Ninguno de nosotros volverá

Mujer y roja, no había más excusa para deportar a Charlotte Delbo a un campo de concentración alemán. Después de despedirse de su pareja, al que fusilaron en la cárcel, Charlotte fue llevada junto con doscientas treinta presas francesas al campo de Auschwitz-Birkenau.

En este libro nos cuenta su paso por el horror de aquella experiencia y pone voz a las que no pudieron sobrevivir para contarlo. A través de una mezcla entre ensayo y poesía, Charlotte nos habla de estas vivencias y de las mujeres con las que compartió el miedo y la angustia durante el tiempo que las tuvieron allí encerradas.

No hay que dejarse engañar por la manera poética de narrar de Charlotte Delbo, porque el horror que cuenta no tiene filtro alguno, no se ahorra ningún detalle escabroso o desagradable. O lo tomas o lo dejas. Pero no puedes dejarlo, no puedes apartar la mirada, porque Charlotte y el resto de mujeres merecen que se sepa el horror por el que pasaron. Francesas, luxemburguesas, polacas, checas. Mujeres mayores, jóvenes, niñas. Un número sin identidad en un lugar peor que una cárcel.

Cuando leo esta clase de vivencias me pregunto cómo es posible que haya gente que mire hacia otro lado, que deje que esto pase. Es macabro saber que esto ha sucedido, y espeluznante el pensar que puede volver a pasar.

Un libro necesario, recomendable, al que hay que hacer hueco en nuestras estanterías. Porque Charlotte y el resto de personas que vivieron el terror de los campos de concentración no merecen menos.

No es una narración formal, no es una historia relatada de una forma ordenada; es una pesadilla continua rodeada, en contadísimas ocasiones, de algo de esperanza y un poco de luz.
En 1942 Charlotte Delbo y su marido fueron detenidos por fuerzas de la ocupación alemana en Francia por pertenecer a la resistencia. Fue encarcelada el 23 de mayo, el mismo día que fusilaron a su marido. "Niguno de nosotros volverá" es el testimonio de Delbo durante los veintisiete meses de su cautiverio en diversos campos de concentración, principalmente en el de Auschwitz-Birkenau.
"Hoy no estoy segura de que lo que escribí sea verdad. Estoy segura de que es verídico"
Con un estilo repetitivo, febril y austero, recorre sus días de tortura continuada. Las voces de sus compañeras, lastimeras, soñadoras, entristecidas, unidas por el mismo horror de hambre, sed, fiebres, piojos, cansancio, diarreas, se sujetan unas a otras, se ayudan a continuar para escapar de la pesadilla que les envuelve. A pesar de esto, la fuerza de supervivencia ataca en ocasiones librando la batalla contra el más débil. [...]entre los sollozos del viento, estertores. Ahogados al principio, luego nítidos, luego fuertes, tan fuertes que el oído que quiere situarlos los oye[...]Las compañeras de la moribunda, bajo los golpes de Stenia, la llevan fuera. La tumban en paralelo al muro, con la mayor delicadeza posible, y regresan y se acuestan[...]
En muchos momentos la consciencia del sufrimiento les ahoga arremolinadas entre golpes y correazos, entre gritos de correr, correr, mientras intentan escapar de los bastonazos repetidos a lo largo de un día exhausto, que no acaba nunca. Y así uno tras otro, sin diferencias, sin saber si llegará un final que las liberará del horror; la muerte o la libertad.
"Ninguno de nosotros debería haber vuelto" El lamento de una mujer que consiguió resistir mientras otras quedaron atrás.

Las vivencias de la autora dejan sin palabras. Es imposible llegar a imaginar tal grado de crueldad y sufrimiento.
Es un testimonio que a nivel lector se devora y te devora. Porque la persona que eres cuando empiezas con este libro no es la misma que cuando lo terminas.
No puedo decir más. Creo que es necesario leerlo y que nada de lo que pueda decir le hará justicia. Te puede gustar más o menos, pero es una lectura necesaria.

Esta edición recoge los dos primeros volúmenes de la trilogía de Charlotte Delbo:
'I - Ninguno de nosotros volverá'
+ II - Un conocimiento inútil'

El libro, envuelto por este retrato de dos supervivientes del campo de concentración de Kenzing (Austria), fue un regalo de Navidad que me dieron hace poco y que recomendaría leer a cualquier persona.

Me ha fascinado, y lo he saboreado pese a su crudeza, sabiendo que ese es el privilegio que me otorga la distancia y la confortabilidad de mi hogar.

A ratos lo he leído con un nudo en la garganta y la piel erizada, resiguiendo cada palabra y frase construida por Delbo - de forma bellísima, por cierto - y con las que narra episodios durísimos que la sacuden a una por dentro y la emocionan sin remedio.

No solo es el testimonio de la autora, también es la huella de la colectividad en la que las mujeres se sostuvieron, las unas a las otras, para soportar el espanto y la crueldad del nazismo. Es un puñal en las entrañas. Es el adiós a todo.

Nunca dejará de ser importante recordar, así que os dejo algunas de las frases y parágrafos que he subrayado durante la lectura y os recomiendo encarecidamente esta edición. Si deslizáis las fotos, encontraréis el argumento y la biografía de la autora. Ojalá os guste 💖
Enlace: https://www.instagram.com/p/..