¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?

Me llamó mucho la atención el título de la novela cuando leí la reseña de NeldaChapa, y si encima lo valoró con todas las estrellas y que Dick sea elogiado por marenpergamino, no pude hacer otra cosa que leerlo. Este hallazgo a partir de los usuarios de Babelio ha sido genial, me ha encantado.

Phillip K. Dick, en un arranque imaginativo que me ha fascinado, nos cuenta una historia en la que humanos y androides conviven (¿conviven es la palabra?) en un planeta Tierra que ha quedado devastado por una guerra química mundial, donde el polvo cósmico y la "basugre" se apoderan de toda la superficie. Por este motivo los humanos que han podido han emigrado a Marte con sus androides, quedándose en la Tierra los "cabezas huecas" entre otros parias.

Sin embargo, se sabe que ciertos androides muy desarrollados, en concreto los Nexus-6, han sido capaces de escapar de sus amos y colarse ilegalmente en nuestro planeta. La humanidad, la cual sigue la corriente religiosa del mercerismo, considera a estos ejemplares como peligrosos e insta a su retiro (qué suave queda la palabra eliminación). Este trabajo está destinado a los cazarrecompensas, trabajo que efectúa Rick Deckard.

Para discernir entre humanos y androides que se hacen pasar por humanos existe un test que mide la empatía, característica que ningún androide es capaz de adquirir o imitar. Eso al menos en teoría, ya que el autor nos hace tener dudas con este aspecto y con muchos otros a lo largo de toda la novela. Por eso cualquier humano humanísimo quiere tener un animal de compañía, para demostrar su capacidad empática. También existen los animales eléctricos, como la oveja que aparece en el título, los cuales aparentan ser reales y son mucho más baratos.

A lo largo de toda la narración Dick va sembrando cuestiones morales a través de detalles que van apareciendo durante la trama, cosas que diversos personajes de diferente índole dicen o hacen. Estas acciones de Rick (humano), androides como Rachel Rosen o cabezas hueca como John Isidore rompen los esquemas de lo que se presupone que es propio de cada ente.

¿Es empático Rick cuando su trabajo consiste en "retirar"androides sin ningún remordimiento? ¿Los androides sienten o sólo lo simulan? ¿Sueñan los androides? ¿Si esto ocurre, no están tornándose los papeles y los androides son más humanos que los humanos que los matan? Bueno, así me he pegado toda la novela, que imagino que era lo que el autor pretendía. Aun habiendo acabado el libro, sigo haciéndome preguntas porque ha sabido crear incógnitas sobre absolutamente todo lo que he leído.

Aplaudo por ello, un gran trabajo.

Hasta que no leí un poco acerca de la sinopsis no supe que era el libro sobre el que Ridley Scott rodó Blade Runner. Por suerte para mí, nunca he visto la película pese a lo famosa que es, y para mí ha sido todo nuevo.

Nunca me había interesado mucho por la ciencia ficción, pero he encontrado un filón al que pienso seguir sacándole partido buscando pasar buenos ratos.

Un magnífico libro de ciencia ficción con una historia muy original, que te pone a pensar, debido a que sucede después de una Guerra Nuclear que ha dejado devastado el planeta.

Rick Deckard es una cazador de bonificaciones (recompensas) que trabaja para la policía de San Francisco, su trabajo es eliminar androides; los cuales vivían en Marte como esclavos y huyeron a la tierra después de asesinar a sus amos, al llegar a la tierra se hacen pasar por humanos con actividades propias de ellos, la única manera de detectarlos es mediante un examen de empatía, ya que son incapaces de demostrarla.

Vaya imaginación de este autor, para darnos una historia como ésta, donde se hacen críticas sociales, políticas, religiosas y el hecho que más me impresionó; fue la casi completa extinción de los animales, debido al polvo radioactivo que impera en la tierra, hasta los humanos que se quedan a vivir en ella y no emigran a Marte tienen sus días contados, desgraciadamente emigrar a Marte está condicionado por varios factores y no cualquiera puede hacerlo.

