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*SINOPSIS Hace cuatro años, Ariadna una joven con la particularidad de tener un ojo completamente negro, despertó en un orfanato sin recordar nada de su vida pasada. Dejando de lado ese detalle, Ari es ahora una adolescente normal que vive en Madrid con una vida normal, con una familia que la ama y un novio que la adora, y tiene un sentido del humor increíble. Es feliz. Su vida parece un cuento de hadas. Uno de esos que de la nada se convierten en pesadillas. Y son, justamente, las pesadillas que empieza a tener Ari las que cambian todo. Ella, que en los últimos cuatro años no ha soñado nunca, empieza a tener sueños aterradores, en los que alguien la persigue sin piedad. Y no es que, cuando descubre el origen de esas ensoñaciones, la vida de Ari se modifica. No es tan suave. Lo que le sucede es más parecido a que una mano gigante, que no sabes de dónde salió, te arranque la piel y el corazón y te obligue a caminar en carne viva por planicies nevadas y desiertos, buscando tu corazón, que ha escondido quién sabe dónde. O algo así. *OPINIÓN PERSONAL No me había sentido tan angustiada con un libro desde que leí “Revival”, de S King. Página tras página se adentra en tinieblas cada vez más densas, sin esperanza de salvación o ayuda. Parafraseando a los videos de “Te lo resumo así nomás”, todo va relativamente bien hasta que empieza a ir desastrosamente mal. No me gusta spoilear, pero en este caso es muy difícil, porque la acción es tan veloz, y está tan magistralmente tejida por Cotrina que una cosa se relaciona con la otra, siempre. Ningún punto de la trama queda suelto, absolutamente ninguno. El trasfondo es un mundo doble, la Tierra Pálida, nuestra realidad, ambientada en ciudades como Madrid y Berlín, y el Universo entre Líneas, una realidad alterna, más bien un multiverso plagado de monstruos, donde cualquier cosa es posible, sobre todo las más malvadas, perversas y que más sufrimiento ocasionen a Ari, la protagonista. Realmente, el worldbuilding creado por Cotrina se parece bastante al infierno de Dante. Probablemente es peor. Al principio, el argumento puede resultar cliché: triángulo amoroso entre chica adolescente con novio terrenal y adorable y ex novio atractivo, oscuro y totalmente tóxico, que está medio loco y no deja de arrastrarla al peligro. Claro, la chica descubre que hay un mundo paralelo al nuestro que ella (des)conocía y que tiene ciertos poderes. El tóxico se encarga de guiarla en este mundo, mientras el bueno intenta que permanezca en el lado de la luz. Pero Cotrina retuerce la trama como lavandera sin secarropas automático, la da vuelta, la vuelve a retorcer y la rocía con todo el dolor y la maldad que puede encontrar. Basta, José Antonio, aunque sea fanática de King, mi corazón tiene un límite para las atrocidades. En fin, que es una novela maravillosa, cada segundo que pasas leyéndola estás viviendo junto a los protagonistas sus logros y desazones, y además, todos los personajes, hasta los crueles y malvados, son magníficos y terminas queriéndolos. O algo así. ¿Que si la recomiendo? ¡Claro que sí! Pero adéntrate en este mundo con la advertencia de Dante: “Abandona toda esperanza, tú que aquí entras” |
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