Vitae: No te enamores de un monstruo

Este libro me llegó gracias a la iniciativa de "Libro viajero" puesta en marcha por su autora, y tengo que reconocer que una vez leído y sufrido, me costó mucho dejarlo ir.

Ya había disfrutado de la impecable y cuidada pluma de Andrea con "Psique" pero esta es la primera novela suya en la que me he sumergido y ha sido una experiencia increíble.

La protagonista, Lidia, es una joven marcada por un accidente al que sobrevive milagrosamente, y tras el cual es diagnosticada de talasemia, una enfermedad de la sangre que le supondrá tener que hacerse transfusiones periódicas durante toda su vida. Ella misma nos cuenta en primera persona como años después tiene que hacer frente a unos nuevos y extraños síntomas al tiempo que lucha contra sus traumas y sus miedos. Y es que en Los Fresnos hace años que suceden extrañas desapariciones.

Este libro supone una experiencia inmersiva en la que casi puedes sentir en tu piel todo lo que la protagonista sufre: su angustia, malestar y confusión. La historia va creciendo en intriga e intensidad y, si bien desde el principio ya sospechas lo que sucede, no es hasta el final cuando descubres una explicación más intrincada y sorprendente de lo que al principio parecía.

El final de este thriller descuadra en positivo tratándose de una novela de vampiros: nos hace preguntarnos hasta que punto podemos consentir cierto nivel de acoso y maltrato con la excusa del amor, y nos recuerda que las decisiones sobre nuestra vida son siempre responsabilidad y elección nuestra.