Leer Malaz es lo más parecido a la Fe que he experimentado en la vida. Fe en que al comenzar un nuevo libro entienda algo de lo que suceda, Fe en que al final del camino todo encaje, Fe en que merecerá la pena todo este esfuerzo. Y es que Erikson pone a prueba en cada libro las motivaciones del lector a seguir. En cinco libros, cuatro de ellos han sido con nuevos personajes, nuevas tierras y nuevas historias. Cuando parece que entiendes algo, vuelta a empezar. Pero con todo ello, la maravilla que teje Erikson en cada libro hace que siga leyendo, que siga motivado a descubrir más detalles de ese universo y de cada personaje. Personajes que consigue dotar de voz propia a todos y cada uno de ellos. Si te estás planteando leer Malaz ten presente que será un camino difícil, pero recompensado. |