La ratonera

Todas (las personas) son interesantes, absolutamente todas... Porque nunca se llega a saber realmente cómo son o qué es lo que piensan en realidad.

-Supongo que es usted socialista.
-Oh, yo no diría eso. No soy roja..., solo rosa pálido.

Tres ratones ciegos,
Tres ratones ciegos,
Miren como corren,
Miren como corren,
Todos corren detrás de la mujer del granjero.
Cortó sus colas con una navaja de carnicero,
¿Ya vieron espectáculo tan horrible,
Como tres ratones ciegos?

Las europeas se toman los cumplidos como algo natural, pero las inglesas se quedan sin espíritu femenino por culpa de sus maridos. Los maridos ingleses tienen un no sé qué que resulta muy grosero.

Siempre he pensado que es mejor dejar las explicaciones para el final. Ese último capítulo tan emocionante, ya me entiende.

La vida es lo que una quiere que sea. Hay que seguir adelante… sin mirar atrás.

De todos modos… ¿quién sabe?… Aún puede que sea
yo el último en reírse.

Las conversaciones siempre son peligrosas si se quiere ocultar alguna cosa...

Las únicas personas que saben realmente cómo son los demás son los artistas… ¡y no saben porqué lo saben!