Dick jugó con mi mente en todo momento, ya no sabía quién era humano o androide, y dudaba de todos, un libro recomendado sin duda y más si eres amante de la ciencia ficción.

¿Y tú que tan empático eres?

Lo cierto es que no sé por donde empezar con esta historia porque son tantas cosas en las que podría centrarme que necesito organizar todas las ideas de las que os quiero hablar. Así que voy a ir poquito a poco.
Como punto inicial sabemos que es un libro en el que aparecen androides, todo gira en este mundo donde conviven humanos y robots. Como segundo punto, que considero es el más importante y en el que se centra toda la historia y el mundo que ha creado el autor, es la empatía. Desde mi punto vista, Philip ha utilizado a los androides para hablarnos de un tema atemporal como es la empatía, dejando a esta tecnología avanzada como segundo plano (sin adentrarnos en si es o no ético la creación de androides).. Y sí, atemporal. Si has investigado un poco sobre el autor, habrás visto que nació en 1928. Esto significa que sabe de lo que habla con respecto a la guerra y sus consecuencias; y como indica la sinopsis, la historia transcurre tras una guerra.

Dentro de este mundo hay espacio para una fe en la que los humanos creen: el mercerismo. El libro no habla con tanto detalle sobre esta 'religión' que persigue y promulga la empatía en los humanos pero hace acto de presencia lo justo y necesario para entender que el ser humano siempre necesita de 'algo' que le ayude y le recuerde lo qué es para diferenciarse de los androides. Curioso es que los personajes humanos de la novela se conectan, como si de una wifi se tratara y se introdujera en un foro, a una caja de empatía que le permite compartir con otros humanos sus penas y alegrías, y que el resto de oyentes sientan esa alegría o pena como quien la vive. Este movimiento religioso como es el mercerismo es a lo sumo, cualquier religión de la vida real (cada una con sus éticas) y que ante una situación catastrófica que vive el ser humano, necesita apoyarse en ese 'algo' para sentirse seguro, realizando, supuestamente, buenas acciones y vivo. Esto es lo que les diferenciarían de los androides. Debería.

La vida de nuestro protagonista, el cazarrecompensas Rick, transcurre en un día a día buscando a androides que han llegado a la Tierra escapando de Marte, donde están los humanos privilegiados que han podido abandonar su planeta que ha quedado destruido tras la guerra. ¿Exactamente de qué escapan los androides? La respuesta es bien sencilla. Si te sitúas en la actualidad, donde los androides aún están en proceso de construcción, te darás cuenta para qué se están creando: para ayudar en trabajos pesados y como apoyo al ser humano en actividades más cotidianas de la vida diaria. Lo mismo ocurre en Marte; los androides son esclavos de los humanos quienes tiene una vida lujosa allí. Mientras que los humanos que siguen viviendo, y morirán, en la Tierra, no tienen tantas ventajas como los de arriba por ser especiales. Entiéndase la ironía de especiales en esta novela. Los especiales son los que no merecen tener una vida llena de lujos y facilidades, y quienes van a sufrir mucho más las consecuencias de una guerra.
Retomando a los androides, estos escapan de una esclavitud en Marte para ser perseguidos en la Tierra por ser lo que son, robots. Perseguidos y asesinados por sus propios creadores y eso que los androides tienen una vida limitada y programada.
Rick, a partir del test Voigt-Kampff, diagnostica si un persona determinada es un androide o un humano. Las diferencias son mínimas porque los Nexus-6 -lo último en tecnología- son prácticamente iguales a los seres humanos, pero este test permite analizar el tiempo de reacción ante una situación figurada en la que siempre aparecen representados los animales. Es decir, mide la empatía de quien es evaluado. ¿Por qué animales? La guerra trajo consigo la extinción de casi todos los animales que existían, y los pocos que sobrevivieron están muy protegidos por la sociedad. Si te interesa tener uno, tendrás que pagar un dineral para poder disfrutar de la naturaleza y de tu propia empatía. de ahí que el test que aplica Rick, se centra en sucesos relacionados con los animales porque en este mundo el ser humano siente la empatía con más naturalidad y espontaneidad al saber de la desaparición de los animales en la Tierra.

