Las chicas

¿De qué trata este libro? Las Chicas es una novela que se ambienta en la época de los 60 y nuestra protagonista se llama Evie, ella es una chica muy insegura que vive con su madre, sus padres están separados y su padre vive con su amante más joven. Evie no se lleva bien con su madre y su única amiga es su único contacto con el mundo fuera de su casa, cierto día vislumbra a un grupo de chicas que son todo lo contrario a ella, libres y despreocupadas, y Evie se “enamora” de ellas, por lo que comienza a convivir con ellas y, sin darse cuenta, se ve enganchada en un mundo de sexo, drogas y adoración al enigmático Russell. Las Chicas retoma, de alguna forma podríamos decir que es un retelling, la historia de Charles Manson y su Familia, pero enfocando la atención en las chicas que eran parte de esta Familia, en su pasado, en sus problemas, su amistad y sus arrepentimientos, convirtiendo a Russel en un personaje secundario y dándonos una perspectiva de lo que estas chicas vivieron para llegar a hacer lo que, en su momento, hicieron. ¿Se atreven a conocer esta historia?
Definitivamente Las Chicas será una de mis mejores lecturas del 2020 , y así de fuerte comenzamos esta reseña, hay tanto que contar de los sentimientos que tuve al leer este libro y lo mucho que disfruté la lectura, hay varios aspectos a comentar, en primer lugar tenemos la preciosa forma de escribir de la autora, Emma Cline tiene una prosa tan bonita y tan absorbente que con solo leer un libro de ella sé perfectamente que se convertirá en una gran pluma y que quiero leer cada cosa que escriba (hasta su lista del súper si se puede, gracias). Por otro lado, tenemos la temática que este libro toca, Emma ha asegurado en varias entrevistas que su intención siempre fue hacer una especie de “recreación” de lo sucedido con Charles Manson pero enfocándolo en las chicas que conformaban parte de su Familia (por no usar la palabra culto o secta); ¿Qué las había llevado a ese punto?, ¿Por qué jamás se rebelaron?, ¿Cómo es que ninguna se cuestiono jamás? Hay que admitirlo, Las Chicas resuelve estas preguntas de una forma maravillosa pues sus personajes están tan bien estructurados y estudiados que responden a la perfección las preguntas hechas anteriormente. La novela no solo nos retrata como es estar dentro de una secta/culto, también nos muestra como es la psicología de la persona que se encuentra adorando a otra y de la persona que se posiciona como el líder, personalmente me resulta algo sumamente interesante, pues creo que la forma en que Emma Cline retrata a sus chicas es extraordinariamente precisa y está muy bien sustentada.
La forma en que la historia se va desarrollando es maravillosa, tenemos una narración que da saltos entre el presente y el pasado, en el presente tenemos a una Evie de mediana edad que hace rememora los acontecimientos de su juventud pero que también nos ofrece hermosas y ácidas reflexiones y críticas sobre lo que es ser una mujer joven, sobre la necesidad de amor y validación que muchas mujeres sufrimos durante nuestra juventud y como la madurez ayuda a observar todo esto con ojos mucho más críticos, en el pasado tenemos a una Evie de 14 años, tímida y retraída que vive obsesionada por la validación externa, una chica intentando encontrar su lugar en el mundo, perdida y sin ninguna guía…hasta que a su vida llega Suzanne. Suzanne se convierte, rápidamente, en el centro de la vida de Evie y si ella entra al culto/secta de Russell es solo para estar cerca de su guía (Suzanne), de alguna manera sentí que hasta había cierta tensión sexual entre las dos, Suzanne es una joven extrovertida, segura de sí misma, valiente y muy desafiante, mayor que Evie y absolutamente increíble (al menos a los ojos de nuestra tierna protagonista), podríamos decir que Suzanne es la líder de las chicas que conforman este grupo, es la que mayor autoridad tiene y la que parece tener una relación más cercana con Russell. Suzanne es quien lleva a Evie a lo que ellos denominan como “el rancho”, un sitio abandonado que todo el grupo ha adoptado como su hogar, donde duermen en colchones viejos, usan letrinas y hay una higiene bastante dudosa, pero para Evie se convierte en un paraíso de libertad y de adoración a Suzanne y así, poco a poco, comienza a formar parte de esta extraña familia y a través de sus ojos vemos el lento descenso de todos hacia un punto en el que no hay retorno, pero también vemos como ella comienza a cuestionarse si realmente todo lo que brilla es oro. La novela tiene una conclusión magnífica, una mezcla entre nostalgia, melancolía y arrepentimiento y funciona de forma maravillosa en conjunto con toda la trama, convirtiendo así a Las Chicas es una novela maravillosa y que vale mucho la pena, además, y esto es ya más personal, tuve la oportunidad de escucharla con está playlist de Spotify y me dio una experiencia mucho más completa y realmente me sentí transportada a la época. ¡Altamente Recomendable!

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