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Clay es miembro de una famosa banda retirada, Saga. Lleva una vida tranquila como guardia en un pequeño pueblo donde vive con su mujer y su hija sin preocupaciones hasta que, un día, aparece en su puerta Gabe, el líder de Saga, pidiendo ayuda para rescatar a su hija, que corre un gran peligro. de esta forma, ambos comenzarán un viaje para reunir a la vieja banda y recorrer la peligrosa tierra salvaje. ¿Quién dice que las viejas glorias están acabadas? Nos encontramos ante una historia del subgénero Grimdark, con violencia y mucho, pero mucho sarcasmo. Vamos, lo que viene a ser una maravilla. El autor nos ofrece una combinación de aventuras y peligros con dosis de humor sarcástico que ha conseguido que leyera todo el tiempo con una sonrisa en los labios, especialmente con algunos de los pensamientos que comparte Clay, que actúa como personaje principal, guiandonos a través de la trama y explicando el contexto con sus ideas y recuerdos. Comenzamos la historia con el intento de Clay y Gabe de reunir a la banda, lo cual me ha encantado porque nos ofrece una muy buena presentación de personajes, que no siempre resultan ser como nos cuenta Clay, ya que él mismo se lleva sorpresas con sus actitudes. Y, más adelante, comienza la aventura en sí misma, el viaje para salvar a Rosa y todos los peligros que se van encontrando. No he podido disfrutar más de esta historia. El tono de humor que tiene, la ambientación Grimdark, los personajes carismáticos y llenos de claroscuros, cómo afrontan los cambios en el mundo, comparándolo con cómo era cuando ellos estaban activos... Es que es una gozada de historia. Ya solo me queda hacerme con su segunda parte, porque me he quedado con ganas de conocer a Rosa y su banda. En general, una historia de aventuras y fantasía que hará las delicias de todos aquellos que disfruten de las historias con personajes carismáticos y humor. |
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