A partir de aquí, cuando Rick descubre a un androide le persigue hasta matarle. Como adivinarás, los androides harán todo lo posible para esconderse y no ser pillados por los cazarrecompensas. Y esa es la historia en si, con todas las aventuras que conlleva descubrir quién es androide y quién no lo es, si conseguirá matarlos o no, e incluso, hacerte pensar de que lado estás como lector. Puedes pensar ¿y ya está? Bueno, puedo hablarte sobre mi reflexión final al respecto para que interiorices más en los personajes y en lo que el autor nos quiere mostrar con su novela y lo haré, pero te aviso que puede contener spoilers.

Para empezar, me gustaría destacar la religión. Puedes pertenecer a una en concreto o puede que no formes parte de una de ellas. Independientemente de esto, estoy segura de que eres consciente que según que religión, unas hablan más de tener empatía, del amor al prójimo y, por consiguiente, de la aceptación del otro. Aún así, la empatía pertenece de forma natural al ser humano pero el mundo es como es y tiende a hacernos olvidar amar a los demás por el simple hecho de ser personas (sea este amor el que sea).
Nos resulta mucho más fácil amar a lo conocido e igual a nosotros mismos. En la novela los humanos aman a los humanos y en la vida real todos somos humanos pero por prejuicios no queremos tener relación con determinados grupos (en la novela estos grupos son los androides) y por desconocimiento tendemos a desconfiar del otro. Un ejemplo más que claro, es que cuando alguien desconocido se nos acerca para preguntarnos por una calle, lo primero que hacemos es activar una alarma en nuestro cerebro por si acaso, no vaya a ser que nos ataque. Y si este desconocido, desde nuestra perspectiva, consideramos que es de una clase inferior por raza, sexo, religión y social, ya no te digo como esa alarma puede llegar a duplicarse. En la novela, esta alarma se refleja en si el otro será androide o no, si tendrá empatía o no, o bien, si será mercenario o no. La empatía, ante estas situaciones, disminuye de forma exponencial.
E incluso ante un mundo prácticamente destruido, el ser humano no es capaz de mantener la empatía sin la ayuda de ese 'algo', en este caso, necesitan de la caja empática para recordarlo; en la vida real, hay que ir a misa...
¿Realmente necesitamos de esa fe para sentir empatía? Sería ridículo pensar que sí pues como he dicho, la empatía forma parte de las personas. de hecho, en la novela hay humanos que conviven en paz con los androides y los aceptan sean en forma de humano o en forma de animal, no los ven como enemigos; sino, todos serían cazarrecompensas y se chivarían, cosa que no ocurre.
Si nos fijamos bien, son empresas las que se dedican a la caza de androides y a controlar la ciudad manteniéndola segura de ellos. ¿Te suena en la vida real?
Ahora solo queda hacerte una pregunta: ¿Quién tiene más empatía? ¿El que fue creado por los humanos o el humano que necesita de una religión para amar? Lo cierto es que el androide solo se defiende cuando van a matarlo, sino es así, el androide busca tener una vida tranquila como cualquier otro humano. ¿Te sigue sonando?
Rick, una vez que él mismo es Mercer, cosa que entiendo como que ha alcanzado la empatía por completo - pues Mercer es como el dios de la empatía -, ya vive tranquilo. le permite convivir con los androides que no son enemigos, e incluso comprender a Rachel por lo que hace con su cabra. Rick decide no ir a por ella, no vengarse por lo que ha hecho, puesto que el círculo seguiría existiendo sin tener ninguna salida a esta situación. Rick, acepta y vive.

