este poder reaccione de una forma extraña y nueva. Incluso se explica la razón hacia el final de la novela. Pero la descripción de su amor es exagerada teniendo en cuenta que la conoce desde hace muy poco.

Como punto positivo cabe destacar que se lee con bastante rapidez y que, aunque el libro me resultó predecible y la historia de amor algo empalagosa, no me cansó en absoluto y fue aceptablemente entretenido.

Descubrí este libro por causalidad, pero a veces resulta que las casualidades pueden ser tan bonitas como esta historia. Hace un par de semanas recibí la nota de prensa de este libro por parte de la Editorial Hidra, y tras leer su sinopsis supe que quería leerlo, pues contiene sucesos paranormales, misterio, acción, romance y muchos giros en la trama. Todo lo necesario para que un libro me guste. Si bien al principio puede dar la sensación de ser un libro de corte juvenil, nos encontramos más bien con un libro que puede dejar con la boca abierta a los más jóvenes y maravillar a los más adultos.

El libro narra la historia de Sarah, una chica cuya familia se muda continuamente de casa. En su última mudanza, de camino a un pueblo de Jaén, tiene lugar un suceso trágico que está marcado por un secreto en el pasado de su familia. En este pueblo, Sarah conocerá a Eric, con el que vivirá su primera historia de amor; y a un grupo de chicos con quienes a través de la ouija, descubrirán que alguien quiere comunicarse con ella desde el otro lado. al acudir a esta llamada, se adentrarán en un terreno peligroso del que les resultará muy difícil escapar.

El argumento de la historia me ha gustado muchísimo y he disfrutado enormemente leyéndolo. La trama está muy bien desarrollada, y a pesar de que alguna cosita me ha parecido bastante edulcorada (ñoña), el resto del libro es altamente recomendable. Hay muchos giros inesperados que hacen que la historia sea casi adictiva. Personalmente, considero que soy una persona bastante miedosa cuando se trata de temas como el espiritismo y la ouija, y en ciertas situaciones lo he llegado a pasar mal (en el buen sentido) porque sentía que realmente estaba siendo parte de esas sesiones, pero a la vez no podía dejar de leer.

Para poder hablar sobre los protagonistas, es necesario que en primer lugar comente la estructura del libro, porque creo que tiene mucha relación. El libro está dividido en dos partes. La primera de ellas, llamada Sarah, está narrada por la protagonista del mismo nombre. Nos encontramos con una narración en primera persona que nos permite crear un vínculo con la chica y conocerla más a través de sus pensamientos y su historia. La segunda parte, llamada El Otro Lado, está narrada en tercera persona. Este tipo de narración nos permite conocer más a todos los protagonistas, ya que este narrador lo sabe todo sobre ellos. de esta manera, el autor nos hace crear un lazo invisible con todos los personajes del libro, de tal modo que cuando llega el final los sentimientos están a flor de piel.
Por otro lado, el estilo del autor es ligero y juvenil, dotándolo de una frescura que hace la lectura amena y rápida.

En cuanto al final (¡ay, el final!), aún lo sigo asimilando. Decir que me quedé destrozada es poco. Después de tantos giros en la trama, creía que el final sería algo previsible, pero para nada ha sido así. Creo que el autor ha sabido darle un final muy acorde y realista al libro.

En conclusión, El Otro Lado, se trata de un libro que enganchará tanto a jóvenes como a adultos. Un libro que es difícil dejar de leer, pues te atrapa desde el principio hasta el final. Totalmente recomendado para todos los gustos.
Enlace: http://miplanetasingular.blo..

Me daba un poco de miedo leer este libro ya que en la sinopsis ya pone que trata sobre espíritus, la ouija, etc. Son temas que a mí personalmente me asustan bastante. Empecé a leerlo y los dos primeros capítulos fueron bastante intentos en cuanto a intriga, algo de terror, si es que puede llamarse así. Mi primera impresión tras leer eso fue muy gratificante ya que necesitaba saber más y estaba enganchada ya desde el minuto uno. Para mi sorpresa, esa parte de "terror" se fue dejando a un lado y se convirtió en una novela de amor entre dos adolescentes que se acaban de conocer. No es hasta el final del libro cuando se retoma esa parte de intriga y de querer saber las cosas, pero ya no tiene la misma intensidad que al principio. Eso quizás me disgustó un poco.
El libro en sí es muy fácil de leer, la narrativa es súper fluída, no se llega a hacer pesada nunca y cuando te das cuenta, piensas que han pasado cinco minutos y llevas una hora leyendo.
Los personajes no están del todo desarrollados por lo que quizás cueste un poco empatizar con ellos.
Lo que más me gustó del libro fue el final sin duda. Un final bastante épico, lo que me hace darle 3 estrellas de cinco, junto con lo fácil que es leerlo y la fluidez de su escritura.