Lorca: Un poeta en Nueva York

Una mirada del paso del poeta y dramaturgo Federico García Lorca por Norteamérica como becario en la universidad de Columbia, donde a través de su obra podemos deducir que no encontró la armonía que esperaba encontrar, sino que fue espectador de una sociedad moderna deshumanizada y mecánica de New York, una urbe corrompida por las desigualdades e injusticias sociales, fue en este contexto donde se interesa especialmente por la comunidad de los habitantes de Harlem por quienes siente una gran simpatía e inclinación por la opresión de que eran objeto en aquellos días.

Lorca un poeta en Nueva York (2019), es una novela gráfica de Carles Esquembre, que recoge la aventura americana del creador, movido por el desamor de Emilio, que le abandona, harto de las acusaciones de aprovechar la fama de Lorca para impulsar su carrera como escultor. Este hecho resquebraja la vida del poeta, que se siente perseguido por ese amor no correspondido en sus sueños y en la travesía en barco, lejos de España y lejos de él.

En la ciudad de los rascacielos pretende estudiar inglés y tomar contacto con la cultura americana. Se encuentra con un grupo de amigos que rápidamente lo adoptan y guían por los lugares más característicos de la Gran Manzana: locales en los que se vende alcohol de forma clandestina, cabarets, salones de baile, casas de quirománticas... Y es aquí donde Federico se encuentra, por segunda vez desde que ha abandonado España, con un mal presentimiento que tiñe de negro sus días.

Aunque le conocen como el "sleepy boy" en la cafetería donde desayuna pastel de manzana o huevos con beicon, porque no sabe pedir otra cosa, lo cierto es que se pasa las noches intentando estudiar inglés, pero termina siempre componiendo unos versos en los que lo mecánico, lo inhumano, fagotiza todo lo emocional.

Y esta honda preocupación, que se hace más profunda cuando es testigo de la caída de la bolsa y sus funestas consecuencias, hacen que, en su fiesta de despedida previa a su viaje a Cuba, advierta a sus amigos del peligro de los fascismos, aunque se muestre lleno de valor, dispuesto a combatir con su pluma. Así lo hará a su llegada a España, en las conversaciones con su editor sobre si incluir o no las duras imágenes y dibujos de su periplo americano en el que sería su último poemario. Queda en el aire la decisión última, pues Lorca opta por regresar a casa, a Granada, donde se siente más seguro, y donde encontrará la muerte.
La oscuridad de la obra es reflejo de la que atrapaba a Federico en esos últimos tiempos, en los que se abría a una nueva forma de crear, pero también sufría enormemente por las heridas de los desengaños padecidos y por sus obsesiones recurrentes con la muerte y los muertos, los insectos y las pesadillas.
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Una novela gráfica que narra de forma un tanto surrealista la estancia de Federico García Lorca en Nueva York.

Tras un desengaño amoroso y ser rechazado por sus amigos Salvador Dalí y Luis Buñuel, Lorca viaja a Nueva York con la excusa de aprender inglés. Allí se encuentra con una ciudad enorme, un microcosmos en sí mismo, una máquina casi impersonal que aliada con sus personales pesadillas le provocan un éxtasis creativo así como un deseo inmenso de volver a sus orígenes.

Son pocas páginas, pero que muestran perfectamente las obsesiones y temores del poeta granadino.

Este cómic me ha hecho "entender" un poco el libro de Lorca, el cual leí hace unos años y ya que no soy muy dada a la poesía, he de admitir que estaba perdida, tanto surrealismo y no iba conmigo. En este cómic donde se narra un poco el viaje de Lorca lo pones en contexto.

Un cómic sobre una obra del granadino más universal, un cómic sobre Poeta en Nueva York. Un libro que no había leído y al cual me he acercado en este cómic que refleja tan bien el mundo interior del poeta, sus miedos y sus pensamientos. Me ha gustado bastante por la forma de tratar al protagonista y lo bien contad que está la historia.