¡Piratas!

Después de terminar la lectura de Maríah Evans, Un océano entre los dos, me quedé con ganas de más piratas y este libro me pareció buena opción y así ha sido, todo un acierto.

Wildhelmina (telita con el nombre) es una joven inconformista y rebelde que ha crecido con las historias de intrépidos piratas que su madre le contaba. Cuando su padre es nombrado gobernador de Jamaica ve más cerca la posibilidad de cumplir su sueño, conocer a esos famosos piratas y vivir una gran aventura.
Pero el Capitán Anderson no tiene ninguna intención de permitirle cumplir sus planes ya que él pretenden acabar con toda la flota pirata y limpiar el Caribe.

Es una buena historia, amena, entretenida, divertida en ocasiones y emocionante en otras, muy bien llevada por la autora manteniendo el ritmo en todo momento. Cuenta con un gran número de personajes secundarios que le dan agilidad a la trama pero sin caer en excesivas descripciones. La lucha dialéctica entre ambos protagonistas y sus enfrentamientos le dan un toque divertido a su relación y te mantienen enganchados a su historia.
Me ha gustado mucho descubrir la pluma de esta autora de la que tan bien me habían hablado.