El tercio que nunca existió: Gloria y tragedia de los soldados españoles en Escocia

Esparza regresa con una nueva entrega de las memorias apócrifas de Julián Romero de Ibarrola que tantos buenos momentos nos dio en San Quintín.

Esta segunda novela se sitúa unos años antes de su primogénita y en tierras inglesas.

Allí llegarán un regimiento de tercios que tras ser licenciados en Flandes con poca honra, viajan a España.

Durante su travesía su barco sufre un "oportuno" accidente que les hará desembarcar en la costa británica con más pena y hambre que gloria.

Para mayor ventura de los náufragos son recogidos por Antonio Eguaras, comerciante, diplomático y gran señor con el don de siempre estar en el lugar que mejor le conviene.

Gracias a su "desinteresada" mediación nuestros desterrados arcabuceros serán puestos al servicio del rey Enrique VIII tiempo después de ordenar decapitaciones de amantes que tan célebre le hicieron.

La obra se centra en el permanente conflicto de Inglaterra y Escocia y en como un grupo de militares españoles se unieron a la causa de una guerra que en principio, ni les iba ni les venía.

Aunque el libro está plagado de escarceos, pequeñas y medianas batallas y aventuras, tanto ritmo, como protagonismo de los tercios pierden fuerza con respecto a su anterior novela.

Escrita en primera persona y en castellano antiguo adaptado el texto nos acerca a un militar de espada y mano ligera.
Julián fue un tercio español que como tantos otros, a la hora de las balas y la sangre, olvidaba las miserias y defendía a su patria hasta las últimas consecuencias.

Como acostumbra, José Javier Esparza se documenta hasta la extenuación para acercar al buen lector un episodio que quiso ser silenciado por el fino hilo que mantenía el equilibrio político de la época.

Si bien es cierto que en esta ocasión el gran divulgador valenciano, aunque entretiene, no consigue mantener la altatensión narrativa que la historia merece.

En cualquier caso una forma distinta de ver aquel nido de cuervos que fue la corte inglesa de Enrique VIII y los movimientos de unos y otros por su sucesiones.

Un buen libro, aunque esperaba algo más.