 |
Agatha Christie escribió en 1940 dos novelas que decidió guardar en una caja fuerte durante años. Una de ellas es Telón, que nos sirve para despedirnos de uno de los más insignes detectives de la novela policiaca. Un personaje capaz de escribir en 1936 una carta a los editores de Agatha Christie para hacerles comprender mejor quién y cómo es. Se sabe que Agatha llegó a odiar a Poirot, pero también que ella sabía que el belga ganaría la batalla una vez más, así que decidió darle un último caso a su altura y cerrar el círculo. El mismo lugar y la misma compañía que nos lo dieron a conocer nos acompañan en su despedida: Styles, un homicidio y Hastings. Un Hastings que, en esta ocasión, está a la misma altura que un Poirot envejecido y enfermo, pero que decide despedirse a lo grande. Tan a lo grande lo hizo que el New York Times le dedicó un obituario. Libro imprescindible para los amantes de Agatha Christie, para todos aquellos que disfrutan viendo al belga utilizar sus células grises y para los amantes de la novela policiaca en general |
>
