El tren de las 4.50

Otra novela de Agatha Cristie que me ha encantado, y es que pocas veces defrauda.
En este caso, la prota, en vez de Hercules Poirot será Miss Marple, una viejecita encantadora que indagará en todo, sorprendiéndote la manera que tiene de pensar.
En este caso, la historia comienza con Elspeth Macgillicuddy, que se encuentra en el tren de las 04.50 con dirección a Saint Mary Mead donde se encontrará con su amiga Miss Marple. Durante el viaje, presenciará, justo en el cruce con otro, un asesinato, verá como un hombre está estrangulando a una mujer, y ella será incapaz de hacer nada por ayudar a la víctima. Entre Miss Marple y Elspeht así como los detectives de Scotland Yard, se pondrán manos a la obra para encontrar al asesino. Como es costumbre en Agatha, irán apareciendo personajes y personajes, pero la verdad que no se hace nada pesado. La historia es mu ágil y fluida y te mantiene enganchada desde el principio.
Y como siempre, un final inesperado, hice mil hipótesis pero ninguna era la correcta, siempre tiene un final impactante preparado y la verdad que es lo mejor.