Este es el segundo libro de la short saga de fantasía que consta de 4 libros. Después de que Fhiro ha visto lo que Erehna hizo, él necesita explicaciones. Necesita saber que fue lo que ha pasado ahí. Y ella se lo cuenta, pero no quiere que los demás se enteren. Quería dedicar un momento a un personaje que me tiene en ascuas. Oione es una chica que está loca (aunque diría que es la más cuerda de todo el grupo). Lee encanta leer y que le cuenten historias y habla con un ser imaginario que solo ella puede ver (yo creo que puede hablar con los fantasmas). Tiene pesadillas, ya que al evitar que la reina bebiese la copa, una niña que estaba ahí, cogió la copa y se la bebió. Desde esa, no pudo superarlo y es feliz en su mundo. Para llegar a Ahtti, necesitaron la ayuda de un Dyr, que apareció de repente en su camino. Se llama Nuesenya. Los Dyr son seres que se pueden convertir en cualquier animal, en este caso, ella es una fénix. Después de varias andanzas, logran llegar a Ahtti. Ahí se meten en un lío, del que logran salir de esa, y para eso, tienen que vencer a un duelo. Es un duelo que me ha encantado y ha sido maravilloso. Más tarde, hablan con el dioscuro para que les ayude a descifrar las runas. Si el anterior era malo, este dioscuro (Erihk) es malvado, incluso esa palabra le queda corta. Este dioscuro me ha encantado demasiado y le ha dado un final tremendo a esta segunda parte. Se ha descubierto algo, que yo, sinceramente, no me lo esperaba (ingenua de mí). Me ha encantado este final porque me han dado ganas de más. Tengo que decir que, gracias a este secreto, el grupo se ha dividido. Cudrinn, Dedk y Oerara se van por un lado y Fhiro, Erehna y Oione por otro. Ahora, su destino está en Ireen, donde está el siguiente dioscuro para que les ayude, ¿lo lograrán? + Leer más |