The Last of Us: Sueños americanos

Ambientado poco antes de la historia que se desarrolla en el primer videojuego, el cómic nos presenta a una Ellie de trece años que acaba de ingresar en un internado militar, el supuesto sitio más seguro donde puede estar una chica rebelde como ella en un mundo que vive en cuarentena frente a la amenaza zombie. En el internado conoce a Riley, una chica que lleva más tiempo allí y sabe cómo manejarse con los matones y también cómo salir de vez en cuando. Es así como Ellie consigue salir por primera vez al mundo exterior.

En su escapada irán a un antiguo centro comercial, donde se encuentra un ermitaño medio conocido de Riley que enseña a Ellie a montar a caballo. También visitarán una sala de máquinas, guiño que ya vimos en el capítulo extra del primer videojuego, y se toparán con una reyerta entre el famoso grupo de insurrectos llamados Luciérnagas y las tropas de vigilancia. Ambas se verán mezcladas en este conflicto y Ellie conocerá entonces algo más sobre su historia, puesto que la jefa de las Luciérnagas le entrega una carta que la madre de Ellie había escrito para ella.

Se trata de una historia sencilla, que recuerda mucho por su ambientación y lo que cuenta al propio videojuego, o más bien a ese extra que mencionaba antes. Lo cierto es que esperaba otra cosa, quizás algo un poco más duro (quizás en la línea del The last of us 2) o con un dibujo algo diferente (no está mal, pero por la imagen de cubierta creí que sería más realista), pero aunque no ha sido cómo pensaba, siempre es un placer volver a encontrarme con el mundo de The last of us y con Ellie.