InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest

Noemí Sobregués Arias; (Traductor)
ISBN : 8439733844
352 páginas
Editorial: Random House (25/01/2018)

Calificación promedio : 4/5 (sobre 2 calificaciones)
Resumen:
Con el último volumen de esta aclamadísima trilogía, auténtico fenómeno literario más allá de nuestras fronteras, Virginie Despentes cierra de forma magistral este retrato demoledor de la sociedad contemporánea francesa. Vernon Subutex sigue siendo el DJ gurú que consigue transportar al nirvana al más incrédulo de los mortales y el nexo de unión de una comunidad idealista que vive al margen de la sociedad, pero la inesperada muerte de uno de sus miembros hace p... >Voir plus
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Críticas, Reseñas y Opiniones (1) Añadir una crítica
Guille63
 11 March 2023
Me van a permitir un ratito de desahogo.

“La cruda verdad de la humanidad son las carnicerías. Se trata solo de saber quién tiene derecho a ejercer la crueldad sobre quién.”

Así ha sido, es y será la historia de la humanidad desde que bajamos del árbol, es nuestro sino. Pero cada época tiene sus modos y maneras. Dentro de cien años, cuando alguien quiera saber cómo era el estado de la clase media en el mundo occidental de los inicios del siglo XXI no necesitará más que leer Vernon Subutex. Aquí se resalta cada arruga, cada mancha de la piel, cada grano, verruga o espinilla, pajera o no, de ese rostro nuestro que sigue retorciéndose en muecas a cuál más obscena y cruel y para el que, a pesar de todo, la autora no puede sustraerse a la esperanza de encontrar algún gesto de generosidad, alguna prueba, por mínima que esta sea, de que otro orden de cosas es posible.

En este jardín de las delicias que es Vernon Subutex, repleto de escenarios y personajes, violenta y divertida, comprometida y sexual, transgresora y conmovedora, certera y valiente, actual y clásica, Despentes pinta muchos de los males de nuestra época como la dictadura de lo políticamente correcto (La maternidad es como la ablación del clítoris —las tías se sienten obligadas a verificar que todas las demás pasan por el aro.), el progresismo hipócrita, la izquierda vendida, el pasotismo suicida, el eficiente torpedeo neoliberal y neofascista que consigue desviar su hedionda culpa hacia los musulmanes que quieren acabar con nuestra cultura democrática, hacia los extranjeros que nos quieren quitar el trabajo y follarse a nuestras mujeres, hacia los pobres que chupan de la teta del estado, que nos alerta del peligro que suponen las feministas, ese atajo de lesbianas despechadas, y toda esa banda de desarrapados y desocupados que se entretienen en armar bronca en favor de las causas más estúpidas.

En el disparadero está la clase media que todavía piensa que el origen de la situación de la que disfruta no tiene relación alguna con su código postal, que no acaban de entender que somos inquilinos de las situaciones, nunca propietarios, que han llegado a creerse ese imperativo cruel que sostiene que eres el carnicero o eres la vaca que tan bien encaja en su higienizada conciencia, que siguen como borregos a la bandera de los que no pagan impuestos, de los que abren cuentas offshore, de los que trafican, de los que no están sometidos a la ley común. La bandera del uno por ciento.

Despentes resalta la grave crisis de identidad que nos sacude y que nos empuja a definirnos únicamente en oposición a algo o a alguien, razas, orientación sexual, banderas, ideologías, géneros, religiones, solo soportamos lo similar y nos enfrentamos a todo lo distinto. Disfrutamos de la sensación de odio, nos proporciona energía, fuerza, algo en lo que creer. El objetivo no importa, es algo que hay que sacar de dentro y disfrutarlo, como un orgasmo, explosivo y relajante hasta la siguiente oportunidad (está claro que queremos mancharnos las manos de sangre, pero sin mala conciencia). El mundo occidental se abre en canal, las orillas se distancian en desigualdades cada vez menos recuperables, todo parece tender al bombardeo de los puentes que precariamente las unían hace no demasiado tiempo (La pobreza se ha extendido, como si hubieran volcado un saco de desgracia por las calles). Y en medio de todo este desastre, joder, nos hacemos viejos.

La novelísima trinidad de Vernon Subutex, tres partes pero una única sustancia, muestra, con una buena dosis de ironía y sarcasmo pero ni una gota de cinismo, una conmovedora ternura hacia este ser humano que quizás nunca sea capaz de andar por sí mismo, este inepto que siempre necesitará asirse a alguna cosa para poder moverse, sea ese algo un dios, un gurú, la droga o cualquier desvarío. En todo caso, seguramente la autora pensaba que sea lo que sea lo que nos espera, todo es mejor con música y así nos ofrece una banda sonora espectacular: bailad, bailad, malditos.

“Se llegó al agotamiento a fuerza de oír repetir hasta la saciedad: sólo hay una realidad posible, la de los grandes patronos con las manos totalmente libres, sólo hay un futuro factible, más liberalismo y cada vez más liberalismo. Sólo hay una interpretación válida de los hechos, y es que no se puede poner límites al mercado, nada debe impedir que los más ricos se queden con cada vez más, nada debe impedir que los poderosos traten a los sometidos como a esclavos. Hay que liquidar el legado del Frente Popular, de las huelgas de los años setenta, hay que acabar con la igualdad. Bastará con la libertad de consumir. Ya es mucho, no entienden de qué se queja el pueblo. Privatización de los beneficios, socialización de las pérdidas, demolemos el país para ponerlo al servicio de los bancos, y lo más preocupante de la historia es que le han metido en la cabeza a todo el mundo que no se puede hacer otra cosa.”

Por todo ello, quiero dar las gracias a Virgine Despentes: aunque lamentablemente la novela está especialmente dirigida a todos aquellos que nunca la leerán, alguien tenía que decirlo y pocos podrían haberlo dicho mejor.

Ya saben, Don't look up.
+ Leer más
Comentar  Me gusta         00

Las críticas de la prensa (1)
elperiodico14 May 2018
Prácticamente cada frase de la trilogía 'Vernon Subutex' contiene furiosa metralla sociopolítica
Leer la crítica en el sitio web: elperiodico
Videos de Virginie Despentes (3) Ver másAñadir vídeo
Vidéo de Virginie Despentes
Virginie Despentes, Rozalén y Raúl Gómez nos cuentan la experiencia de estar en Barcelona el día de Sant Jordi.
#SantJordi19 #DiaDelLibro
----
En Me Gusta Leer puedes encontrar el catálogo de todos los sellos de Penguin Random House Grupo Editorial, así como primeros capítulos, entrevistas, portadas y audiolibros.
SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES YouTube: https://www.youtube.com/megustaleer Facebook: https://www.facebook.com/megustaleerES/ Instagram: https://www.instagram.com/megustaleer/ Twitter: https://twitter.com/megustaleer/ Web: https://www.megustaleer.com/
otros libros clasificados: transexualidadVer más
Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro





Test Ver más

Música y Literatura

Una oda de Friedrich Schiller se escucha al final de su última sinfonía cantada por un coro.

Beethoven
Brahms
Bruckner

15 preguntas
36 lectores participarón
Thèmes : música , compositor , operaCrear un test sobre este libro