Es un libro que requiere adentrarse en un mundo más allá de los androides. Puedes leerlo sin este objetivo y tomártelo como una historia más de robots y humanos y sin más complicaciones, pero te puede resultar interesante interiorizar más en estos aspectos que te he destacado en la reseña, observando cómo el autor ha reflejado los temas de los que trata en sus novelas y relatos como son la sociología, la política y la metafísica que te he indicado al principio de este post. Visualizarlo teniendo en cuenta dichos temas, te llevará a un libro totalmente distinto y no tan sencillo como puede aparentar en un principio. Quizás por eso, su reconocimiento no vino después de su muerte y ahora entenderás más porque digo que es una novela atemporal. Aunque te recuerdo que esta es mi reflexión que puede coincidir con la tuya o no; depende de cómo analices cada punto y hacia dónde lo dirijas.
Philip R. Dick ha sabido entrelazar cada detalle para que el lector dude sobre su propia teoría, que va formando a medida que lee, sobre cada personaje. de hecho, al terminar la lectura siempre tendrás la duda sobre quien es androide y quien no, exceptuando aquellos que nos dice directamente lo qué son, además de otros puntos interesantes que aparecen en la novela. Este hecho posiblemente sea porque saber si alguien es androide o humano no es lo importante de toda esta historia, sino la empatía, el amor al prójimo y abrir los ojos sobre la sociedad en la que vivimos donde las jerarquías marcan la diferencia entre unos y otros. La empatía no distingue, no aísla, no discrimina. No hace falta llegar a una guerra literal para ver estas diferencias entre nosotros; hay otro tipo de guerras que nos las muestran y que han existido a lo largo de toda la historia. Ya sabes: aceptar te hace libre.
Enlace: https://wordinmypocket.blogs..

Hola a todos, mis queridos seres míticos. ¿Cómo les va con el inicio de la primavera? Por acá todo raro. Tuvimos una nevada en marazo y, mientras escribo esta reseña, está granizando. Así de particular es mi ciudad. Como sea, el día de hoy vengo a traerles esta nueva reseña de un libro que me costó un tanto poder terminar debido a que no cuento con mucho tiempo para leer. Como muchos sabrán, oficialmente salí de la universidad y estoy entrando al mundo laboral, entre entrevistas y un trabajo temporal, lo cierto es que cuento con poco tiempo para lo que me apasiona, pero saben que yo jamás falto por este sitio, ya sea en redes sociales o en el blog, yo siempre aparezco. Y por eso he venido hoy con toda la emoción del mundo debido a que, luego de tanto, por fin he podido traerles una reseña que en lo personal llevaba tiempo deseando hacer. Es por ello que, sin más, pasemos directo a las hostilidades (XD).

In addition, no one today remembered
why the war had come about or who,
if anyone, had won.

Do androids dream about electric sheep?, Philip K. Dick.
Del Rey, New York, 2017, p. 15.

Comenzaré hablando por la trama, que es de donde creo que parte toda la idea y repercute en las otras situaciones. Pues bien, a simple vista se trata de un libro más de carácter futurista, ciencia ficción que habla de robots humanizados. Sin embargo, y esto fue lo que me gustó mucho del libro, no todo para ahí. Los androides son la punta del iceberg que hacen al lector analizar muchas situaciones de su vida actual, de lo que le está ocurriendo al mundo y su papel dentro del mismo. Es algo impactante cómo un libro escrito hace casi 50 años puede tener semejante precisión respecto a unas cosas y extrapolar muchas otras. Luego está, claro, la situación de Mercer. Dentro del texto se trata de algo semejante a una religión, una especie de filosofía de vida que parte desde lo que se cataloga como un hombre que, tras volverse una suerte de mártir, ha impulsado a todos. Aquí me detenngo para decir que cualquier parecido con la realidad de todos los tiempos no es ni de cerca una coincidencia. Claro que esto no es el punto central, pero la analogía que produce en el lector pensar respecto a su propio comportamiento debido a que se le cambian algunos elementos, me encantó.

The tiranny of an object, he thought. It
doesn't knnow I exist. Like the androids,
it had no abiliti to apprreciate the existence of another.

Ibid., p.40.

Algo que me causó ruido fue, desde luego, el hecho de que el autor no pudo despegarse del todo de su época. Entiendo que estuvo limitado a su tecnología, al entorno y contexto en que vivió, pero por momentos siento que ni siquiera se esforzó por crear una imagen futurista de eso que rodeaba a su personaje. Era lo mismo con aparatos algo más de futuro, e incluso muchos otros permanecían en la exacta misma manera. No digo que esté mal ni mucho menos, sólo que ese choque temporal, mientras se lee, es algo gracioso que no sé hasta qué punto baja la seriedad a las cuestiones existenciales del libro.

