Un thriller de principio a fin. Hay escenas de acción a cada vuelta de página. Los temas que trata son súper interesantes y hasta dan un poco de paranoia si te pones a pensarlo (habla de suplantación de identidad hasta dejarte en la miseria). El asesino tiene su par de capítulos y te va dejando caer cierta información de la que puedes ir tirando... Hasta que descubres que es quien menos lo esperas. A pesar de ser una saga (ésta es su octava entrega) el libro se puede leer muy bien. |