La pequeña panadería de la isla

Cuando lees la sinopsis te dices a ti misma: Vaya, otra historia de una chica, que cansada de la vida que lleva, se va un pequeño pueblo y se hace cargo de la librería, la casa de costura o en este caso de la panadería y todos sus problemas se solucionan. Ah y, por supuesto, encuentra el amor.
Pues sí, esta novela es sustancialmente eso mismo, pero está bien escrita, los personajes principales Polly, su amiga Kerensa, los hombres que las rodean y los habitantes del pequeño pueblecito de Cornualles se hacen simpáticos y la historia no es tan previsible como podría parecer.
Me ha entretenido y la he leído rápido, me he reído con el pequeño Neil (😜nunca imaginaríais quien es) y con el jovencito Jayden. Me ha gustado Huckle y me ha puesto de los nervios Reuben y me ha dado un poco de vergüenza ajena el bodorrio y no digo de quien.
Pero me ha gustado, lo he pasado bien y la recomiendo si queréis pasar un rato agradable sin darle demasiadas vueltas a la cabeza.
Y por supuesto una historia, que pasa en Cornualles tiene, para mí, ya mucho ganado. Me encantan las descripciones de sus costas.