Most androids I've known
have more vitality and desire to live
thann my wife.

Ibid., p. 88.

Ahora bien, necesito hablar sobre la empatía y su prueba. En realidad, es algo preocupante porque no sé bien cómo explicarlo. Para comenzar, he de decir que las preguntas son perturbadoras. No en el mal sentido, sino que cuando intenté responderlas, muchas de ellas me llevaban a dudar de mi propia empatía hacia los demás. En casa los reto a que intenten contestar de una manera meramente empática y, lo que es más, a que intenten adivinar cuál podría ser la respuesta correcta.

The rehearsal will end, the performance
will end, the singers will die, eventualy
the last score of the music will
be destroyed in one way or annother;
finaly the name "Mozart" will vanish, the dust
will have won. If not on this planet
then another.

Ibid., p. 91.

Respecto a los personajes, creo que tengo algo más qué decir. Me agradó el principal, Rick Deckard, porque sus aspiraciones parecen extrañas a nuestra época pero reflejan por completo todo lo que el autor deseaba reflejar respecto al contexto donde viven y en el tiempo que deben hacerlo. Se trata de un personaje comunitario al que se sigue pero que, al final del día, no deja de ejemplificar lo que muchos otros personajes piensan o sienten dentro del mismo libro. Luego aparece su esposa que, a mi ver, también es de este tipo de personajes, que engloban a otros. Sin embargo, de ella no mencionaré su función para que, como yo, la piensen, la analicen y vean los pros y contras de la existencia de Iran dentro de la novela. Y por último pero no menos importante, desde luego, la androide: Rachel y su doppelgänger, Pris. Creo que en ellas se puede ver, principalmente, la idea de la falta de empatía. Son ellas dos, que al final pueden verse como una misma, las que expresan este polo a veces aterrador. Mucho más que el polvo radioactivo que mata lentamente a las personas que se quedaron en la tierra.
Enlace: https://librodeultratumba.bl..

En un futuro apocalíptico, donde la Gran Guerra de 2021 ha asolado a parte de los seres vivos del planeta, la huída a las colonias de Marte es la solución vital para parte de la población, mientras tanto, los menos favorecidos social e intelectualmente conviven en un mundo enfermo y devastado. Las especies animales, prácticamente extintas, se han convertido en indicadores del status social, hasta el punto que quien no tiene un animal intenta hacerse con su imitación eléctrica. Igualmente, los seres humanos, son replicados por las grandes empresas para use y disfrute de los pobladores de las colonias, llegando a ser, en sus modelos más evolucionados, indistinguibles del ser humano. Frank Deckard, cazarrecompensas a sueldo, sobrevive “retirando” y destruyendo a aquellos androides rebeldes que regresan a la Tierra escapando de la esclavitud de las colonias.

Más que famoso el argumento de esta novela, uno de los grandes pilares de la ciencia ficción, que además de su historia central, tecnológica y futurista, afronta otros grandes temas de la condición humana, religiosos, filosóficos, políticos y sociales, que le aportan gran profundidad y hacen que trascienda más allá de su premisa inicial.

Estamos ante la historia base de la famosa película de 1982 de Ridley Scott, Blade Runner, con su maravillosa estética ciberpunk y la magistral banda sonora de Vangelis. Lo curioso, es que, realmente, poco tienen que ver. La premisa es la misma, pero la historia es totalmente diferente, complementándose a la perfección. Esta es una de las pocas ocasiones en que me sería imposible elegir entre libro y película. Existe otra versión más actual, del año 2017, dirigida por Denis Villeneuve, correcta y que da la talla, pero que no le llega a la suela del zapato a la original.

Volviendo a la novela, el autor, propio de él, nos deja varios frentes abiertos, tramas en el aire, conceptos confusos e interpretables, simbolismos y la eterna duda de quién es androide y quién no. No por todo esto debemos pensar que estamos ante una novela densa o intratable, la lectura es ágil y la narrativa sencilla. Novela muy muy recomendable.